Mar del Plata es una de las ciudades costeras más turísticas de la provincia de Buenos Aires. Allí se encuentra la Villa Victoria, ahora convertida en el Centro Cultural Victoria Ocampo. La escritora de la revista Sur poseía esta casona como lugar de veraneo. Luego de su muerte, el municipio de General Pueyrredón la conservó como museo y sede de actividades culturales.
Les marplatenses están acostumbrades a las pendientes. Las calles en la ciudad marítima no son planas, sino que están llenas de subidas y bajadas. Para llegar a la Villa Victoria es necesario subir una empinada colina, hasta arribar a Matheu al 1851, donde se encuentra el Centro Cultural.
La ciudad parece lejana en este barrio de chalets que se pierden entre los árboles. Allí, la Villa Victoria Ocampo ocupa toda una manzana. Está rodeada por una ligustrina de arbustos, que impide a los ojos humanos observar toda la casona en su esplendor.
En la puerta, une trabajadore del Centro Cultural espera en una cabina para cobrar la entrada. Los precios son accesibles: $150 es el costo en general, $100 para les marplatenses. Se puede visitar de jueves a domingo de 14 hs a 18 hs, aunque en las vacaciones de invierno se agrega el miércoles. En tiempos de COVID 19, el aforo es de veinte personas como máximo.
Al traspasar la entrada, la casona sorprende. Sus techos con tejas rojas a dos aguas cubren las paredes de madera amarillo pastel. El armonioso conjunto se completa con sus puertas, balcones y barandas pintados de blanco. Alrededor, un prolífico jardín con caminos de piedras y árboles verdes plantean una gran duda a les turistes: ¿por dónde arrancar el recorrido?
De casa de veraneo a Centro Cultural
La casona pertenecía a la escritora Victoria Ocampo, quien la utilizaba como lugar de veraneo. Fue construida en 1912, para Francisca Ocampo de Ocampo, tía abuela y madrina de su futura propietaria. Se trasladaron los materiales en barco desde Inglaterra, para luego armarla en esta colina marplatense. En aquellos años no había edificios, por lo que desde sus ventanas podía observarse el mar.
El conjunto se completaba con la casa de los caseros y una tercera construcción destinada a vivienda para el personal de servicio. Hoy, esos edificios de piedra flanquean la izquierda y derecha de la casona.
En la década del ’20, Victoria la heredó. Allí recibía a escritores y amigues del país y del exterior, como María Rosa Oliver, Enrique Pezzoni, Eduardo Mallea, Jorge Luis Borges, Bioy Casares, entre otres.
Después de la muerte de la escritora, la Municipalidad de General Pueyrredón compró el hogar en 1981. Desde ese entonces funciona allí el Centro Cultural Victoria Ocampo. Tanto la casa como el parque que la rodea fueron declarados de “Interés Patrimonial” y “Sitio Histórico Arquitectónico”.
¿Quién era Victoria Ocampo?
Además de disfrutar de la belleza de la casa, lo más interesante al visitarla es descubrir la historia de su antigua dueña. Victoria Ocampo fue una activista feminista y representante de la cultura argentina en una época donde la mujer aún no era bien recibida en diferentes ámbitos.
¿Cómo lo logró? Quizás fue por su carácter intrépido. También ayudaba su posición económica, ya que nació en 1890 en el seno de una de las familias fundadoras del país. Sus logros son numerosos, imposibles de nombrar todos en breves párrafos.
Impedida por su padre para profesar como actriz, Victoria Ocampo se dedicó a la escritura. Fundó la mítica Revista y Editorial Sur, una publicación cultural argentina en la que se difundieron las obras de autores nacionales y extranjeros. Allí colaboraban autores como Silvina Ocampo (su hermana), Bioy Casares o Jorge Luis Borges.
Otro dato interesante sobre Victoria: fue la única mujer invitada a los juicios de Nuremberg, donde se condenó a personas claves dentro del regimen nazi luego de la Segunda Guerra Mundial. Sobre esta experiencia publicó una serie de diez tomos llamada «Testimonios».
En su larga vida fue una activista por los derechos de las mujeres. Por ejemplo, fue presidenta y cofundadora de la Unión de Mujeres Argentinas, junto a Susana Larguía y María Rosa Oliver. En 1936 lucharon para impedir la promulgación de una reforma a la ley 11.357 de 1926, que pretendía quitar los derechos civiles a la mujer ya concedidos.
La lista de logros continúa. Fue parte del Directorio del Fondo Nacional de las Artes y la única mujer designada como miembro de la Academia Argentina de Letras en 1977.
Falleció a los ochenta y nueve años el 27 de enero de 1979. Su vida es un ejemplo de lucha por devolver a la mujer el lugar que le pertenece, desde el campo de la cultura. Por eso, conocer su casa de veraneo es adentrarse un poco más en su historia.
¿Qué ver en el Centro Cultural?
Ingresar al interior de la casa es como un viaje en el tiempo. Se pueden recorrer la totalidad de sus habitaciones, cada una tiene algo particular. Contienen números de la Revista Sur y mobiliario original de la casa. También elementos de la muestra “Victoria Ocampo: A contrapelo”, que comparte escritos de la propietaria del hogar en diferentes publicaciones.
Después de recorrer el piso inferior, una escalera con alfombra roja y paredes con empapelado floreado llevan al segundo piso. Allí, un largo pasillo con pisos de madera y muros blancos conecta distintas habitaciones.
Algunas muestran cómo eran los baños hace unos cincuenta años. Otra es la pieza de Victoria, con placares blancos, tocadiscos y cama adoselada. En todas las ventanas se tiene una vista privilegiada de la ciudad de Mar del Plata, y a lo lejos, el celeste del mar argentino.
Actividades culturales
Además de recorrer la casa y su jardín, en la Villa Victoria se pueden realizar diferentes actividades. En estas vacaciones de invierno habrá shows para niñes, con títeres, payasos, magos y música en vivo. Por otra parte, en el Centro Cultural se dictan cursos y talleres de fotografía, coro para adultes, jardinería y yoga. La información de días, horarios y precios se puede encontrar en el siguiente link.