El día de ayer, tras el triunfo de la selección argentina, el país festejó desde distintos puntos de Buenos Aires y las provincias. Con banderas de diferentes tonalidades de celeste y azul, algunas con las caras de los más grandes, Diego Armando Maradona y Lionel Messi, se llevaron a cabo festejos en grande.
El distrito más conocido por poseer el aeropuerto más grande del país y estar a un paso de la Asociación Fútbol Argentino (AFA), Ezeiza, comenzó a llenarse. En sus calles, hinchadas de familias iban rumbo a la estación central.
Cabe destacar que anteriormente se había realizado un festejo similar al entrar Argentina a la final. Pero lo que se pudo visualizar en la tarde del domingo, no se compara con el pasado martes 13 de diciembre.
Con tambores neutros y personalizados que acompañaban a los cánticos tan icónicos, hinchas de corazón albiceleste expresaron su felicidad al ganar después de 36 años.
Un sentimiento que se expresa en canciones
Al ser un partido tan importante, los goles que se fueron llevando a cabo en las calles de Ezeiza se trasladaban en festejos que hacían temblar la tierra. Nota al Pie estuvo presente en la celebración multitudinaria y dialogó con familias que se encontraban allí.
Así fue que un padre con sus hijes festejando se expresó con lágrimas en la cara y la canción “Muchachos” de La Mosca Tsé-Tsé de fondo. “Este mundial para mí fue el más importante, porque pude vivirlo con mis hijos. Mi cábala eran ellos, mí familia en sí. Estoy muy feliz”.
Por otro parte, acercándose cada vez más a la multitud albiceleste, se podían apreciar cánticos icónicos como el que reza: “Yo soy así, soy argentino, ingleses p… de Malvinas no me olvido. Yo soy así, vengo a alentarte, a la Argentina yo la sigo a todas partes” repetidas una y otra vez.
“Muchachos” y su letra en cada corazón de les argentines
Esta canción que logró identificar tanto a les argentines a lo largo de los partidos en Ezeiza se acompañó con bailes, bebidas, saltos, besos y abrazos. Incluso, tanto el martes pasado como ayer la canción se volvió cada vez más especial y significativa.
Junto al triunfo, al finalizar el partido, en las calles se podía apreciar a cientos de personas que salían de sus casas, con remeras de Argentina y equipos como River Plate, Boca e Independiente.
Entre las personas se veían y decían “ganamos, somos campeones mundiales”. Además, sonaban bocinazos de los distintos autos y personas desde las ventanas recitando lo mismo o silbando.
Ezeiza, un punto importante de encuentro
Fue un claro ejemplo de festejo cuando en distintos momentos la hinchada, que reside en distintos puntos de Ezeiza, se acercaba a disfrutar de lo que estaba sucediendo.
La celebración duró hasta las casi 12:30 de la noche. En este lapso hubo personas con sus discos y cocinando chorizos para que la gente pueda disfrutar de un especial choripán argentino.