Día tras día la tecnología no deja de avanzar y cada vez permite mayores beneficios al momento de llevar adelante ciertos proyectos. En el marco de un nuevo aniversario del secuestro de Clara Anahí Mariani en 1976, aún continúa su búsqueda con nuevas herramientas modernas. La Asociación Anahí inauguró su sitio web, donde crearon un recorrido virtual de 360° de la casa en donde transcurrió uno de los más feroces ataques de la dictadura.
La casa en cuestión se ubica en las calles 30 entre 55 y 56 de la ciudad de La Plata. Allí tuvo lugar uno de los más violentos ataques de las fuerzas represivas de la dictadura, el cual provocó varias horas de balaceras. También se registró el disparo de un proyectil de tanqueta, el cual dejó una enorme marca en el frente que aún puede verse. Con la intención de que no se olvide del hecho, la Asociación busca que la historia recorra todo el globo con la esperanza de hallarla.
El acontecimiento ocurrió el 24 de noviembre de 1976, cuando Clara Anahí Mariani fue apropiada con tan solo tres meses de vida. Antes del secuestro, fueron asesinades cuatro militantes políticos y Diana Teruggi, madre de la niña, quien fue acribillada por la espalda, al caer cubrió a su hija.
El ataque comenzó con fuerzas represivas alojadas fuera de la casa y duró varias horas. En ese eterno lapso de tiempo mataron a Roberto César Porfidio, Daniel Mandiburu Elicabe, Juan Carlos Peiris y Alberto Oscar Bossio.
Dentro de la vivienda vivía Diana junto a su esposo, Daniel Mariani, y la beba, mientras que en el fondo funcionaba la imprenta de la revista “Evita Montonera”. Este artículo gráfico denunció por primera vez la desaparición de personas, los “vuelos de la muerte” y la existencia de centros clandestinos de detención. Durante la barbarie, el esposo de Diana no se encontraba en la casa, pero fue asesinado el 1 de agosto de 1977.
Luego de lo sucedido con los padres de Clara, fue su abuela paterna, María Isabel “Chicha” Chorobick de Mariani, quien no dejó nunca de buscarla. La mujer, esposa del músico pampeano, Enrique Mariani, realizó una incansable búsqueda para dar con el paradero de su nieta hasta el 2018, año en que falleció.
Hasta la fecha, Clara no ha sido recuperada, ni se ha obtenido información de ella, quien en la actualidad tendría 46 años.
El motivo del proyecto tecnológico
Para profundizar sobre el recorrido virtual, Verona Demaestri, periodista y docente encargada de los contenidos de la Asociación, explicó su origen. “Armamos este recorrido porque la visita a la casa tiene un límite de presencialidad para cuidarla, en pandemia estuvo cerrada”, comentó a la agencia Télam.
Además, añadió que “se nos ocurrió duplicar la posibilidad exponencialmente para que puedan visitar virtualmente en cualquier parte del mundo, exiliados, hijos de exiliados, nietes”.
Por otro lado, remarcó que “está en dos idiomas, castellano e inglés y la idea es hacerlo en más idiomas para que trascienda fronteras”. Lo que apuntaba a que hay mucha gente que no llega o no puede llegar físicamente a la casa, la cual en 2003 fue declarada Sitio de Memoria. Incluso resaltó que “hay fotos de Diana, de Daniel, de Chicha, para que Clara Anahí las vea, sepa quiénes fueron sus padres, sus afinidades”.
También subrayó que “figura quienes mataron a sus padres y qué condena recibieron”, además de fotos de ella de bebé. Por último, hizo hincapié en que se encuentra “el relato de Chicha cuando ella nació y la incansable búsqueda posterior, que nos llegó a todo un pueblo”. De este modo, con los focos dirigidos a encontrar a Clara Anahí y visibilizar el horror de la dictadura, es que la Asociación creó el recorrido virtual.
El recorrido virtual por la casa de Clara Anahí Mariani
El proyecto recibió ayuda del Fondo Nacional de las Artes y de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) para poder estructurar su formato. De esta manera se pudo ampliar todo lo que en él se encuentra, como la información y producción sobre Chicha Mariani. A primera vista, el recorrido deja ver la fachada de la vivienda con la marca del proyectil y otros varios impactos de bala. Luego en cuanto al interior, permite visualizar las distintas habitaciones.
Entre las salas de la casa se aprecia el living, el comedor y el baño, en el cual Diana logró resguardar a su hija. Lo hizo dentro de la bañadera para alejarla de las ráfagas de balas que atravesaban la vivienda familiar. En cuanto a la cocina se puede hallar un poema de Juan Gelman que demuestra la realidad que se vivió allí: “Tal vez el mundo cabe en una cocina”.
Por otro lado, también se puede recorrer el patio, donde se observa el limonero que plantó “Chicha” para reemplazar el que se perdió tras la tragedia. Los militares ocasionaron un incendio luego de asesinar a les ocupantes y llevarse a la bebé que consumió al árbol.
En el mismo sitio se visualiza la pared falsa que conducía a la imprenta. De un modo tan vívido se puede apreciar la camioneta que la pareja usaba para las tareas de militancia y el traslado de compañeres. Ese mismo vehículo se utilizaba para transportar las cajas de la gráfica ocultas debajo de frascos de conejos en escabeche.
Detalles que impresionan
Dentro de uno de los ambientes de la casa, se puede ver y escuchar con claridad a Osvaldo Bayer en el momento en que la estructura fue designada Sitio Memoria. Durante ese trayecto se oye como Bayer exige “justicia y el regreso de quien para nosotros es la pequeña Clara Anahí”.
Además, detalló que “este es el futuro de esta casa, el punto de encuentro de regreso de Clara Anahí con la alegría infinita de sus seres queridos”.
También mencionó a quienes hayan visto y conocido a sus padres, quienes estarán mirando la escena con esa sonrisa con la que miran para siempre desde sus jóvenes rostros. Eso hace hincapié en lo que representa la casa para muchos. Entonces, especificó que la casa será como la de Ana Frank, en Amsterdam, símbolo del genocidio de Auschwitz.
“Los docentes de la dignidad tendrán que traer sus alumnos a esta casa”, indicó Bayer. A lo que justificó: “Para que vean lo que es el Terror de Estado con sus implicancias de brutalidad y deshonestidad”. Todo bajo la idea de que no se olvide lo que la historia argentina contempló en la dictadura con incontables tragedias.