El Reino Unido se encuentra sumido en una crisis sin precedentes. Después de un año de grandes e importantes medidas de fuerza, diciembre no será la excepción. Esto se debe a que les trabajadores de diversos sectores planean continuar con sus planes de lucha durante todo el mes.
En “el invierno del descontento”, como lo llama la prensa británica, el Reino Unido podría sufrir una paralización masiva de sus servicios básicos. La consigna de les trabajadores, a pesar de los matices propios de cada sector, es clara: mejores salarios para enfrentar el aumento en el costo de vida.
Cabe mencionar que el plan económico del gobierno de Rishi Sunak, presentado hace dos semanas, no hizo más que agudizar el conflicto social. Bajo la excusa de otorgar estabilidad a largo plazo, los conservadores anunciaron un paquete de medidas que pretenden no solo aumentar los impuestos sino también reducir de forma drástica el gasto público. En otras palabras, se trata de un feroz ajuste.
Los sectores que van al paro
El pasado 25 de noviembre, el sindicato de enfermería del Reino Unido, denominado Real Colegio de Enfermería (RCN), anunció dos días de huelgas en reclamo de mejoras salariales. En consecuencia, el 15 y 20 de diciembre se llevará a cabo el primer paro de la historia del sistema de salud público britanico. Asimismo, unos días más tarde, el personal de ambulancias de Inglaterra votó a favor de sumarse a los paros anunciados por el RCN.
Por otro lado, luego de la realización de una histórica huelga, el Sindicato Nacional de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte (RMT) declaró la continuidad de su plan de lucha. Así, más de 40.000 trabajadores realizarán un paro del 13 al 17 de diciembre, incidiendo de manera directa en el desplazamiento de millones de personas.
A su vez, 115.000 trabajadores del Royal Mail, la gran empresa de correos británica, anunciaron el cese de tareas durante los días 9, 11, 14, 15, 23 y 24 de diciembre. Les trabajadores nucleados en el Sindicato de Trabajadores de la Comunicación (CWU) sufren un grave deterioro de sus condiciones laborales desde que, en el 2013, el gobierno de David Cameron decidió privatizar la empresa.
Por su parte, el sector de la educación no es ajeno a la ola de huelgas que paraliza al Reino Unido. El pasado 24 de noviembre, iniciando el paro más grande de la historia del sector, más de 70.000 trabajadores nucleados en el Sindicato de Universidades y Colegios del Reino Unido (UCU) reclamaron por sus derechos en las calles. Durante diciembre, aunque todavía no se definieron fechas, se espera la continuidad de las jornadas de lucha.
El aumento en el costo de vida de Reino Unido
Durante noviembre, en el Reino Unido, la inflación aumentó un 12,4% con respecto al año anterior. Dicha cifra representa un aumento interanual récord en las últimas décadas para el país. Además, según informó la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS), los precios del gas aumentaron un 130% durante el 2022, mientras que el precio de la electricidad registró un incremento de casi el 66%.
Según comunicó la British Retail Consortium, una asociación comercial de referencia para empresas minoristas, los precios generales en las tiendas británicas tuvieron un aumento del 7,4% respecto a noviembre del año pasado. De esta manera, la sociedad británica se encuentra a la espera de los días festivos con una dramática suba de los precios.
En noviembre, el Banco de Inglaterra alertó que el Reino Unido tendrá que enfrentar la recesión más larga desde que la entidad comenzó sus registros. Unas horas más tarde, al presentar el plan económico ante el Parlamento, el ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, advirtió que la situación económica no mejorará en el corto plazo y que durante el 2023 el PBI se contraera un 1.4%.