A nivel mundial, las cifras sobre violencia sexual que sufren niñes y adolescentes son alarmantes. Según registros, una de cada cinco niñas y uno de cada 13 niños son víctimas de abuso antes de cumplir 18 años. Por desgracia, esta problemática también se replica en la Argentina y más de dos millones de chicas y chicos están expuestes a situaciones de riesgo.
En la mayoría de los casos, el 80% de les agresores adultes pertenecen al ámbito familiar de la víctima. Además, se calcula que de cada mil casos de abuso sexual, solo cien se denuncian y apenas uno recibe condena.
Sin embargo, la problemática no termina ahí. El trato mediático que se hace sobre estos temas también es preocupante si se tiene en cuenta la exposición y revictimización a la que pueden ser sometides les niñes y adolescentes.
En tanto, la falta de información respecto a los modos que se utilizan para cubrir y comunicar estas situaciones muchas veces termina siendo también una cuestión perjudicial para las víctimas.
En ese sentido, el pasado martes la Fundación Red por la Infancia presentó un manual con herramientas y recomendaciones escrito por y para periodistas. Bajo el título “Guía urgente para comunicar con perspectiva en niñez. Violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes”, ofrece una mirada simple pero rigurosa sobre cómo abordar esta temática de una manera respetuosa.
El rol fundamental del periodismo en estos casos
Elaborada bajo una perspectiva de género y niñez, la guía entiende a los medios de comunicación como “un eslabón estratégico e imprescindible para poder visibilizar la magnitud de la problemática y sus consecuencias”. No obstante, desde la Red por la Infancia advierten que la desinformación en estos casos “pueden replicar falsas creencias y abordar la temática sin tener en cuenta los derechos de niñas, niños y adolescentes víctimas”.
Al respecto, la fundadora de Red, Paula Wachter, comentó que esta guía nació como ”parte de una discusión a nivel global en la cual la pandemia fue un gran impulsor ya que se agravaron las violencias contra los chicos”.
Asimismo, sostuvo que el rol del periodismo “es fundamental para romper estereotipos, superar prejuicios y contribuir a la construcción de una sociedad que protege a las infancias”.
Por otra parte, Wachter también se refirió al “rol social” y la importancia de romper con el tabú del “no te metas” e involucrarse, ya que de esta manera se consigue que las víctimas sean escuchadas.
De la jornada desarrollada en la sede porteña de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) participaron, además de Paula Wachter, el secretario de Medios de la Nación, Juan José Ross; el defensor Adjunto de Niños, Niñas y Adolescentes de la Nación, Facundo Hernández; y la psiquiatra infanto-juvenil y especialista en abuso sexual, Silvia Ongini.
Los objetivos de la guía urgente
Además de por qué es necesario darle más visibilidad a las violencias contra chicas y chicos, la guía explica cómo evitar la revictimización y cuáles son las palabras adecuadas, junto con sus motivos. Asimismo, incluye las legislaciones vigentes; qué tipo de imágenes usar y un recursero con información de servicio.
Por otro lado, también resalta los objetivos a los que deberían apuntar las entrevistas y las coberturas. En ese sentido, desde la Fundación Red por la Infancia proponen:
- Hacer visible la magnitud de la problemática.
- Ampliar el llamado para fortalecer la prevención.
- Reforzar la idea de que todas las violencias se pueden prevenir.
- Explicar las diferentes formas de abuso sexual contra niñas, niños y adolescentes, y dejar en claro que todas son igual de dañinas.
- Desmitificar falsas creencias.
- Hablar del daño que el abuso puede provocar a corto, mediano y largo plazo, y la importancia de la detección temprana y el acceso a un tratamiento adecuado.
- Dejar en claro que las víctimas no son responsables de su situación. Colocar la culpa donde tiene que estar: en los abusadores.
- Dar información de servicio: señales de alerta, cómo tener una escucha asertiva, qué hacer en caso de sospecha, dónde denunciar o asesorarse, etc.