Este jueves la Fundación Instituto Leloir celebra sus 75 años de vida. Un espacio dedicado a la producción de conocimiento científico, a la búsqueda de nuevas herramientas y tecnologías que contribuyan en la prevención, diagnóstico y tratamiento en distintas áreas de salud.
La historia de la fundación
La fundación nació un día 3 de noviembre de 1947 en el barrio de Palermo. No obstante, su primer nombre fue Instituto de Investigaciones Bioquímicas Fundación Campomar, dirigido por Luis Federico Leloir, presidente hasta el día de su fallecimiento en 1987 y ganador del Premio Nobel de Química en 1970.
Un lugar que no solo se dedica a la investigación científica, sino que también a la docencia superior en bioquímica, así como en biología celular y molecular. Además, hace más de 70 años que es símbolo del desarrollo y de la producción de conocimiento en ciencias de la vida.
En el año 2000, desde el instituto tomaron la decisión de rebautizar su nombre. De este modo, la fundación pasó a llamarse Fundación Instituto Leloir, en honor a su destacado investigador. Actualmente, su sede se encuentra frente al Parque Centenario de la Ciudad de Buenos Aires.
Pura vocación
El centro de investigación cuenta con 24 laboratorios donde 250 profesionales trabajan día a día para perpetuar el legado del instituto. Las investigaciones que tuvieron y tienen lugar dentro de él contribuyeron a posicionarlo como uno de los más reconocidos. Su prestigio no solo se extiende dentro del país, sino que es una referencia de la ciencia en América Latina y el mundo.
Desde su sitio web, remarcan la labor de sus investigadores y aseguran que es gracias a su trabajo que el instituto alcanza sus logros. En esta misma línea, remarcan que todo es posible gracias al apoyo económico de organismos estatales e internacionales, así cómo de las diversas fundaciones, empresas e individuos que apoyan a la ciencia.
Mejorar la calidad de vida
Durante la pandemia la FIL participó activamente de las investigaciones sobre la situación epidemiológica del país. Uno de estos proyectos fue el desarrollo del test Covidar, el cual ofrecía la posibilidad de calcular la cantidad de anticuerpos contra el Sars-Cov-2.
En la fundación “se estudian los mecanismos moleculares detrás de enfermedades como el parkinson, el alzheimer y el cáncer para colaborar en la búsqueda de posibles terapias”, comentó Ángeles Zorreguieta, directora, en diálogo con Télam.
Según la directora de la fundación “otro de los estudios que se llevan adelante en el centro está relacionado a cómo las plantas se adaptan a su entorno, con el fin de encontrar soluciones frente al cambio climático”. Además, se realizan análisis sobre el dengue y el zika para buscar y desarrollar herramientas que prevengan la dispersión de estos virus.
Un lugar para crecer y seguir estudiando
La Fundación Instituto Leloir es una entidad reconocida cómo de interés público, sin desprenderse de la gestión privada. El equipo de investigadores que compone la FIL recibe un sueldo del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), aunque su funcionamiento también es financiado mediante las donaciones y aportes de otros organismos oficiales.
Por otro lado, muches de sus investigadores son jóvenes que llegan de distintas universidades del país para realizar allí sus pasantías, tesis de grado o estudios de posgrado. La fundación también cuenta con una agencia de noticias. Esta fue fundada en el 2006 y realiza publicaciones exclusivamente científicas de la Argentina.