A doce meses de que el gobierno de Nayib Bukele en El Salvador haya apostado fuertemente a la oficialización del bitcoin como moneda de cambio con una inversión de 100 millones de dólares, se perdió más de la mitad del dinero y especialistas califican el experimento como un “fracaso”.
El 7 de septiembre de 2021, El Salvador se convirtió en el primer país a nivel mundial en adoptar el bitcoin como moneda de curso legal. Para esto, Bukele utilizó 100 millones de dólares del Tesoro para comprar 2.382 bitcoins, que a la fecha valen 48 millones de dólares.
Debido a la alta volatilidad del bitcoin y a la insuficiente aceptación por parte de la población, el país caribeño se encuentra cerca del impago de su deuda.
Sobre la Ley de bitcoin
El Salvador cuenta con la Ley Bitcoin, que obliga a los comercios a aceptar transacciones en dicho activo, además de determinar que el tipo de cambio entre bitcoin y el dólar estadounidense “será establecido libremente por el mercado”.
Pese a esa norma, la aceptación de la criptomoneda como moneda de cambio en el país centroamericano fue solo del 20%.
El bitcoin es una criptomoneda digital y utiliza un cifrado criptográfico para garantizar su seguridad. Con la Ley Bitcoin, el Gobierno de El Salvador creó un fideicomiso en la criptomoneda que le permitía tomar ganancias de manera constante sin necesidad de vender sus activos. Esto último con el fin de tener un ingreso para obras de infraestructura.
Para este año el gobierno salvadoreño tenía previsto el lanzamiento de bonos bitcoins que iban a buscar un financiamiento de mil millones de dólares. La medida se dio para aumentar las tenencias en criptomonedas del Estado y construir la “Bitcoin City”; un paraíso fiscal exento de impuestos con cero emisiones de CO2 y con minería de criptomonedas.
“Los debates en El Salvador en torno a las criptomonedas”
Desde el inicio el proyecto fue criticado por organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial. Además, a fines de septiembre de 2021 el Banco Popular de China emitió un comunicado donde consideraba que toda actividad vinculada con las criptomonedas es “ilegal y delictiva”.
A su vez, hubo contradicciones en el propio país, ya que la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social había advertido que la relación entre el bitcoin y el dólar es “altamente volátil”.
Sobre la oficialización del bitcoin
En noviembre de 2021, con la oficialización del bitcoin, la economía del país atravesaba serios problemas estructurales. En ese marco, la deuda creciente y el constante déficit comercial creaba una escasez de dólares que ponía en riesgo a la economía. A su vez, la escasez se compensaba con el envío de dinero a familiares por parte de salvadoreñes residentes en Estados Unidos; suponiendo más del 25% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021.
Una medida que podría llevar a El Salvador al colapso
El paquete de 52 reformas propuesto por el presidente Bukele se basó en atraer capital externo a través de incentivos fiscales. También ofreciendo la nacionalidad a inversores utilizando el bitcoin y la tecnología blockchain como instrumentos de liberalización económica. Aunque esta iniciativa atrajo un gran interés mundial, no está teniendo los efectos esperados y podría llevar a la economía de El Salvador al colapso.
El pasado 4 de mayo, la agencia Moody’s anunció que reducía la calificación de la deuda externa a largo plazo de la nación de Caa1 a Caa3 debido al posible impago o reestructuración de la deuda y a la falta de un plan creíble. La deuda del país cayó en un 15,1% en abril.
Las consecuencias de la caída de bitcoin
El bitcoin perdió el 50% de su valor desde su máximo histórico. En este marco, el FMI aconsejó desligar la criptomoneda de la economía de El Salvador y advirtió sobre los posibles efectos que puede tener en la estabilidad financiera del país. “Los bancos y otras instituciones financieras podrían verse expuestos a grandes fluctuaciones en el precio de los criptoactivos”, manifestaron desde el organismo.
Por otra parte, la aceptación del bitcoin como moneda de intercambio diaria en El Salvador no ha tenido éxito a pesar de los grandes esfuerzos del gobierno. Solo el 20% de las empresas, en especial las más grandes, lo aceptan como medio de pago.
Esto se debe principalmente a la desconfianza que genera la criptomoneda, que en la actualidad es utilizada más como una reserva de valor que como un medio de pago o intercambio. Su alta volatilidad limita su uso para transacciones cotidianas y lo acerca más a otros activos como el oro, salvando las diferencias.