Pese al impacto inflacionario de este último tiempo, tanto YPF, como Shell, Axion, Energy y Puma aumentaron un 7,5% y 8,5% los precios de los combustibles. Cabe destacar que tuvieron una devaluación del 16%, ya que el último incremento del valor de la nafta y diésel fue el 9 de mayo.
Desde el domingo pasado, la petrolera del estado aumentó el precio de la nafta, un 8,5%, en todas sus estaciones de servicio; para el gasoil, un 6%. En tanto Axion, cerró con un 7,5%.
Los valores estimados de YPF, en la ciudad de Buenos Aires fueron de: $130,50 para el litro de nafta Súper; $159,80 la nafta Premium; $135,70 el gasoil; y gasoil Premium $185,50.
Por otra parte, Axion dispuso sus valores (que pueden variar dependiendo la zona) en $134,20 para la nafta Súper; $163,50 para la nafta Quantium; $147,10 para el diésel; y $188,30 para el diésel Quantium.
Asimismo, Shell fijó sus valores en $130,50 para la nafta Súper; $159,80 para la nafta Premium; $135,70 para el gasoil; y $185,50 para el gasoil Premium. Este nuevo incremento se debe a la última fecha que se aplicó la suba y la crecida del costo del bioetanol en un 19%.
A su vez, el biodiesel creció su precio un 6,7% desde el último aumento del gasoil, que fué el 16 de junio y la devaluación acumulada se registró con un 10,5% desde esa fecha.
Precios imparables
En los últimos tres años el precio del biodiesel aumentó un 528% y el bioetanol de maíz subió un 346,5%. Además, el precio de los combustibles en surtidor tuvo un incremento por la mitad. Desde mediados del 2019, el litro de gasoil subió 215% y el de nafta súper un 175,2%.
Asimismo, la nafta súper subió 32% en promedio de lo que va del año, mientras que la inflación acumulada hasta julio fue del 46,2%. Del mismo modo, desde enero del 2021 hasta agosto de este año, la nafta aumentó un 78% y la inflación del período fue del 97,1%.
“La influencia del aumento de combustibles tiene una fuerte incidencia en otros rubros. Por ejemplo, el transporte que, en los últimos doce meses, tuvo subas del orden del 64%”, detalló Isaac Rudnik, Director del ISEPCI (Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana).
Este nuevo aumento estaba previsto para inicios del mes de agosto pero se demoró, como consecuencia de la salida del ex ministro Guzmán. Ya con Sergio Massa al frente, las petroleras pudieron volver a discutir la segmentación de valores frente a la acelerada inflación.
“En el marco de las políticas de ajustes que está anunciando la nueva conducción del Ministerio de Economía, es de esperar nuevos aumentos de combustibles en los próximos meses”, expresó Rudnik.
“Esto incidirá en el costo del transporte en general y en particular sobre los precios generales de la economía. Entre ellos los precios de los alimentos”, concluyó el director del ISEPCI. En un contexto de inflación desmedida, la suba del combustible no se pudo quedar atrás y este domingo debió dar el siguiente paso.
2022: el año de los aumentos
A inicios del mes de agosto, las empresas Axion Energy, propiedad de Pan American Energy (PAE); la empresa brasileña Raízen (donde se comercializa la marca Shell); y la petrolera privada de Argentina aplicaron en la madrugada del pasado domingo 7 un aumento en el valor de los combustibles. El incremento oscila entre un 10,5% y un 12 por ciento.
El aumento se dio pese a que la empresa de combustible estatal no había establecido aumentos para dicha fecha. De esta forma, ambas compañías decidieron ir por una suba para no quedar por debajo de la inflación.
Si bien las empresas petroleras tienen que ajustarse al elevado aumento de precios; una devaluación significativa pondría en prueba hasta dónde llegaría la economía argentina y hasta donde va a tocar al bolsillo de les argentinos.
YPF anunció: “Luego de este ajuste continuaremos monitoreando la evolución de las variables”. Esto se debe a los factores que están incidiendo en la formación de los precios del combustible.
Algunas compañías y/o bancos ofrecen descuentos para que les usuaries puedan acceder a algunos beneficios. No obstante, dicho tope de 10% u 15% de descuento no alcanza para cubrir con el gasto de llenar el tanque de un vehículo. Los topes de los mismos van desde $350 a $1600, algo que hoy en día no alcanza a llenar un cuarto de tanque.