El 23 de junio de 1968 se celebró una nueva edición del Superclásico. En aquella jornada, River Plate recibió en el estadio Monumental a Boca Juniors. Y al día de hoy, 54 años después, el partido sigue siendo muy recordado.
En la cancha no se aconteció un resultado histórico o un hecho esencialmente destacado en el campo de juego. El partido terminó 0 a 0, en el que apenas puede recordarse un duelo entre el mítico arquero millonario, Amadeo Carrizo, y el delantero de Boca, Ángel Clemente Rojas (“Rojitas”).
En uno de los tantos cruces en el área, el 10 le robó la gorra al guardameta para luego devolvérsela entre risas y abrazos. Dicha secuencia amistosa poco reflejó a los sucesos que lamentablemente empañaron esa jornada minutos más tarde.
Ese domingo se vió manchado desafortunadamente por una desgracia acontecida en la denominada Puerta 12. Una avalancha humana se cobró la vida de 71 hinchas del club Xeneize, cuando intentaban salir del estadio. Fue la mayor catástrofe de la historia del deporte argentino.
Pese a las fuertes sospechas sobre la actuación de la Policía Federal y del Club Atlético River Plate, las causas y responsabilidades de la masacre nunca fueron adecuadamente establecidas. Nota Al Pie recuerda los hechos de esa jornada, la actuación de la justicia y el testimonio de aquelles que le escaparon a la tragedia, aún vigente.
Reconstrucción de lo sucedido
Les hinchas de Boca habían colmado la cabecera del Monumental en esa tarde fría de junio. Todo el mundo aguardó al pitazo final porque el resultado estaba en suspenso y apenas terminó el partido, el público presente dijo `Vamos´.
La mayoría de les visitantes salían por la Puerta 12: bajaban una serie de escaleras y descansos hasta enfrentar la puerta final que daba a la avenida. Las hipótesis de lo que sucedió en ese túnel son variadas. Y, generalmente, se contradicen unas con otras.
Una de las hipótesis que se barajan es que la Policía se había organizado para “peinar” la salida y atrapar a la hinchada de Boca por haber tirado proyectiles durante el partido. Y, más que nada, por haber cantado contra el gobierno militar, en plena dictadura de Juan Carlos Onganía.
“No había puerta, no había molinete, era la cana que daba con machete” se transformó en una canción mítica de la hinchada de Boca acerca de lo sucedido aquella tarde.
Intentando justificar la represión, el ex presidente de River, William Kent afirmó: «los hinchas hacían sus necesidades en vasos de café y se lo tiraban a la Policía. Y eso provocó la represión y luego, la tragedia».
Otra hipótesis señala que la tragedia se produjo por la avalancha de la misma gente y eso taponó la salida. Algunos indicaron que la puerta estaba cerrada al momento de salir y produjo la avalancha.
La última hipótesis indica que los molinetes que se utilizaban para controlar el ingreso, no habían sido sacados y eso provocó el amontonamiento en la puerta. Lo cierto es que la gente terminó atrapada en la salida, comenzaron a generarse avalanchas constantes desde arriba, los gritos se tornaron desesperados.
Los cuerpos agonizantes quedaron cada vez más presionados sobre un piso resbaladizo y, ante la falta de aire, se desató la locura. Fueron diez minutos fatales con consecuencias devastadoras: 71 muertos y decenas de heridos. Los cadáveres –la mayoría de entre 13 y 20 años– eran retirados de la escena pisoteados, abatidos.
Testimonios de los sobrevivientes: Héctor Novera
Por fortuna, hubo muchos sobrevivientes de semejante tragedia. En distintas oportunidades dieron testimonio de lo sucedido y aportaron sus versiones. En todas se toca la misma suposición: alguien o algo falló.
Héctor Novera, el testimonio más reciente, en diálogo con GOAL señaló que junto con su amigo Pepe, decidieron salir antes porque una botella había cortado su espalda.
“Unos segundos antes del pitazo final estábamos bajando la escalera, con muy poca gente alrededor. Escuchamos gritos, gritos, gritos. Terminamos de cruzar la calle, la policía estaba sobre la vereda del acceso a la tribuna. Cuando uno llegaba abajo, te frenabas por esa imagen”.
Para Héctor, fue una suma de cosas. Negligencia dirigencial en las medidas de seguridad y agresividad y falta de previsión de la policía, los factores que más pesaron.
Testimonio de los sobrevivientes: Alberto Villegas
Alberto es otro sobreviviente de aquella tarde, con tan solo 20 años fue al Monumental a alentar a Boca. Replanteando para El Gráfico, hizo un racconto de lo acontecido desde su perspectiva: “Hasta el último descanso veníamos apretados, típica salida de la cancha. No había luz, solo una bombita de 25 en el último tramo. Yo tenía una sensación mala, quería irme rápido de ahí adentro, había una adrenalina extraña”.
“Nosotros nos salvamos porque estábamos en el lugar justo en el momento indicado. Hubo tipos que venían cinco metros atrás y no la contaron. Con la avalancha se iban todos para abajo. Yo al principio bajaba de a dos escalones, después de a tres y al final me tuve que tirar en los siete finales porque ya no me daban las patas y me iba a ir de trompa” continúa relatando Villegas
Por último, Villegas dio detalles del final de una salida que fue un minuto de adrenalina y miedo puro: “Caí de rodillas a la vereda. Ahí levanté a un señor que había trastabillado al lado mío y, cuando me di vuelta para buscarlo a Pepe, venían todos rodando de cabeza. Incluso me acuerdo mucho de uno que bajaba chocando escalones con la nuca, ya estaba sin vida. Era una imagen tremenda. Un espectáculo horrible del que no me olvido más”.
Nuevo homenaje de Boca
El club xeneize inauguró este jueves una muestra de arte en homenaje a las víctimas y una capilla virtual. La propuesta de este año fue una iniciativa conjunta entre el Departamento de Cultura y la Asamblea de Representantes del club azul y oro. Convocaron a presentar obras en el Salón Nacional de Pintura en Homenaje a las Víctimas de la Puerta 12.
De los 27 trabajos que cumplieron las reglas, este jueves el club anunciará cuál es el ganador. El premio es de 200.000 pesos, un diploma y una exposición permanente en el remodelado pasillo de los grandes héroes de la historia bostera, ubicado en la zona de los vestuarios de La Bombonera.
A su vez, se anunció la creación del espacio Memoria Puerta 12. Esta iniciativa independiente cuenta con el apoyo de familiares y amigos de las víctimas. Y más de 100 testigos directos de aquel hecho.
“Desde 2018 venimos realizando un trabajo silencioso y muy dedicado, y nos ilusiona muchísimo todo lo que vendrá”, dice en su acta fundacional. Además, convocan a amigos y familiares de las víctimas para seguir reconstruyendo ese trágico hecho.