El seleccionado de fútbol de Gales logró una clasificación histórica ante su par de Ucrania en el repechaje de cara al Mundial de Qatar 2022. La victoria por 1-0 se dio gracias al gol en contra de Andriy Yarmolenko. De esta manera, el equipo comandado por Gareth Bale volverá a disputar una copa del mundo tras 64 años.
Tras eliminar en una fase previa a Escocia por 3-1 y en medio del conflicto con Rusia, el deporte le daba a Ucrania la posibilidad de distraerse con la posible clasificación al mundial. Sin embargo, a pesar de ser el favorito por peso y experiencia en lo deportivo, se encontró con un equipo ensamblado y bien estructurado. Gales, más allá de poseer apellidos conocidos en las mejores ligas de Europa, se apoyan casi por completo en el actual jugador del Real Madrid.
Como en toda la historia del fútbol, hay seleccionados que dependen pura y exclusivamente de un jugador como su estrella y referente, en el caso de Gales este es Gareth Bale. En décadas anteriores, el seleccionado ha tenido otros jugadores destacables que se ponían el equipo al hombro y trataban de conseguir los objetivos. En las Eliminatorias europeas, Gales quedó en el segundo lugar del grupo E, por detrás de Bélgica con cinco puntos de diferencia.
A inicios de marzo, en las rondas eliminatorias, le tocó jugar ante Austria y pudo sobreponerse por 2-1; pero debió esperar hasta junio para saber su rival. El encuentro se vio postergado por la situación ucraniana. Ahora con el boleto a Qatar en el bolsillo, Gales jugará su segundo mundial después de su participación en Suecia 1958. En aquella cita mundialista compartió grupo con el anfitrión, Hungría y México.
Como resultado de 3 empates, en esa edición Gales se ubicó en la segunda colocación por detrás de Suecia, que consiguió 5 puntos. No obstante, su sueño terminaría en cuartos de final al enfrentar a Brasil, combinado que resultó campeón; aunque la diferencia que llevó a Gales a la derrota fue mínima. En la competición internacional de fin de año formará parte del Grupo B junto a Inglaterra, Irán y Estados Unidos. Su debut será ante el combinado norteamericano. El mundial es el broche de oro que le puede dar Bale a su carrera.
El jugador estrella
La situación de Gareth Bale es similar a otros destacados jugadores que representan a una selección de menor nivel, por lo que siempre se les hará difícil jugar un mundial. Un claro ejemplo actual es el de Erling Haaland con Noruega. Al player de la Casa Blanca, la copa se le niega desde 2006, año en que inició su carrera con la selección y le tocó ver cuatro mundiales por la tele. De todos modos, a pesar de estar relegado en el club español, siempre dio el máximo por los colores de su país.
Bale mantuvo la esperanza de lograr la clasificación tras una muy buena eliminatoria y el sacrificio le dio su recompensa; aquella que no obtuvieron históricos como John Charles, Ryan Giggs o Ian Rush. Desde que juega en la selección de su país, Gareth Bale ha disputado la Eurocopa de 2016 y 2020. En ambos torneos quedó eliminado, de la primera en semifinales y de la segunda, en octavos. Para la de 2012 Gales no logró clasificarse tras conformar un difícil grupo.
En cuanto a su rendimiento individual, Gareth logró ser el jugador gales más joven en marcar un tanto en un partido oficial, tras hacerlo en su segunda participación ante Eslovaquia. Sin embargo, debido al pobre potencial de su selección, Gales ocupa el puesto 55 del ranking mundial. Es que el bajo rendimiento general no ha permitido que sus futbolistas jueguen muy seguido ante otros combinados nacionales. De igual manera, Bale ya quedó en la historia del país por ser el causante del gol en contra de Ucrania en los playoff rumbo a Qatar.
En Gales manda el rugby
Como sucede en varios países, los deportes populares no son los deportes nacionales, o viceversa; con el fútbol como mayor ejemplo de ello, especialmente en Latinoamérica. En el caso de Gales, tanto el rugby como el fútbol son los deportes que más popularidad ostentan, seguidos por el atletismo y el ciclismo. Aún así, la disciplina de la pelota ovoide saca una luz de ventaja en cuanto a rendimiento nacional. En el fútbol los éxitos son casi nulos, pero en el rugby es todo lo contrario.
La selección galesa de rugby es una de mayores potencias de la disciplina a nivel mundial, con la posibilidad de formar parte del Torneo de las Seis Naciones junto a Escocia, Francia, Inglaterra, Irlanda e Italia. Es el segundo combinado más ganador del torneo con 28 títulos, sólo por detrás de los ingleses. Su último campeonato fue en el 2021.
Incluso en el 2019 logró posicionarse como primero del ranking mundial de rugby por primera vez, y así le cortó una racha de más de diez años de hegemonía por parte de los All Blacks. Dentro de lo que sería la copa mundial de rugby, Gales siempre compitió en ella, pero aún no ha logrado ser campeón. Su mayor éxito fue un tercer puesto en 1987, la primera edición de la competición
Luego del éxito con medalla de bronce, alteró fracasos de eliminación temprana en zonas de grupos con algún que otro avance a instancias eliminatorias, pero sin volar alto ya que recién en 2011 volvió a semifinales. Por otro lado, el país ostenta 12 Grand Slam, 21 Triple Corona, 4 Copas Doddie Weir, 3 Trofeos James Bevan y 5 Copas Príncipe William.