Este jueves, el Instituto de Estadística y Censo (INDEC) reveló que la variación del Índice de Precio al Consumidor (IPC). El informe reveló que la inflación fue del 6% en abril de 2022, con un sutil descenso en relación a marzo.
En medio del anuncio del adelanto del aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM), la inflación mensual del mes de abril marcó un 6%, mientras que la variación interanual alcanzó un 58% y es récord desde 1992. “No estamos contentos con los índices que tenemos, hay que seguir trabajando en eso”, manifestó el presidente, Alberto Fernández desde París.
¿Cuáles fueron las áreas más afectadas?
Las áreas que más aumentaron fueron: prendas y calzados, con una cifra del 9,9%, a ella, le siguen los restaurantes y hoteles, con un alza del 7,3% mensual; y el transporte transporte con un 5,3%. No obstante, en el caso de alimentos y bebidas fue del 5,9%. Dentro de dicha división, los mayores aumentos se dieron en aceites y pan, entre el 8% y 15%; continuado por carnes, derivados y lácteos, con un incremento de entre el 5% y 7%.
Considerando que el 37% de la población está bajo la línea de la pobreza y el 8% en condiciones de indigencia, y que los salarios vienen perdiendo de forma generalizada contra los precios en los últimos años, la inflación impacta aún más en los sectores más humildes. Los deciles más bajos entre los sectores socioeconómicos de Argentina gastan casi la mitad de sus ingresos en necesidades básicas como ropa, comida y transporte, las áreas que más aumentan según la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). La mayor parte del salario termina siendo absorbida por los precios.
El Gobierno confía en su programa económico, pero reconoce la inflación
En su gira por Europa, Fernández reparó sobre el problema inflacionario que preocupa a les argentines y es factor de conflicto dentro del Frente de Todos. “El programa económico va a ayudar a desacelerar la inflación, de eso estamos seguros”, aseguró el mandatario desde la embajada en París. Aún así, reconoció la insatisfacción sobre la situación inflacionaria y convocó a “seguir trabajando” en ello.
En efecto, el gobierno sabe que la inflación se mantendrá elevada y probablemente escale al 60% de acumulado anual para fin de 2022. A los motivos locales, que generan la inflación, se agrega también la aceleración de los precios a nivel mundial, que aquejan a todas las naciones.
Tal y como anunció la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, los cereales, la leche, la carne y el aceite alcanzaron en febrero su máximo histórico e incluso podrían aumentar otro 22% en los próximos meses. En ese contexto crítico, que debilita al programa económico al que apuesta Fernández, el presidente refuerza sus expectativas sobre una futura baja.
“La inflación es muy dañina, porque es el impuesto que se les cobra a los que tienen un sueldo”, resumió Fernández durante una entrevista en la capital francesa. Mientras tanto, la estrategia para reducirla aún divide aguas entre el círculo más cercano al presidente, expresado en el Ministerio de Economía, el de Producción y el de Trabajo, y el ala kirchnerista refugiada en la figura de la vicepresidenta.
El adelanto del aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil
El desalentador cuadro económico intenta ser contenido por la ligera mejora de la situación salarial. En ese contexto, el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), integrado por el Ministerio de Trabajo del Gobierno Nacional, sindicatos y cámaras empresariales, llegó a un acuerdo en relación al salario mínimo, adelantando los aumentos previstos.
Así, el Consejo resolvió que a partir del mes de junio el SMVM llegará a $45.540 y en agosto trepará a $47.850; momento en el que se volverá a reunir. Asimismo, la actualización alcanzará a les beneficiaries de los programas Potenciar Trabajo, Acompañar y Seguro de Desempleo.
En ese sentido, el Boletín Oficial señala: “La recuperación del salario es una prioridad y constituye una condición necesaria para que la economía sostenga la reactivación en marcha”, y que “para ello deben generarse todos los instrumentos necesarios para que el ingreso de los trabajadores y las trabajadoras crezca en términos reales”.
Dicho acuerdo fue ratificado por el titular del Ministerio de Trabajo, Claudio Moroni, y la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT). La disposición gubernamental sucedió entre malestares por la presentación de un proyecto de resolución en la misma línea que había planteado el jueves pasado un grupo de diputados del Frente de Todos.
El Salario Básico Universal, en discusión
Por último, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), conducida por Esteban “Gringo” Castro, respaldó la medida que impacta directamente en el Salario Social Complementario de les trabajadores de la economía popular, que tiene como piso el 50% del SMVyM.
“Apoyamos esta decisión que beneficia de manera directa a más de 2 millones de trabajadores y trabajadoras de los distintos sectores que se encuentran en una situación económica crítica”, destacó el comunicado de la central de trabajadores; que logró apalancar el debate por el Salario Básico Universal (SBU) en el Congreso Nacional.