El deseo de ayudar al otro motivó el nacimiento de Soy Voluntario Hurlingham, un proyecto iniciado por María Laura Chazarreta hace casi nueve años. De esta forma, en el Barrio Mitre comenzaron a realizarse las primeras colectas de juguetes, pero luego crecieron de forma exponencial. En consecuencia, el grupo de trabajo ascendió a 15 personas y lideran campañas solidarias para la comunidad y el resto de Buenos Aires.
Por este motivo, Nota al Pie conversó con María Laura Chazarreta para conocer el origen del grupo, sus objetivos y su trabajo diario. “El grupo se inició con mi hija y yo. Nuestro objetivo es ayudar, hacer el bien por el prójimo”, ratificó la fundadora de Soy Voluntario Hurlingham.
Idea inicial de Soy Voluntario Hurlingham
La idea madre del proyecto fue ayudar a los más necesitades con diversas colectas de juguetes, pañales, leche y medicamentos. Además, la organización oficia como mediadora ante cualquier pedido, ya sea una silla de ruedas o un andador. De esta forma, conecta a unes con otres para ayudar. Asimismo, desarrolla diversas campañas solidarias más: por ejemplo, la donación de pelucas.
“Me di cuenta de la importancia de lo que estábamos haciendo cuando fuimos a llevar por primera vez pelucas a Baradero. Primero, las enviábamos por correo, y después decidí ir y llevar la donación de cabello para conocerlas”, aseguró Chazarreta. Esto sucedió porque, en aquella acción solidaria, la organización conoció a una niña de Hurlingham que se movilizó hasta Baradero para obtener su peluca.
No obstante, otras grandes acciones de Soy Voluntario Hurlingham apuntan a pacientes del Hospital Garrahan y Hospital Posadas. Con esta premisa, organizan colectas de sangre, médula ósea y elaboran pelucas para personas que atraviesan por un tratamiento oncológico. En este sentido, el objetivo es ayudar, acompañar y contener.
Proyecto de donación de pelucas
En un principio, Soy Voluntario Hurlingham colaboraba en proyectos de donaciones de pelucas para pacientes en tratamiento por cáncer. Un ejemplo de ello fue el viaje a Baradero, y el posterior contacto con una niña de la localidad hurlinguense. “Ella me contó que su papá fue hasta Baradero a buscar su peluca después de juntar dinero para poder hacerlo”, confirmó Chazarreta.
Como resultado, implementaron una nueva propuesta en la organización bajo el lema “Tu Pelo Crece Y Tu Corazón También”, con su propio hashtag. Asimismo, esto se logró porque “teníamos gente que nos seguía y nos acompañaba; el grupo era bastante grande y teníamos cinco chicas con buena mano, ganas y mucho corazón”, aseveró.
Desde Soy Voluntario Hurlingham, buscan simplificar el impacto psicológico que significa enfrentarse a un tratamiento médico de este tipo. Diseñaron una campaña que se renueva en forma permanente. En este sentido, confeccionan pelucas que se entregan en comodato y tras su uso, se reacondicionan y vuelven a ser donadas.
Así es como la organización cambia la vida del paciente en forma radical gracias a la comodidad que sienten al utilizar la peluca. Esto se debe al trabajo de un equipo conformado hoy por nueve mujeres, cuatro hombres y dos niñas. De hecho, Chazarreta reconoció que “cada vez que se entrega una, sabemos que llegó; está contenta y nos envía un mensaje positivo. Para nosotros, es felicidad absoluta”.
Ahora bien, el proyecto tuvo un impacto quizás algo impensado. Esto se debe a que la organización montó un taller para la confección de estas pelucas. De esta manera, en el 2019 desarrollaron una actividad con presas trans de la Unidad 32 de Florencio Varela del Servicio Penitenciario Bonaerense. En definitiva, combinaron la formación de las internas y una acción solidaria dedicada a pacientes con cáncer.
Compromiso en Hurlingham
Desde Soy Voluntario se realizan colectas de sangre, de juguetes y alimentos no perecederos. Además, son un eslabón en la cadena de pedidos porque siempre buscan ayudar. Esto se refleja en su trabajo junto con el Hospital San Bernardino y las colectas de sangre realizadas en el Micro Estadio Municipal de Hurlingham.
“La comunidad de Hurlingham es muy solidaria y confía en lo que nosotras hacemos. Eso nos mantiene en pie porque somos un grupo solidario, la gente confía en lo que hacemos y nos acompaña”, reafirmó. Sin embargo, Maru también reconoció que existe un gran apoyo en distritos como Morón, Moreno y Zárate.
Asimismo, en cada uno de los encuentros que se realizan, se llevan adelante varias actividades más. El grupo organiza las colectas externas, sitúa stands con peluqueres para realizar cortes del cabello entregado y reciben donaciones. De forma periódica, la organización lidera este tipo de proyectos.
Cabe destacar el rol de la Municipalidad de Hurlingham, que también acompaña las propuestas que lidera el grupo. “El vínculo es bueno. Cada vez que tenemos que realizar una actividad y necesitamos un lugar, nos abren las puertas. Es muy buena nuestra relación”, certificó Chazarreta.
Gracias a la última colecta de sangre, se convocaron a 23 personas. En forma conjunta con el Servicio de Hemoterapia del Hospital San Bernardino, realizaron una colecta durante el fin de Semana Santa. Su compromiso con el municipio es grande, porque en forma sistemática realizan donaciones o trabajan con los bomberos voluntarios.
Su fuerte vínculo con la comunidad y en particular con los hospitales se debe a los inicios solidarios de la organización. De acuerdo con la fundadora, la primera propuesta fue visitar una terapia intensiva pediátrica y acompañar a sus padres con una bebida caliente. Esto es fruto de su vocación, que es ayudar.