La endometriosis es una enfermedad benigna que se produce cuando el tejido del útero crece por fuera, provocando dolor intenso y hemorragias. Afecta a mujeres y personas menstruantes de entre 15 y 50 años y es una de las enfermedades que no se encuentra, siendo crónica, en el Plan Médico Obligatorio (PMO).
En Argentina, afecta aproximadamente a un millón de personas menstruantes y es una de las enfermedades que no se detecta rápidamente ya que, los síntomas de la misma se les adjudica a dolores menstruales. En base a estos números, 1 de cada 10 mujeres se ve atravesada por esta patología en Argentina.
Una de las cuestiones importantes de esta patología es la falta de diagnóstico médico, ya que la demora desde los primeros síntomas tardan entre 7 y 8 años. Es por ello que, la normalización de los síntomas como el dolor menstrual pone al paciente en riesgo.
Otras de las formas en la que se diagnostica esta patología es cuando el paciente se realiza otra intervención quirúrgica y/o estudio que justo detecte la endometriosis. Es por ello que se necesita un diagnóstico prematuro y estudios precios para las mujeres.
Un mal que afecta a millones
La endometriosis tiene como causa el mal crecimiento y desarrollo incorrecto del endometrio, la misma puede asentarse en cualquier lugar del abdomen. Puede provocar implantes (placas pequeñas), nódulos (placas grandes) y endometriomas (quistes en los ovarios).
En la actualidad se desconocen las causas de porqué es provocada la endometriosis. Especialistas aseguran que puede ser porque la menstruación corre por las trompas de Falopio y cae en el abdomen en vez de salir al exterior.
Asimismo, también se asegura que puede ser una enfermedad hereditaria, aunque no hay estudios que lo aseguren. Por otra parte, otra de las causas puede ser por un posible defecto de la inmunidad de las células del abdomen.
Los síntomas a la hora de detectar esta patología son el dolor menstrual o la Dismenorrea. Esta provoca fuertes contracciones en el útero y puede que, con el tiempo, el dolor aumente aún más y se les sume algún otro síntoma.
Otro de las señales de la endometriosis es el dolor en las relaciones sexuales (dispareunia), en donde presiona algún área de la vagina. Asimismo, puede aparecer un sangrado uterino anómalo que puede provocar sangrado, en base a este último síntoma, muchas mujeres no tienen alteraciones menstruales.
Asimismo, la endometriosis puede provocar la infertilidad o la esterilidad ya que, puede inflamarse el abdomen impidiendo la unión del ovulo con el espermatozoide, también puede que haya secreciones de sustancias no habituales en el abdomen o un riesgo mayor de aborto.
Una detección temprana para prevenir problemas futuros
Una de las cuestiones importantes a la hora de detectar la endometriosis, es la realización de estudios específicos que demuestren si la paciente padece la patología.
Uno de los estudios puede ser mediante una ecografía en donde se detectan quistes ováricos. Otro es el análisis de sangre para la detección del incremento del CA-125 en sangre, aunque no suele realizarse ya que no todas las mujeres presentan esta alteración.
Por otro lado, otro estudio, pero más complejo es el de la Laparoscopia, técnica operatoria que permite observar el interior del abdomen. En mujeres menores a los 45 años, esta técnica se centra en eliminar la enfermedad conservando todo el tejido sano.
Para las mujeres de 45 a 50 años, esta práctica se centra en eliminar ambos ovarios para evitar una degeneración maligna. Cabe destacar que, si el especialista no tiene un diagnóstico claro en la ecografía o en el estudio de sangre puede solicitarse estudios complejos como la Resonancia Magnética (TAC).
Un pedido para todas
En la página de peticiones Change.org, Patricia Cabrera creó una petición en base a la enfermedad que está siendo atravesada. Allí junto con otras mujeres crearon un grupo denominado “No Exagero, TENGO ENDO!” en donde le exigen al Congreso Nacional una Ley de Endometriosis.
Esta ley incluiría la entrega de medicación gratuita de por vida, el reconocimiento como una enfermedad crónica, capacitación a ginecólogos y enfermeros para la detección temprana de la patología y el acompañamiento terapéutico.