A partir de hoy, y hasta el domingo, están disponibles más de 10.000 urnas en todo el país. En la Ciudad de Buenos Aires hay urnas en todos los barrios. Esta Consulta Popular es llevada a cabo por el movimiento Libres del Sur. Consideran que la deuda, al ser fraudulenta, no debe ser pagada hasta tanto sea investigada. Durante el día de hoy, habrá diez urnas instaladas en la Plaza Seca, frente al Congreso Nacional.
Humberto Tumini, presidente de Libres del Sur, en diálogo con Nota al Pie expresó: “Esperamos que más de un millón de argentinos y argentinas voten y se expresen muy mayoritariamente en desacuerdo con lo que el Gobierno está enviando al Congreso respecto del acuerdo con el FMI (Fondo Monetario Internacional). Tenemos muchísimas expectativas, hemos puesto diez mil urnas en las 23 provincias; en 470 municipios que abarcan el 70% de la población argentina. Muy entusiasmados los compañeros y compañeras del país”.
Por su parte, Daniela Gasparini, referente de Libres del Sur, explicó que están en el Congreso porque “hoy van a presentar el proyecto de acuerdo con el FMI. Por eso, queremos que puedan escuchar y ver que hay un pueblo que se quiere expresar”. Además, agregó: “La idea es conocer la opinión del pueblo. Eso es lo más importante: que nos escuchen, porque somos los principales damnificados con este acuerdo que quieren llevar adelante”.
Para Mauro López, coordinador de Barrios de Pie en Buenos Aires, la consulta va a ser una demostración muy mayoritaria del pueblo de expresarse, debatir y plantear reparo ante el pago de la deuda. “Esa opinión y el debate no se ha expresado porque la política del Gobierno ha sido introducir miedo. Un pueblo consciente siempre es un pueblo más sabio y un pueblo más decidido a ser parte de su propia historia”, sostuvo.
Las consecuencias del acuerdo
“Las consecuencias de pagar esta deuda son gravísimas”, explicó Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie. Por un lado, “es el reconocimiento de un préstamo que se pidió y que se otorgó de forma totalmente irregular”. Por el otro, “tiene que ver con lo que va a suceder hacia delante; sobre la posibilidad de salir efectivamente de esta situación de pobreza, indigencia, y desempleo. Hace falta dinero, pero si esa plata que tenemos, en vez de ponerla para esto, se va ir nuevamente hacia el FMI o hacia la fuga de capitales, vamos a tener un límite como país”, aseguró Saravia.
Por su parte, López señaló que pagar una deuda de estas características tiene dos problemas. El primero, “es hacerse cargo de devolver una plata que en realidad no vino al país, legitimándose una estafa”. El segundo, es “la riqueza que se genera en el país, en vez de ir a las necesidades urgentes que tenemos, va a ir a pagar esa deuda”. Además, “vamos a tener al FMI auditando nuestra economía interna cada tres meses. Vamos a perder soberanía”, concluyó la coordinadora.
Según Gasparini, nuestro país vive endeudado y con muy malas experiencias en relación a los acuerdos que ha establecido con el FMI. “Cada tres meses van a venir a revisar lo que estamos haciendo para reducir el déficit, cómo se están implementando las medidas de ajuste como la reforma previsional y laboral”, aseguró.
“No es deuda, es estafa”
Para Tumini, la deuda es una estafa por varias razones. “Hubo un préstamo absolutamente inusual. Era muy por encima de lo que normalmente puede prestar el FMI a un país que, evidentemente, no estaba en condiciones de devolverlo en tres años”, comenzó explicando. Además, agregó que hubo un acuerdo político entre el Gobierno de Macri y el FMI para ese préstamo: “Los propios funcionarios del Fondo dijeron que Estados Unidos presionó para que se otorgara, porque aspiraba a la reelección del gobierno macrista. Es decir, fue una decisión política”.
Por último, Tumini dejó en claro que los recursos que vinieron no quedaron para beneficio de Argentina. Y agregó: “El Banco Central hizo un estudio para ver qué pasó con ese dinero. Una parte se pagó a bancos comerciales que vinieron a hacer una especulación financiera”. “El propio Fondo, en su balance de ese crédito, afirma que esa plata no se usó para resolver ninguno de los problemas y que hubo fuga de capitales”, concluyó el líder de Libres del Sur.
Por su parte, Gasparini fue contundente: “En 2018, Macri llevó adelante un acuerdo con el Fondo y todo ese dinero se lo han fugado empresarios, bancarios y amigos del poder. De los casi 45 mil millones de dólares no ha quedado nada en el país. Incluso, dicho por el estatuto del FMI, por la investigación del Banco Central y por nuestra ley de administración financiera”.
Además, remarcó que “el acuerdo pasó por arriba del Congreso, quien tiene la última palabra en este tipo de acuerdos. Por eso, es totalmente ilegítima, fraudulenta y es una plata que no la vio el pueblo argentino”, finalizó.
Para más información podés consultar: www.consultapopularfmi.ar.