El Paraje “La Fidelidad”, ubicado en la localidad chaqueña de Misión Nueva Pompeya, ha sido recuperado por sus legítimos dueñes. Todes elles forman parte de una comunidad de campesines conformada por más de 60 familias quienes pertenecen a la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Tierra (UTT). Por consecuencia, expulsarles de sus tierras afectaría de forma directa sus economías.
Pese a la recuperación de dichos terrenos, las familias productoras iniciaron un reclamo ante el Instituto de Colonización del Gobierno de Chaco, para que se reconozca su derecho legal a ser dueñes de las tierras. A pesar de los reiterados pedidos, no han recibido respuestas por parte del Estado provincial.
Un territorio dañado
En octubre del año pasado, miembros de la comunidad se encontraron con máquinas destruyendo el bosque nativo, sobre todo quebrachos y palo santo. Además, se han enfrentado a un constante daño de su infraestructura y los espacios de dispersión social. Inclusive, las viviendas se han encontrado cercadas en sus alrededores. Además de la deforestación y los daños en las viviendas, les pobladores del paraje sufren actualmente amenazas de forma continua.
Hace algunos meses Fabián y Luis Polentarutti, en complicidad con el Gobierno provincial, la policía y el poder judicial, se presentaron al paraje con una certificación de adjudicación de tierras que les otorga la legitimidad del territorio. Frente al avance de éstos “personajes” sobre las tierras, quienes continúan con el desmonte y el daño a la propiedad, la comunidad dijo «¡BASTA!».
“Ante este avance violento e ilegal sobre nuestros territorios, nos encontramos en estado de alerta permanente para la defensa y recuperación de las tierras”, expresó Ezequiel Orquera, delegado de la UTT Chaco. A su vez piden una respuesta inmediata del Gobierno provincial y la participación del Gobierno nacional a través del Ministerio del Interior.
Palabras que llegan desde el bosque
Agustín Suárez diálogo con Nota al Pie sobre cómo está la situación actual del territorio en conflicto. Ante la consulta, declaró que la disputa es por «2500 hectáreas que pertenecen a está comunidad», cuyos territorios son reclamados por estos empresarios, quienes quieren adueñarselos para poder llevar a cabo sus negocios con la Provincia del Chaco.
Según informó Suarez, los empresarios se adjudicaron 2500 hectáreas externas y también 500 pertenecientes al Paraje «La Felicidad». Además, de forma arbitraria, incendiaron y talaron el bosque nativo, «avanzaron, plantaron sus casas y pusieron gente de ellos en territorios campesinos».
Las amenazas más frecuentes son discusiones, además del uso de armas de fuego y blancas. » La violencia aumentó de forma exponencial, llegaron a un punto dónde asesinaron animales» explicó Suárez. La complicidad con la policía es alta, por lo cuál no se puede asegurar la seguridad de las 60 familias campesinas.
Este fin de semana decidieron avanzar sobre las tierras usurpadas. «Las amenazas y enfrentamiento ante las 2 facciones derivó en la quema de casas y cultivos». La invisibilidad de la lucha es total y la falta de señal en la zona es casi nula por lo cuál la comunicación se realiza de manera esporádica, cortada y no hay una charla seguida.