La Fiscalía de Instrucción de Laboulaye (Córdoba) ordenó, este miércoles, la detención e imputación de 15 presuntos involucrados en delitos de ciberestafas. El caso, en el cual se investigaron además cuestiones de asociación ilícita y encubrimiento, no sólo tuvo damnificados en Laboulaye, sino también en otras cuatro ciudades: Córdoba Capital, Mar del Plata, Tandil y San Isidro.
El fraude se basó principalmente en la búsqueda de publicaciones web de venta de objetos. A partir de allí, les delincuentes contactaban a les usuaries para una supuesta compra. De esta manera obtenían datos bancarios de las víctimas y, con estos, generaban diversos créditos.
Luego, le mentían al vendedor. Le comunicaban que, por “error”, el depósito realizado para la compra era mayor al establecido o se había depositado dos veces. Finalmente, la víctima enviaba ese dinero sobrante a una cuenta manejada por les estafadores, sin verificar los movimientos.
La utilización de esta modalidad, al igual que el de otras que se realizan a través de la tecnología, aumentó en el país desde la etapa de pandemia. Tal es así, que la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI) expresó en un informe que, en 2020, la cantidad de reportes de delitos de este tipo aumentó un 381%.
En relación a ello, un estudio de la empresa de seguridad CertiSur se centró en los cambios que el aislamiento obligatorio generó respecto al uso de la tecnología. Allí se afirma que el 46% de usuaries encuestades manifestaron que el principal cambio fue no tener que ir más al banco. Esa dependencia de la virtualidad para la realización de movimientos y trámites, generó un contexto más propenso a las ciberestafas.
Además del caso de esta semana en Córdoba, otro ejemplo del aprovechamiento delictivo en pandemia se dio el año pasado a través de chantajes por WhatsApp. Ese mecanismo, advertido durante la etapa de la segunda dosis de vacunación contra el COVID-19, consistía en enviar un mensaje con un falso enlace. El mismo poseía una supuesta confirmación para la inoculación. Mediante el pedido de un código, el objetivo era robar la cuenta del usuarie de WhatsApp y, desde allí, dar paso a diversos chantajes.
¿Cuáles son los modos en los que se efectúan las ciberestafas?
Una de las formas de ciberdelito más habituales es el phishing. Este consiste en el envío masivo de correos electrónicos donde les delincuentes se hacen pasar por empresas de servicios para robar datos personales y, así, operar con ellos.
Por otro lado, y de acuerdo a un listado elaborado por la empresa BTR Consulting, existen mecanismos que se potenciaron en el último tiempo y son habituales en 2022. Uno de ellos es el SIM Swapping. En este, le estafadore se hace pasar por la persona titular de una cuenta telefónica para conseguir un duplicado de la tarjeta SIM. Esa maniobra se lleva a cabo para conocer datos de la víctima y realizar movimientos bancarios.
También, crecieron las estafas por medio de mensajes y/o llamadas falsas que difunden supuestos bonos o planes de Gobierno. En ese caso, el objetivo de le delincuente es guiar al usuarie hacia un cajero y, mediante un engaño, modificar la clave de acceso a la cuenta del banco.