Mariano Rodríguez es un joven argentino que decidió crear un canal de YouTube donde analiza películas. Su objetivo no es analizar producciones cinematográficas en general, sino que se focaliza en un solo tipo de estas: las peores. Aquellos lanzamientos que en décadas pasadas generaron una enorme expectativa, que solo fue superada por el desproporcionado tamaño de la decepción generalizada.
Se trata de películas que surgían como versiones adaptadas de exitosos videojuegos o dibujos animados consagrados. Les espectadores, mayoritariamente fans del producto original, esperaban lo mejor de la versión para la pantalla grande. Sin embargo, la calidad de esas películas fue tan mala que ni siquiera los fans del videojuego o del cartoon defendieron el film. Son esas películas las que elige Mariano Rodríguez para realizar sus informes.
Informes con una impronta de conurbano
Las reseñas que realiza Rodríguez se diferencian notablemente de las de cualquier otro crítico de cine. Es que él es capaz de asumir que un líquido usado en un film hollywoodense es en realidad la bebida argentina Manaos, o que el rostro del actor sueco Dolph Lundgren se trata en verdad del de Guido Suller. En ese sentido, les suscriptores logran apreciar un audiovisual que recrea el original de un modo ameno y que les genera muchas risas.
Suscriptores de todos los países de habla hispana, dejan en promedio más de 2 000 comentarios de agradecimiento a su autor en cada video. Por ejemplo, el usuario cherok17 expresó: “Creo que ya me vi 20 veces cada uno de tus videos (…). Arte puro! Seguí así campeón porque le haces un bien a la humanidad!!!”. Muches otres han escrito: “Gracias al cielo se han hecho malas películas, y por eso podemos disfrutar tus informes”.
Para conocer las motivaciones y características de su actividad, Nota al Pie dialogó con Mariano Rodríguez, quien brindó detalles de su labor.
En primer lugar, sería interesante que nuestres lectores pudieran conocerlo. Si lo desea, puede contarnos dónde vive, su edad, qué estudios ha realizado y a qué se dedica.
Me llamo Mariano Rodríguez, vivo en el mítico barrio de Haedo, provincia de Buenos Aires. Tengo 38 años, soy YouTuber, guionista de TV (en Pasapalabra actualmente) y no terminé el secundario por materias como contabilidad, entre otras.
¿Cómo nació la idea de crear su canal de YouTube sobre películas que «no debieran haber sucedido»?
Dediqué años enteros a solo ver mal cine. Me fascina. Siempre que veía una película con amigos la frenaba detectando errores y llorábamos de la risa inventando diálogos. Trabajando con distintos influencers para proyectos de TV, me di cuenta que el futuro era YouTube. Al principio intenté hacer sketches, pero no funcionaban del todo. Luego, me dije: “Pará, quiero comentar Batman y Robin”. Lo hice, y así comenzó el canal.
¿Cuál es el objetivo del canal?
Eventualmente, ser una plataforma para todos los formatos que me interesen. Por ahora, entregar videos colmados de humor y data.
¿Cuál es el criterio para elegir el film que se va a analizar?
Procuro que sean pelis realizadas por grandes estudios, o de algún modo relacionadas con supuestos profesionales. O sea, películas hechas en contextos que uno supone no deberían permitir estas atrocidades. Evito reseñar pelis mal hechas a propósito, como “Sharknado”, o piezas amateur como “The Room”.
¿Cuántas veces necesita ver un film para detectar sus errores?
Lo veo una vez sin pausar, “disfrutándolo”. Luego investigo y recopilo data de otras fuentes, y me lanzo a verla de nuevo para escribir el guion. Esta parte del proceso consiste en ver unos segundos, pausar, escribir, detectar errores, retroceder, escribir, etc. Puede tomar unos tres días.
Detecta muchos errores de vestuario, continuidad, efectos visuales… ¿Estudió cinematografía o simplemente tiene un don especial para descubrir los errores?
Algún curso de cine hice, pero realmente creo que tengo buen ojo para la cuestión. Imaginate que los que hicieron estas pelis estudiaron más que yo, así que… También recopilo errores de otras páginas que los listan como IMDB o “moviemistakes”, para que no se me pase ninguno muy groso.
Pareciera quese concentra en films de los 80 y 90, y no tanto en películas más actuales. ¿Esto se debe a que en las últimas décadas se hacen películas con menos errores? ¿Cree que las nuevas tecnologías que facilitan los efectos especiales tiene que ver con eso?
No, el mejor cine comercial sucedió en los 80 y 90. Las películas actuales son bazofia sin alma. Abundan canales y videos que destrozan toda la porquería panfletaria infantilizante actual de Hollywood, y no sin un buen motivo. Sí es verdad que los errores visuales son, tal vez, menos prominentes, pero los despropósitos a nivel coherencia y narrativa son iguales o peores que siempre. También evitó pelis nuevas, porque el algoritmo que detecta temas de copyright es mucho más sensible con ese material.
Logra hablar con gran velocidad, lo que otorga una buena dinámica a sus videos. Para hablar tan rápido, ¿requiere hacer muchas grabaciones?
Sí, en general para un video de 20 minutos tengo una grabación de 50, aproximadamente. Ojo, también clavo algunas tomas re virtuosas con un solo intento, jaja.
Los guiones de sus informes son sumamente creativos. Logra establecer vínculos humorísticos entre las películas norteamericanas y nuestra cultura. Por ejemplo, He-Man es Guido Suller, la escenografía de un film es propia de una fiesta menemista… ¿De dónde saca ideas tan divertidas?
Jaja, es todo culpa de Cha cha cha y su Batman. No sé, intento mezclar lo elevado con lo mundano, la profundidad filosófica con lo chabacano y el primer mundo con el conurbano.
¿Cuántos informes de películas mal hechas realizó hasta ahora?
14, incluyendo el que está por salir sobre “Howard, el pato”.
¿Tiene previsto hacer lo mismo con el cine nacional?
Aún siendo un humor bastante localista el que le meto a mis videos, tengo público de distintos países hispanoparlantes justamente gracias a que analizo películas de Hollywood. Por ahora, planeo seguir así. Seguramente algún día tengan su lugar pelis argentinas, como “Comodines”, “La edad del Sol” o la peli de Bandana.
En algunos de sus informes, no solo señala los errores, sino también los aciertos, tal como lo hace en su análisis de la película Másters of Universe, el film del dibujo animado de He-Man.
Puede ser un poco Síndrome de Estocolmo. Viendo la peli con tanto detenimiento, no puedo evitar ponerme en el lugar de quienes la realizaron y comprender sus intenciones. Una película es un ser de muchas patas, y es difícil que todas estén chuecas. Ojo, hay muchas, como “Dragon Ball Evolution” o “King of Fighters”, sin un solo valor que las redima, pero en la mayoría siempre hay algo para rescatar.
Tiempo atrás en Nota al Pie, entrevistamos a un youtuber llamado Mauricio PC, quien hace informes sobre accidentes en la aviación. Él nos comentaba que sus videos eran utilizados en academias de pilotos, puesto que consideraban que eran contenidos pedagógicos para no repetir errores. ¿Cree que sus videos podrían ser utilizados en escuelas de cine para enseñar a los estudiantes los errores habituales de films, para procurar evitarlos?
Dios santo, sería hermoso. Un tipo sin secundaria puesto como ejemplo para estudiantes universitarios. Ojalá.
Muchas de las malas películas son extensiones de videojuegos o dibujos animados. ¿Existe poco interés en proteger el prestigio de los productos originales?
Hay un interés netamente económico en llevar esas franquicias al cine, pero la realidad es que son medios completamente distintos y traducir uno al otro es casi imposible. Aún hoy en día, teniendo el nefasto CGI como recurso principal, las pelis basadas en videojuegos siguen fracasando porque la disparidad principal no es visual, sino de contenido. El factor X que da mística a un videojuego no tiene porque ser adaptable a un guion cinematográfico.
Se requiere una profundidad narrativa o cierta linealidad que el videojuego no. Por ese mismo motivo, sí es mucho más fácil tomar los mejores elementos visuales o de acción de un film y transformarlos en un excelente videojuego. Sucede en todos los ámbitos. Musicales de probado éxito, como Sweeney Todd, Los Miserables o Cats, apenas dieron filmes mediocres o directamente nefastos.
¿Cree que películas basadas en dibujos animados o videojuegos, tales como Máster of Universe, Double Dragón o Street Fighter, serán algún día realizadas nuevamente pero con calidad?
Ojalá Hollywood se vuelva un cine más maduro y original. Lo dudo, ya que la maquinaria pretende que sigamos consumiendo formatos pensados para niños de once años. Alguna vez, el cine popular fue Alien, El Exorcista, El padrino, etc. Películas complejas y a la vez entretenidas. Hoy, un adulto va al cine a ver una versión glorificada de dos niños jugando con muñecos en un arenero.
Perdón, me desvié de la pregunta. Seguramente volverán a realizar algunos de esos títulos. Dudo que con mucha calidad, ya que la propaganda no arrojó ni arrojará nunca nada memorable, y el cine actual es 100% panfletario.
¿Cuánto tiempo le lleva hacer cada video?
Debido a que aún tengo otro trabajo, más o menos un mes.
Algunos de sus videos tienen más de 200 000 reproducciones. ¿Pensó alguna vez que llegaría a tanto?
Hay alguno llegando al millón por estos días. La verdad que no. Al principio me conformaba con que tuvieran 10 000 vistas, pero luego uno siempre quiere más. Está bueno poder parar la bocha y decir: “Bien, chabón, buen trabajo”, algo que no hago a menudo. Soy muy neurótico y me cuesta encontrar momentos de felicidad. Sí sabía que estaba haciendo algo con calidad, pero después pensar que alguien lo vea suena a fantasía. Por suerte encontraron una audiencia.
Sus informes suelen superar los 2 000 comentarios. ¿Lee todos los comentarios que le dejan?
Sí, por ahora puedo leer todos y respondo muchos.
¿Cuáles son sus proyectos futuros para su canal de YouTube?
Ampliar el abanico de formatos y vivir de esto.
Muchos seguidores suyos lamentan haber visto en décadas pasadas las películas mal hechas, pero celebran que gracias a la existencia de esas películas pueden disfrutar los análisis humorísticos que usted hace de esos films. Es innumerable la cantidad de personas que le agradecen por el disfrute que experimentaron viendo sus informes.
Soy amante del ocultismo y, cuando más me vanaglorio, me gusta pensar que realicé un acto de alquimia tomando esa peli mala y transformándola en un buen contenido. Por supuesto, es una exageración. Mucha gente me agradece porque los videos fueron una ayuda para superar momentos de tristeza. Alguna vez, años atrás, pasé un período de depresión y me refugiaba en ciertas películas y series animadas que ponía por las noches casi como un mantra o un arrorró. Pensar que mis videos están haciendo algo similar me llena de alegría y es un resultado palpable que nadie me puede quitar, ni siquiera yo mismo, porque no me pertenece.