En la mañana del lunes (domingo a la noche en Argentina) se llevó a cabo la audiencia pública virtual de apelación de la revocación de la visa de Novak Djokovic. El enlace a la audiencia, que duró en total 7 horas, estuvo saturado debido a la gran cantidad de personas en el mundo que estaban expectantes de la decisión final.
El juez federal Antonhy Kelly, de la Corte Federal y de Familia de Australia ordenó su liberación al anular la cancelación de su visa, otorgando así el aval judicial para que pueda disputar el torneo internacional. De todos modos, el gobierno federal, mediante el Ministerio de Inmigración a cargo de Alex Hawke, tenía la facultad de deportar, pero no lo hizo.
Reacciones frente al fallo
Sus familiares brindaron una conferencia de prensa desde Serbia donde iban informando lo que sucedía con el jugador de tenis. Luego de varias horas de incertidumbre y confusión por las medidas que se podían tomar y por versiones contrapuestas, Djokovic quedó en libertad.
El fallo anuló la decisión de la Fuerza de Frontera que había cancelado la visa del tenista. Y ordenó al Ministerio del Interior que en menos de 30 minutos debía liberarlo. También tenían que devolverle el pasaporte y todos los efectos personales. Por otro lado, el Ministerio de Inmigración debe aceptar que la medida de cancelación de la visa fue irrazonable.
Duro momento
A través de sus redes sociales, el jugador agradeció la resolución del juez y afirmó que está concentrado para jugar el Abierto de Australia, que comenzará el próximo lunes en Melbourne. Además, mostró una foto de su entrenamiento, buscando sumar el décimo título y superar los 20 Grand Slam, un valor que actualmente comparte con Roger Federer y Rafael Nadal.
“Estoy complacido y agradecido de que el juez revocara la cancelación de mi visa. A pesar de todo lo que ha pasado, me quiero quedar y tratar de competir en el Abierto de Australia”, compartió en su cuenta de twitter. También agregó: “Estoy complacido y agradecido de que el juez revocara la cancelación de mi visa. A pesar de todo lo que ha pasado, me quiero quedar y tratar de competir en el Abierto de Australia”.
Por último, expresó que “Por ahora no puedo decir más, pero gracias a todos por estar conmigo y animarme a mantenerme fuerte”.
Por otro lado, en comunicación con Radio Onda Cero, el tenista español Rafael Nadal respaldó la decisión de la justicia australiana de permitirle jugar a Djokovic. “Más allá de que pueda estar de acuerdo o no en algunas cosas con Djokovic, sin ninguna duda, la justicia ha hablado. Y ha hablado que tiene el derecho a participar en el Open de Australia. Y realmente creo que es lo más justo que lo haga si así ha sido resuelto y parece que ha sido el caso”, expresó.
La grieta del pase sanitario
Tal como informó Nota al Pie, el tenista serbio, de 34 años, había llegado a Australia la semana pasada luego de afirmar el 4 de enero que había conseguido un permiso especial con una exención médica, por parte de la Federación Australiana de Tenis. Pero no contaba con pase sanitario ya que no recibió ninguna vacuna contra el COVID-19 porque se opone a la vacunación obligatoria. Desde entonces, estuvo confinado en el Park Hotel, un hotel para inmigrantes ilegales en Melbourne, rodeado de policías.
Al arribar al aeropuerto, la Fuerza de Fronteras de Australia (ABF) canceló la visa del tenista. Argumentaron que tienen ese poder en caso de que se presente un riesgo para la salud, seguridad u otro orden de la comunidad australiana. Por eso, al no estar vacunado, consideraron que Djokovic podría ser una amenaza para la salud pública y fue detenido por el Estado de Victoria por las irregularidades en el visado. Mientras tanto, les abogades del deportista obtuvieron una cautelar para evitar que sea deportado del país.
Desde la defensa, objetaron que el jugador había contraído coronavirus en diciembre pasado. Por lo que representaría un mínimo riesgo volver a contagiarse y así contagiar a otras personas. Además, ante el número creciente y elevado de casos en Australia, debido a la llegada de la variante Ómicron, el ingreso del tenista no hizo la diferencia.
Otros casos paralelos
El permiso especial que recibió Djokovic causó mucha polémica, ya que otres tenistas no pudieron ingresar al país. Una de ellas es Natalia Vikhlyantseva, quien recibió la vacuna rusa Sputnik pero que no está aprobada en Australia. El otro caso es el Aman Dahiya, quien no recibió la vacuna porque en su país, India, todavía no han sido inoculados les menores de 18 años.