La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) presentó una carta abierta al presidente Alberto Fernández para reclamar por la preservación del ambiente. Esta fue bajo la consigna “por un nunca más ambiental” y en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos.
Desde la asociación sostienen que el significado del “nunca más” requiere la acción permanente para proteger los derechos y garantía de todes. A través de todos los aspectos, dimensiones y territorios se debe garantizar la vigencia efectiva de los derechos humanos relacionados a la protección ambiental.
La coordinadora de la Comisión de Ambiente de Esquel, Claudia Ermili, en diálogo con Nota al Pie remarcó que cambiar el modelo productivo del país es difícil por todas las presiones de las multinacionales. También reconoció que es difícil para un gobierno poder combinar las dos cosas pero no es imposible, en referencia al modelo extractivista y los derechos humanos.
Además, Ermili resaltó que “el consumo de muchos objetos, el uso de agrotóxicos, de la producción masiva de ganado y la megaminería lleva a que la gente se enferme. Esto tiene muy poco tiempo en el futuro ya que después queda una tierra desgastada y sin agua”.
En tal caso, señaló que buscan instalar el tema en la sociedad y “seguir insistiendo, que alguna vez va a llegar el cambio”. En este sentido, agregó que “es un nunca más de todo lo que nos está llevando no sólo a la contaminación sino también a un modelo que lleva al agotamiento del planeta”.
Por otro lado, la referente de la regional de ADPH Esquel comentó que este año sacaron un proyecto educativo que se llama “Modelo económico extractivista y de derechos humanos”. Para ser abordado en la educación media con la idea de ver como se contradice el modelo económico extractivista con los derechos humanos.
Los reclamos de la Comisión de Ambiente
Asimismo, la Comisión de Ambiente de la APDH busca visibilizar las consecuencias del “modelo económico extractivista” instalado en el país durante la década del 90. Esto debido a que las medidas impuestas durante aquella época siguen vigente en nuestro país y “se expanden a costa de la salud, del agua y empobrecimiento de las poblaciones locales”, afirmaron en un comunicado.
El modelo extractivo abarca instrumentos delictivos para el sistema ambiental, ya que, daña la salud de la población, los bienes comunes, genera desigualdad económica y favorece la concentración de la riqueza. El mismo se conoce como ecocidio debido a que es un modelo que se sustenta a sí mismo en base a la destrucción de los territorios, según explica la APDH.
A su vez, el organismo remarcó que busca “promover la salud de las poblaciones y el resguardo de bienes comunes” y exige que “todes les habitantes de nuestro país tengan acceso a los bienes comunes y puedan ejercer sus derechos en forma plena”.
Finalmente, desde el organismo resaltaron la importancia de una “real y equitativa distribución de la riqueza”, dado que no es posible a través del “agronegocio, la megaminería o las megafactorías ni sometiendo a los territorios a los designios del mercado”.