El Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en colaboración con el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA), presentó la primera Encuesta de Prácticas de Riesgo Adictivo.
Este estudio, inédito en su tipo, encuestó a 6.000 personas de entre 18 y 75 años en todos los barrios de la Ciudad, proporcionando datos fundamentales para el diseño de políticas públicas orientadas a abordar consumos problemáticos. A continuación, se revelan algunos tópicos de conflicto que afectan a la ciudadanía.
Uso problemático del celular y apuestas en línea
La encuesta reveló que solo uno de cada diez jóvenes de entre 18 y 30 años presenta un comportamiento libre de riesgo en relación con el uso del celular. Además, seis de cada diez jóvenes utilizan el dispositivo más de cinco horas al día, y cuatro de cada diez presentan un nivel alto de riesgo en su uso.
Por otro lado, el 16% de los jóvenes de entre 18 y 30 años ha participado en apuestas en línea alguna vez en su vida. Estas apuestas se realizan mayoritariamente en soledad (86,6%) y con fines de entretenimiento (89,4%). Mientras que las apuestas en línea predominan entre los jóvenes, el juego presencial alcanza al 33% en adultos mayores.
El consumo de alcohol y sustancias, otro mal a combatir
El alcohol es la sustancia más consumida socialmente, con un 62% de los adultos que lo ingirieron en el último mes, cifra que se eleva al 70% en varones y en jóvenes de entre 18 y 30 años. El tabaco tuvo una prevalencia mensual del 22%, con picos en personas de entre 31 y 44 años.
El consumo de marihuana fue del 12% en el último mes, con mayor prevalencia en varones, jóvenes y personas de nivel socioeconómico medio-alto. Un 8% de los adultos consumió cocaína alguna vez en su vida, y el 12% de la población percibe bajo o nulo riesgo en su consumo ocasional. Por otro lado, los ansiolíticos fueron consumidos alguna vez por el 13% de la población, especialmente en mujeres y personas mayores.
Voces en la Ciudad contra las prácticas adictivas
Gabriel Mraida, ministro de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad, destacó la importancia de contar con este diagnóstico para el futuro: «Por primera vez, contamos con un diagnóstico serio, profundo y representativo sobre las prácticas de riesgo adictivo en la Ciudad. Sabemos más y mejor qué pasa en cada comuna, en cada franja etaria, en cada realidad social. Y eso nos permite diseñar políticas públicas que no se basen en intuiciones ni buenas intenciones, sino en evidencia concreta».
La presentación del informe se realizó en el auditorio Dr. Francisco Velsecchi de la Universidad Católica Argentina sede de Buenos Aires. Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA-UCA), resaltó que «la naturaleza de los consumos adictivos en todas sus formas en la sociedad actual obliga tanto al campo académico como a la gestión pública a considerarlos como una problemática social compleja, interdisciplinaria, multinivel, que excede a la responsabilidad individual y familiar».
Este estudio representa un avance significativo en la comprensión de las prácticas de riesgo adictivo en la Ciudad de Buenos Aires y servirá como base para la implementación de políticas públicas más efectivas en la prevención y tratamiento de los consumos problemáticos.