La noche del 13 de noviembre, aconteció un atentado suicida en la Plaza de los Tres Poderes de Brasil. Según informaron las fuentes locales, el autor del hecho fue Francisco Wanderley Luiz, un simpatizante del bolsonarismo.
Se supo que el agresor intentó ingresar al Tribunal Supremo Federal, pero como no pudo lograrlo se quitó la vida con uno de los explosivos que llevaba. A su vez, en las inmediaciones de la Cámara de Diputados se originó una segunda explosión en un auto ubicado en el estacionamiento cercano al Congreso.
Tras lo sucedido, la Policía Legislativa activó un protocolo para evacuar el edificio, ya que en el momento de las explosiones el Congreso se encontraba en sesiones.
El autor del atentado
Wanderley, también conocido como Tiu França, habría sido militante del bolsonarismo además de candidato a concejal de la ciudad de Rio do Sul en las municipales de 2020 del Partido Liberal (PL).
Su exesposa le comentó a la policía que la intención de Wanderley era matar al juez Alexandre de Moraes, quien es parte del Supremo Tribunal Federal y supuesto enemigo del exmandatario Jair Bolsonaro.
En ese sentido, cabe destacar que el agresor había compartido en sus redes sociales amenazas hacia funcionarios del oficialismo brasilero.
Repercusión política
En la tarde del 14 de noviembre el director de la policía brasileña, Andrei Rodrigues, declaró en una conferencia de prensa que el acto de Wanderley evidencia la existencia de grupos extremistas. En esa línea calificó lo ocurrido como un acto de terrorismo e “intento de abolicion violenta del estado democrativo de derecho”.
En relación, Rodrigues consideró que el atentado no es un hecho aislado, por lo que el director inició una investigación caratulada bajo el terrorismo.
A su vez, planteó que se investigara la participación de Wanderley en el ataque del 8 de enero del 2023. En aquella oportunidad, se generó un intento de golpe al gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva. Las instituciones gubernamentales ubicadas en La Plaza de Tres Poderes fueron víctimas de destrozos provocados por partidarios de Jair Bolsonaro.
Por otra parte, el expresidente repudió el hecho en su red social X. El mensaje del funcionario, titulado “Por la pacificación”, expresó su descontento con los actos violentos de Wanderley y los calificó de aislados. Sin embargo, el oficialismo sostiene la idea de terrorismo.
En respuesta, Eduardo Bolsonaro publicó en X una nota pública rechazando el discurso oficialista al cual tildó de falso y oportunista. En ese sentido, reforzó la idea de suicidio y no atentado. Además, desligó la conexión entre el expresidente y el agresor.