En estos días, el Joker, el más famoso villano del mundo de DC y del mundo de los comics en general, se encuentra en boca de todes por la segunda entrega de su película, Joker: Folie à Deux dirigida por Todd Phillips y protagonizada por Joaquín Phoenix y Lady Gaga como Harley Quinn.
Desde su estreno, la secuela ha dado que hablar. Las críticas en general han sido de lo más mixtas, por lo que les fans han ido bastante poco al cine y la recaudación en taquilla ha sido mínima.
En este marco y para anclar al nuevo filme del Joker en el mundo comiquero, con Nota al Pie repasamos el origen del personaje y su primera aparición en los comics.
Primera aparición del supervillano
Aunque el personaje de Batman ya tenía su propia historieta dentro de la franquicia Detective Comics de la marca editorial DC Comics desde 1939, para su primera publicación como serie regular, los historietistas Bob Kane, Bill Finger y Jerry Robinson sabían que necesitaría una gran contrapartida. Así, de la genialidad de este trío, en Batman Nro 1 en 1940, surgió la gran némesis del Caballero Oscuro, el Joker, mejor conocido en nuestro país y Latinoamérica como el Guasón.
Para construir su personaje, Kane, Finger y Robinson partieron del comodín de una baraja de cartas, lo que se evidencia ya en su primera aparición en la serie regular del hombre murciélago. La carta del arlequín aparece prácticamente como una impronta en viñetas clave y resultan en la firma de los crímenes del villano. En esta primera historia, Joker asesinará con previo aviso a millonaries de Gotham con una especie de veneno inyectable que les hará reír a carcajadas.
Sin dudas, la risa es clave en el personaje. De hecho, los artistas se basaron en el personaje de Gwynplaine, encarnado por Conrad Veidt en el filme El hombre que ríe de 1928, para diseñar el personaje, o al menos, en sus versiones posteriores. Se trata de una película dirigida por Paul Leni y basada en la novela de Víctor Hugo de 1869.
En el primer número del caballero de la noche, al personaje se lo propuso como un villano episódico, aunque psicópata, que Batman derrotaría fácilmente. Sin embargo, fue el editor Whitney Ellsworth quien salvó al supervillano. Para el editor, Joker quien se había presentado como una gran mente criminal, se merecía más protagonismo en la serie regular de Batman, la que necesitaba de un antagonista oscuro, aterrador y retorcido que estuviera a la altura del vigilante de Gotham.
Los orígenes del Joker
A lo largo de los años, se ha constituido una gran mística alrededor del Joker, principalmente por la falta de una historia concreta que despliegue los orígenes del supervillano.
Hasta el presente, la identidad del Joker es el mayor enigma de la historia del cómic. Se trata de un villano que no recuerda su pasado y que promueve la maldad y el caos sin ninguna razón concreta, lo que lo hace impredecible y terrorífico. De hecho, a lo largo de los diferentes arcos argumentales, el villano suele cambiar su historia sobre cómo fue que terminó volviéndose loco y por qué y cómo cambió su apariencia.
Aunque nunca ha quedado del todo claro su historia de origen, se han esbozado alguna que otra historia en los comics que ha influido en otros medios, como ocurrió en las películas de Phillips.
No fue hasta los años 50 cuando por primera vez se relató un posible origen del personaje. En esta primera historia, un tal Red Hood o Capucha Roja, en un encuentro con Batman y su compañero Robin, caía a un pozo de desechos químicos que lo desfigura para siempre para darle la apariencia que conocemos: verde, labios descarnados y piel blanca. Se trataba de un personaje que ya era de por sí un psicópata.
Sin embargo, en 1988 se dio a conocer la historia de origen considerada por les fans más acérrimos como la más emblemática. En el arco de Batman: La Broma Asesina, escrito por el reconocido guionista Alan Moore, un joven cómico decide robar en una vieja planta de tratamiento de químicos en la que antes trabajaba para ayudar a su esposa embarazada y su future hije. Al enterarse que su mujer ha muerto, salta a un gran depósito de residuos químicos y llega al exterior por una tubería. Ese evento cambia su apariencia para siempre y lo vuelve completamente loco.
Fue, justamente, la obra de Moore, la que introdujo la idea de este Joker cuya violencia y maldad deviene de su afición frustrada como comediante y que da forma a su personalidad. En el caso de la primera película de Joker de Phillips de 2019, la frustración como payaso es uno de los ejes, a lo que se le suma el maltrato y el acoso de gran parte de sociedad por el miedo ante lo diferente.
Los comics y Joker: Folie à Deux
Entonces, a partir de una lectura profunda de historietas en las que aparece el Joker es posible encontrar algunos aspectos que Phillips ha reflejado en su primera película. Pero, ¿qué pasa con la seguna entrega?
Sin hacer spoilers de la secuela, podría decirse que lo que más la ancla en el canon de los cómics es la psicología psicópata y sociópata del personaje. Folie a Deux se encargará de explotar al máximo esa faceta para llevar al personaje hasta lo alto y volverlo a bajar a través de un viaje de lo más introspectivo. Eso, básicamente es el filme, una oportunidad para explorar la psiquis del Joker, mientras lo vemos afrontar el juicio por sus crímenes que cometió en la primera película.
Harley Quinn, el interés romántico del Joker, resulta clave asimismo en esta segunda parte. Sin embargo, esta Harley, conocida también como Lee Quinzel en la película, poco tiene que ver con la personaje creada originalmente para Batman: la serie animada por Paul Dini y Bruce Timm en los 90 y en sus comics posteriores.
Aunque como ocurre en las otras historias de origen en este caso también el Joker conoce a Harley en el psiquiátrico Asilo Arkham, no es el villano el que manipula a su víctima, sino todo lo contrario. El Joker se vuelve una especie de experimento para Lee, quien parece estar fascinada con lo que representa el payaso de Gotham por lo que busca acercarse a él de la manera más retorcida.
Sin dudas, la figura del Joker y todo lo que lo rodea, hacen del personaje un enigma total y lleno de mística para les fans. Solo serán elles quienes darán el veredicto final sobre si es buena o no la película.