La sociedad de fomento Unión de Vecinos del Barrio El libertador, ubicada en Villa Tesei, partido de Hurlingham, tiene bien puesto su nombre. Vecines de las cuadras linderas participan de todas las actividades y contribuyen al crecimiento del lugar.
Mariana José es alumna del Taller de Telas para adultos y aprovechó el espacio para hacer un registro de la muestra de mitad de año para el curso de fotografía inicial que realizó en Nota al Pie. A continuación, podrás conocer más sobre la historia de la institución y ver las fotos del evento.
Vecinos unidos
El organismo, creado en un barrio que inicialmente era de policías, nació en 1956. Los vecinos se agruparon en reclamo de todos los servicios que faltaban en la zona: pidieron asfalto, tendido, iluminaria y todas las obras públicas de las que carecían por ser un terreno de quintas.
Varios años después y con mucho esfuerzo, fue creciendo. Primero la salita de primeros auxilios Don Pedro de Clementi, y en la década del 90, el primer jardín de infantes.
Julio Laino, es el presidente de la sociedad desde el 2020, y sostiene: “Somos todos hijos de padres y nietos de abuelos que alguna vez trabajaron en esta institución. Tenemos el corazón en este lugar y ponemos lo mejor de nosotros”.
El espacio cuenta con apoyo municipal, que comparte con otros clubes, pero su principal fuente de ingreso son los aportes de los vecinos que asisten a talleres y actividades.
“Hacemos festivales en las fechas patrias, en el día del niño e impulsamos el LIBERTAROCK, un festival con bandas de rock a beneficio”, cuenta Julio.
Hace pocos años, el espacio también se utilizaba para para el plan FinES y talleres de fotografía, oficios, guitarra, canto, artística, pero el lugar se redujo porque empezaron a compartir espacio con un Centro de Jubilados. “Estamos pensando en construir aulas privadas en el primer piso para poder retomar esas actividades”, comenta Julio.
Sin embargo, en los espacios comunes continúan funcionando talleres relacionados con deporte, como son telas, patín artístico, futbol (futsal, futbol infantil y de veteranos), vóley femenino y masculino, además de boxeo y catch, que es lucha libre, boxeo.
Una de las actividades más innovadoras que se gestaron en la sociedad de fomento, es un taller que se lleva a cabo los sábados por la mañana y que se viene preparando desde hace más de un año.
Se llama Teatro por la identidad del barrio. “Durante la primera etapa los chicos entrevistaron a muchos vecinos y fueron descubriendo la historia contada por los mismos vecinos. Todas las entrevistas están grabadas, escritas y salió un boletín muy bueno. Es todo lo que refiere a la historia del barrio, algo que nos encanta”, cuenta el presidente.
En base a este trabajo, se va a recrear una obra de teatro.
Una gran familia
El domingo 14 de julio se llevó a cabo la muestra de mitad de año del taller de telas. Noelia Salica es la coordinadora de taller y trabaja asistida por otros profes, Andrea y Braian. Juntos brindan clases y acompañamientos para todos: desde niños de 4 años hasta adultos.
“Llegué en el 2016, a través de una publicación de Facebook donde uno de los chicos de la comisión quería reactivar la sociedad de fomento porque estaba un poco en decadencia, no había muchos talleres”, cuenta Noelia.
Ella llegó con sus materiales y comenzó a dar clases a la gorra. “Al principio éramos tres o cuatro, hoy somos más de 30. Todo se hizo a pulmón”, dice, y añade que los ingresos también se utilizaban para comprar materiales para mejorar la sociedad de fomento.
“Hoy el lugar está mucho mejor, es más familiar, vienen a todos los talleres, incluso gente que no es del barrio”, cuenta. A sus clases se acercan personas de Morris, Hurlingham, Villa Tesei y Castelar. “Somos muchos, la familia creció bastante”, afirma contenta.
El lugar, y el taller, crecieron bastante. Cuentan con cinco telas, tres trapecios, aros y cuerdas. “Podemos comprarlo por colaboraciones de los profes y, sobre todo, con lo recaudado en las muestras, para lo que cobramos una entrada que no es excluyente, pero a nosotros nos ayuda”, explica Noelia.
Esta muestra es, al menos, la séptima en realizarse. Noelia no lo recuerda con exactitud. Pero han sido tantas y todas vividas con tanto entusiasmo que es difícil recordar.
“El espacio creció, sobre todo después de la pandemia. Pero por muestra recibimos más de 100 personas”, dice. Compartir el arte y el trabajo de todo el año da sus frutos.
“La gente se compromete, las familias, tanto de los niños como de los adultos. Para mí es una gran familia. Somos un gran equipo, entre todos hacemos un gran esfuerzo para que todo funcione correctamente”, expresa Noelia.
La muestra del domingo 14 no tuvo una temática particular, pero la premisa fue: la libertad. “Queríamos que cada uno exprese su arte como desee, siempre guiados, pero demostrando las ganas de hacer a su propio gusto y comodidad”, señala. “Queríamos que los alumnos pudieran decir “acá estoy yo, y esto es lo que hago”, y salió muy bien”, finaliza.
La sociedad de fomento tiene diversas redes sociales donde puede encontrarse mayor información.