La Justicia investiga la desaparición de Loan Danilo Peña, un niño de 5 años, que es buscado hace más de un mes en el Paraje Algarrobal de la provincia de Corrientes. Entre las hipótesis de la investigación se encuentra el delito de trata de personas.
Karol Reyes, de Nota al Pie, dialogó con la divulgadora Daniela Gasparini, licenciada en psicología y especialista en la problemática de trata de personas en Argentina, género y derecho. “La finalidad última que tiene el delito de trata es la explotación de seres humanos y lo que perciben las organizaciones criminales es el rédito económico, sin eso no tendría razón de ser”, explicó.
¿Qué es la trata de personas?
Según la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, la trata es la “captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación”.
Al respecto, Gasparini explicó que “la trata es un delito trasnacional, ya que puede trascender las fronteras de los países”. En ese sentido, agregó que “una persona puede ser captada en nuestro país y trasladada a otro país para ser explotada”.
Para la especialista, “las organizaciones criminales se han valido principalmente de las desigualdades estructurales, económicas, y de género para poder avanzar en la lógica del rédito económico que percibe”. Además, mencionó que “se dice que la trata de persona es la esclavitud actual, se va aggiornando a las diferentes coyunturas de cada región y de la época”.
Para la licenciada en psicología, el delito “existe porque encuentra entre sus redes a cómplices del poder político, económico, judicial”. En relación a ello, expresó que “la modalidad más frecuente de este delito es el engaño, es ganarse la voluntad de la persona y no necesariamente llevar adelante el secuestro”.
La situación en nuestro país
Para Gasparini, “las principales características que tienen estas víctimas es su situación de vulnerabilidad”. Entre ellas enumeró la pobreza, la falta de acceso a derechos por razones de género, la edad, la situación migratoria, entre otras.
Sin embargo, a pesar de estas desigualdades, destacó que “cualquier persona puede ser víctima de trata, hay muchos avances en estas organizaciones criminales de cómo engañar y ganarse a sus víctimas”.
En ese sentido, habló de la importancia de estar alertas. Prestar atención “si te piden fotos que no son adecuadas, si te piden determinada información que no tiene nada que ver con una oferta de trabajo, si tienen que viajar, o si te ofrecen mucho dinero en mucho tiempo”.
Gasparini, además, se refirió a la Ley de prevención y sanción de la trata de personas y asistencia a sus víctimas. En su primer artículo, se explica que esta norma “tiene por objeto implementar medidas destinadas a prevenir y sancionar la trata de personas, asistir y proteger a sus víctimas”.
“Desde el 2008 hasta la actualidad se ha avanzado en el rescate de muchas víctimas”, afirmó. También desmitificó la idea de que se deben esperar 24 horas para denunciar la desaparición de una persona: “Las primeras horas son cruciales cuando se pierde alguien”, expresó.
La trata en cifras
Según datos de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX), la Línea 145 recibió más de 7.500 denuncias por trata de personas entre 2020 y 2024. En lo que va del año, se registraron 812 denuncias; entre ellas, 121 relacionadas con explotación de menores.
En paralelo, entre 2020 y 2023, hubo 146 sentencias por trata de personas, con el 70,4% de ellas condenatorias. Desde 2008 hasta el 31 de mayo de 2024, el Programa Nacional de Rescate asistió o rescató a 20.854 víctimas.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a nivel mundial las mujeres son las principales víctimas de la trata de personas: representan el 46% y las niñas el 19% de todas las víctimas de la trata. En paralelo, 1 de cada 3 víctimas detectadas es un menor.