Una militante y abogada de Organismos de Derechos Humanos recibió una amenaza contra ella y su familia en su domicilio particular de la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe.
A través de un comunicado en conjunto, Abuelas de Plaza de Mayo filial Rosario e H.I.J.O.S Rosario denunciaron el pasado jueves un nuevo hecho violento contra el colectivo, siendo este el segundo en menos de un mes.
En el comunicado, que lleva la firma de ambos organismos, detallaron: “recibió una amenaza por escrito contra ella y su familia en su domicilio particular”. Ante tal situación entienden que “da cuenta del grado de intimidación y de la gravedad de los hechos”.
En un contexto social fogoneado por discursos de odio que se construyen a diario desde el gobierno de La Libertad Avanza, estos hechos violentos no deben ser tomados a la ligera.
Según los detalles del hecho denunciado, la activista recibió “una advertencia por su participación como militante de derechos humanos” y que, además, “amenaza su integridad física”.
Nunca Más: la importancia de seguir luchando por los DDHH
Desde ambos organismos rosarinos no pierden de vista la importancia de ver estos hechos de acuerdo con la coyuntura actual. “Es este clima social, habilitado por la investidura presidencial y vicepresidencial, que ningunea la lucha que construyó nuestro pueblo para exigir Justicia, el que fogonea la avanzada de violencia que estamos viviendo”, señala el comunicado.
“Leemos este terrible hecho como parte de una sumatoria de graves acciones que vienen sucediendo en nuestro país: desde las intimidaciones a Teresa Laborde Calvo para que no dé charlas en escuelas, hasta el ingreso al domicilio y posterior ataque que sufriera nuestra compañera Sabrina Bölke”, interpretaron los organismos al recordar los actos de violencia conocidos el mes pasado perpetrados contra otras defensoras de los derechos humanos.
En cuanto al hecho, los organismos comunicaron que ya se realizó la denuncia ante la justicia. En este sentido, pidieron al poder judicial que “se aboque de lleno en la investigación y agote las instancias necesarias para el esclarecimiento de lo sucedido”.
Al mismo tiempo, solicitaron “mesura” a la sociedad para no entorpecer el proceso judicial y “particularmente para resguardar a nuestra compañera y su familia”. Sin embargo, aclararon: “no podemos dejar de advertir públicamente sobre este hecho intimidatorio y violento, que no es aislado”.
A 40 años de Democracia, la responsabilidad es de los gobiernos
Además de alertar a la sociedad, desde Abuelas de Plaza de Mayo, advirtieron que “este discurso también fue sostenido por el gobernador de nuestra provincia (Maximiliano Pullaro), quien no tuvo tapujos en decir que no quiere reclamos de los Organismos de Derechos Humanos, en medio de una escalada de violencia sin precedentes en nuestra ciudad”, sostuvieron.
De esta forma y teniendo en cuenta la reciente conmemoración de los 40 años del retorno democrático, estos delitos resultan “inadmisibles y repudiables”. Por ello instaron al gobierno a tomar cartas en el asunto.
En el comunicado solicitaron a autoridades nacionales y provinciales a “frenar los discursos de odio que habilitan la estigmatización y la violencia contra quienes piensan diferente” y exigieron “la adopción de las medidas necesarias para prevenir la repetición de actos semejantes y para garantizar la seguridad de las víctimas”.
Para concluir, reafirmaron su compromiso por la lucha por los Derechos Humanos, por una vida en democracia y por dedicar la vida a la militancia. Es así como seguirán trabajando para denunciar “hechos de violencia y persecución política y continuaremos exigiendo el esclarecimiento de los crímenes de la dictadura y la sanción a sus responsables. Nunca más es Nunca Más”, firmaron.