Tras más de cinco meses del asedio israelí en la Franja de Gaza, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dictó un alto al fuego durante el mes del Ramadán.
En paralelo, se publicó un boletín informativo de la embajada del Estado de Palestina en Argentina. En el mismo, se cuentan 32.650 víctimas palestinas fatales y otras 79.250 heridas desde el 7 de octubre de 2023, además de la situación de hambruna de la que viene advirtiendo la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De este modo, el Consejo de la ONU aprobó por 14 votos un alto el fuego inmediato, la liberación incondicional de todos los rehenes y que se garantice el acceso humanitario. Sin rechazos, Estados Unidos eligió abstenerse en la votación del texto elaborado por los 10 miembros no permanentes del organismo.
La intención es que Israel cumpla con la resolución que abarca una tregua durante el mes de Ramadán, que inició el 11 de marzo e irá hasta el 9 de abril.
Repercusiones
En este sentido, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, celebró la medida: “Por fin sale del Consejo de las Naciones Unidas una resolución de alto al fuego en Gaza”. Además, realizó una tajante invitación a “las naciones del mundo” a que si Israel rompe este cese al fuego “se rompan relaciones diplomáticas con ese país”.
Por su parte, el Secretario General de la ONU, António Guterres, expresó en la red social X: “Los combates en Gaza deben terminar ahora. Los rehenes deben ser liberados ahora”. Y pidió por “un fin duradero al conflicto palestino-israel”, cuya solución “solo puede lograrse mediante una solución de dos Estados”.
En tanto, el sitio oficial de las Naciones Unidas destacó que desde el inicio de las hostilidades hubo “bombardeos diarios de Israel, junto con el bloqueo casi total de agua, electricidad y ayuda vital”. A su vez, condenó las más de 32 mil muertes palestinas y la situación de hambruna a la que se somete al país.
Como resultado, ponderaron la “urgente necesidad de ampliar el flujo de ayuda humanitaria y reforzar la protección de los civiles en toda la Franja de Gaza”.
Los números del horror
Además de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, en el día de ayer se conoció el boletín semanal de la embajada del Estado de Palestina en Argentina. El mismo abarca datos desde el inicio de las hostilidades en altas proporciones del 7 de octubre hasta la situación actual en la que se encuentra Palestina.
Allí, señalaron que en el lapso de 171 días, las muertes en la Franja de Gaza superan las 32.200 víctimas con 74.500 personas heridas. En tanto, contabilizan otras 450 muertes y más de 4750 heridos en Cisjordania, incluida Jerusalén Este.
En total, los escabrosos números del informe arrojan un total de 13.750 niños asesinados, 8800 mujeres y al menos 1049 adultos mayores. Los desaparecidos, con o sin vida, escalan a 8100 mientras que se calcula un total de 1.93 millones de desplazados por la fuerza, es decir, el 85% de la población de Gaza.
El hambre es otro de los problemas que empieza a cobrar vidas palestinas, debido a que “31 personas ya murieron por desnutrición y deshidratación, incluidos 27 niños y bebés”, detalló el informe.
Respecto a ello, citaron las palabras del Comité de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño: “Los niños en Gaza se están muriendo de hambre. La potencia ocupante ha bloqueado o restringido severamente los alimentos y otros suministros y ayuda esenciales para la vida”.
Por estas acciones, en la actualidad hay 1 de cada 3 niños menores de 2 años en el norte de la Franja de Gaza que sufre desnutrición aguda, lo que es un significativo aumento del 15,6% que se registraba en enero.
A su vez, señalaron que los ataques no discriminan: 348 miembros del personal de salud y 48 miembros del personal de Defensa Civil y Rescate fueron asesinados. También contabilizaron el deceso de 171 miembros del staff de la ONU y de 125 periodistas, además de la destrucción del 50 Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA).
A su vez, el informe detalló que “el gobierno de Ocupación israelí se ha apoderado de 800 hectáreas de tierras palestinas del Valle del Jordán”.
Ataques de hospitales en Gaza y el bloqueo de ayuda humanitaria
El boletín de la embajada Palestina en Argentina también confirmó que se sostienen los ataques a hospitales. “Las fuerzas militares de Israel irrumpieron en el Hospital Al-Shifa en la ciudad de Gaza con tanques y fuego intenso, provocando asesinatos, heridos, y más destrucción del complejo hospitalario”, relataron.
En tanto, el 19 de marzo, la Media Luna Roja Palestina anunció el asesinato de 14 de los miembros de su personal de salud, el que trabajaba desde el recrudecimiento del conflicto en octubre.
Al mismo tiempo, detallaron que “se acumulan las acusaciones de violaciones sexuales contra las mujeres palestinas por parte de los soldados del ejército de la ocupación israelí”.
La OMS reveló que en los territorios palestinos ocupados desde el 7 de octubre han documentado “410 ataques contra la atención sanitaria en la Franja de Gaza”. Esas ofensivas arrojan un saldo de 685 muertos, 902 heridos, daños en 99 instalaciones y 104 ambulancias afectadas. La división de los ataques estuvieron entre la ciudad de Gaza (38%), el norte de Gaza (23%) y Khan Younes (28%).
Falta de alimentos
Por otra parte, señalaron que las autoridades de ocupación israelí le impidieron el acceso al comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini. “A pesar de la tragedia que se está desarrollando bajo nuestra vigilancia, las autoridades israelíes informaron a la ONU que ya no aprobarán ningún convoy de alimentos de la UNRWA hacia el norte”, contó hace dos días Lazzarini.
Del mismo modo, agregó que esta traba solo hará que se vaya más rápido “hacia la hambruna” y que “muchos más morirán de hambre, deshidratación y falta de refugio”.En este sentido, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó: “Impedir que la UNRWA entregue alimentos es, de hecho, negar a las personas hambrientas la capacidad de sobrevivir”. Y concluyó que “todos los esfuerzos para entregar alimentos no solo deberían permitirse, sino que debería haber una aceleración inmediata de las entregas de alimentos”.