En la tarde del jueves 23 de septiembre a las 18 h se realizó el encuentro virtual “Imágenes religiosas en el espacio público”. Fue organizado por la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), el Encuentro Federal de Abogades Laicistas y Organizaciones Laicistas Argentinas (OLA).
En los últimos días hubo un hecho que reflotó en los medios masivos de comunicación la discusión sobre la separación de la Iglesia y el Estado. El flamante Ministro de Educación, Jaime Perczyk, pronunció el juramento inicial ante su nuevo cargo. Pero para ello, retiró la Biblia que estaba sobre la mesa, y colocó su mano sólo sobre la Constitución Nacional.
En ese marco, en el conversatorio “Imágenes religiosas en el espacio público” disertaron les especialistas en derecho Leo Loto, Mariana Catanzaro, José María Martocci, Analía Más y Roberto Saba. Elles argumentaron desde diferentes aristas por qué consideran necesario que se asegure la laicidad del Estado argentino.
¿Jurar sobre las Santas Escrituras?
“Jurais por la patria desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de Ministro de Educación”, le preguntó el presidente Alberto Fernández a Jaime Perczyk. “Sí”, contestó este. “Si así no lo hiciereis, la Nación os lo demande”, finalizó el primer mandatario.
A diferencia de muchos juramentos profesionales, el texto que utilizó Perczyk al momento de asumir su nuevo puesto no incluyó a Dios ni a las Santas Escrituras. Pero, ¿por qué había sobre la mesa una biblia católica?
Eso se preguntó uno de les panelistas del conversatorio “Imágenes religiosas en el espacio público”, el abogado y profesor Roberto Saba. Para él, este acto implica un impacto cultural, ya que “hace cuestionar a la gente algo que está naturalizado”.
Saba también cuestionó el corrimiento que realizó Perczyk, al recordar una foto del ministro junto al Papa de la Iglesia Católica. Pero otra de las panelistas de la charla realizó una observación.
Mariana Catanzaro es abogada, docente e integrante de la Secretaría de Promoción por un Estado Laico de la APDH. Ella sostuvo que la imagen de Perczyk con el Papa no le agravia en lo personal. La especialista diferenció entre lo que se exige a les funcionaries en su tarea pública de lo que pueden creer en su vida personal. “Los laicistas no promovemos el ateísmo”, afirmó.
Figuras religiosas en el espacio público
El conversatorio se realizó mediante la plataforma Zoom y contó con alrededor de sesenta participantes. Versó sobre la necesidad de que el espacio público sea un lugar neutro, sin preferencias por ninguna confesión religiosa.
El primer disertante fue Leo Loto, profesor de historia y referente de la Comisión de Historia y Espacio Público de la Campaña Federal por la Separación Estado/Iglesia – AMBA.
Loto brindó un contexto histórico del tema. Recordó que la revinculación entre la Iglesia Católica y el Estado Argentino fue en el Congreso Eucarístico Internacional de 1934. “Desde entonces se acrecentaron la colocación de monolitos, hitos, estatuas y todo tipo de iconografía religiosa” afirmó.
Además, rememoró acciones exitosas hechas por organizaciones laicistas. Entre ellas, cuando en 2012 se retiró la imagen de la Virgen de la banca del presidente de la Honorable Cámara de Diputados Nacional.
Por su parte, Mariana Catanzaro trajo a la charla artículos de la Constitución Nacional que se contradicen entre sí. Algunos promueven la libertad de culto, y otros se rigen bajo la religión católica. Ante esta situación, afirmó que “la libertad de expresión de un católico” no debe sobreponerse sobre el derecho de les creyentes de otros cultos.
La religión como cuestión cultural
Del conversatorio también participó Analía Mariel Más, que entre otras cosas es abogada, docente, especialista en género y diversidad y secretaria de género de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT). La profesional relató numerosas experiencias personales en las que desde la religión católica en las instituciones públicas se la discriminó a partir de sus elecciones y opiniones.
También explicó cómo los símbolos religiosos que predominan en espacios públicos influyen en la educación de les argentines. Al igual que sus compañeres, se refirió a la figura de la Virgen María en diferentes instituciones como hospitales y comisarías. ¿Cómo afecta esto en la psiquis de una persona que, por ejemplo, acude a un hospital a realizarse un aborto?, se preguntaban.
José María Martocci enmarcó los diferentes cuestionamientos en la cuestión de la cultura. El también es abogado, y dirige diferentes seminarios y organizaciones que tratan sobre los derechos humanos y la discriminación.
El profesional se refirió a una demanda de la que forma parte, en la que reclama a la Legislatura bonaerense el retiro de una imagen mariana. Se trata de una figura de la Virgen de Luján que se encuentra en el Salón de los Pasos Perdidos en la Cámara de Diputados de Buenos Aires.
Para él, la importancia del pedido radica en que esa imagen marca una situación de poder del catolicismo dentro del edificio. “Somos animales con lenguaje”, explicó Martocci. “Hay símbolos que no son inocuos, marcan un camino a seguir”. Se puede ver la presentación completa aquí.