El pasado lunes, luego de una cumbre entre la Unión Europea (UE) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para debatir una estrategia colectiva sobre Ucrania, el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que si bien no existe un consenso para enviar tropas occidentales sobre el terreno de manera oficial, no es posible descartar nada.
La polémica declaración, como era de esperar, generó una hecatombe diplomática. En ese sentido, no solo el Kremlin salió a responder la grave afirmación del presidente de Francia sino que decenas de países occidentales se desligaron de la posición de Macron.
Macron en solitario: no lo acompañaron ni sus aliados
Durante los últimos dos días, más de una decena de países occidentales se pronunciaron en contra de las declaraciones del presidente francés. Más allá de que, según señalan diarios estadounidenses, efectivamente el plan de enviar tropas fue estudiado por la OTAN, nadie quiere ser asociado con declaraciones que podrían aumentar aún más el conflicto con Rusia.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Adrienne Watson, afirmó que “el presidente Biden ha dejado claro que EEUU no enviará tropas a luchar en Ucrania”.
Por su parte, el canciller alemán, Olaf Scholz, remarcó que “no habrá tropas terrestres, ni soldados en suelo ucraniano que sean enviados allí por los estados europeos o los países de la OTAN”.
Del mismo modo, el ministro de Relaciones Exteriores de Italia, Antonio Tajani, manifestó que la propuesta de enviar tropas a Ucrania “es una idea de Macron” y que “hay que tener mucho cuidado”. Una posición también compartida por el gobierno de España, que a través de su portavoz, sostuvo que “no estamos de acuerdo”.
Declaraciones similares fueron expresadas por Eslovaquia, Grecia, Países Bajos, Canadá, República Checa, Suecia, Polonia, Hungría e incluso el Reino Unido. En tanto, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, rechazó la idea de Macron e indicó que “no existen planes para tropas de combate de la OTAN en suelo ucraniano”.
La respuesta del Kremlin
El martes, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, respondió a una pregunta relacionada con la posibilidad de un conflicto militar directo con la OTAN a partir de las declaraciones del presidente francés. En ese sentido, el funcionario ruso sostuvo que, de darse el escenario planteado por Macron, “no debemos hablar de probabilidad, sino de inevitabilidad”.
Del mismo modo, Peskov afirmó que el Kremlin conoce la posición de Macron sobre “la necesidad de infligir una derrota estratégica a Rusia” e indicó: “Hemos prestado atención a que se ha debatido el tema del envío de militares a Ucrania”.
En este aspecto, el portavoz del presidente ruso, además de destacar que no existe un consenso unificado sobre ello, afirmó que “una serie de países mantienen una valoración del peligro potencial de tales acciones”.
En la misma jornada, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, recordó que, hace tan solo un mes, el canciller francés, Stéphane Séjourné, calificó como “manipulación rusa” la participación de Francia en el reclutamiento de mercenarios para Ucrania.
De igual manera, en respuesta a las palabras de Macron, Zajárova afirmó que “existe una fuerte sensación de que el presidente de Francia, en principio, no es consciente ni de lo que dicen sus subordinados ni de lo que él mismo dice”.