Luego de tres días de sesiones en la cámara de diputados y de represiones constantes a las organizaciones que manifestábamos nuestro rechazo en la Plaza de Los Dos Congresos se aprobó “en general” la Ley Ómnibus por parte de la Alianza gobernante (LLA + PRO) y diputados “dialoguistas” pertenecientes a la UCR y Hacemos Colación Federal.
Este martes 6 empezará el tratamiento artículo por artículo de la Ley y volveremos a organizarnos, construyendo la más amplia unidad, en defensa de los intereses populares, porque no vamos a aceptar una falsa libertad condicionada a los caprichos del mercado.
A los trabajadores y trabajadoras públicas, no solo se nos juega nuestros puestos de trabajo.
Si se le otorgan a Milei las FACULTADES DELEGADAS cualquier tema que se saque del proyecto, el presidente lo puede volver a poner con la sola voluntad de un “monarca”.
La Ley desfinancia el país como pasó durante la dictadura y los años 90, donde se endeudó el país y se vendieron la mayoría de las Empresas del Estado a corporaciones extranjeras mediante las “PRIVATIZACIONES”. Eso terminó en una crisis económica y social con hambre y desocupación generalizadas, entregando los recursos naturales, el corralito y los bancos llevándose los ahorros de la gente.
Ponen en venta el fondo que garantiza las jubilaciones y los aportes que hacemos los trabajadores/as registrados/as todos los meses, el FONDO DE GARANTÍA DE SUSTENTABILIDAD queda liberado para la timba financiera, como ya pasó con las AFJP.
Se aprobaría una REFORMA LABORAL que básicamente le saca o reduce las multas o las penas a empleadores para permitirles que no hagan los aportes de salud y jubilaciones. El corolario de todo esto es el capítulo que elimina el derecho a la PROTESTA en nombre de la SEGURIDAD, no se dedican al combate del delito, sino a transformar en un delincuente al que proteste contra todas las injusticias que quieren legalizar a través de esta Ley.
La aprobación en general terminó siendo uno de los episodios más lamentables de la democracia argentina, donde se vota una ley y un dictamen que ni el pueblo, ni los diputados y diputadas conocían, con negociaciones por fuera del congreso nacional y con palos contra los trabajadores y trabajadores.
Desde la Asociación de Trabajadores del Estado sabemos que la única lucha que se pierde es la que se abandona y por eso creemos más que nunca que debemos respaldar a aquellos que en ambas cámaras del congreso siguen representando y defendiendo a los argentinos y argentinas.