El compost es una práctica sustentable para adquirir abono de manera natural. Es necesario utilizar un poco de tierra y aquellos desechos orgánicos que se consumen en el día a día. El promedio aproximado para que el compost se genere es de dos a tres meses, siempre y cuando se den las variabilidades de temperatura adecuadas.
Para realizarlo no hace falta tener tantas cosas. Se puede utilizar un poso, un tacho, un recipiente mediano a grande, un balde o un cajón de madera. Para que esta práctica sea realizada de manera adecuada es necesario que la ubicación del mismo esté aislado de lluvias intensas o de las altas temperaturas.
Hay que ofrecerles a los microorganismos las mejores condiciones para que puedan desarrollarse y transformar la materia orgánica en abono natural. Lo ideal es agregar distintos tipos de restos orgánicos y vegetales para lograr un equilibrio y que se cumplan los procesos necesarios.
El proceso de elegir y decidir hacer un cambio a la tierra
El compost es abono natural u orgánico que se obtiene por la descomposición de materia orgánica, es decir, de los desechos que se tiran luego de consumir como por ejemplo: cáscara de huevo, yerba, cáscara de manzana, entre otros. Esta práctica no emana olores y es beneficiosa para el suelo, plantas y huertas.
Producen la biodegradación de los residuos orgánicos y garantizan una reserva de nutrientes en las plantas, favoreciendo la absorción, retención de agua, circulación del aire y la limitación de los cambios bruscos de temperatura o de humedad.
Este proceso se lleva a cabo por diversos organismos que descomponen, comen, trituran, degradan y digieren las células y moléculas que componen la materia orgánica. Quienes se encargan de hacer este proceso son las bacterias y hongos microscópicos, lombrices, larvas y otros insectos.
El uso del compost en el hogar o en otros sitios donde haya huertas o plantas, permite que se mejoren las características del suelo, evitando la utilización de fertilizantes químicos, pesticidas y además se logra un ahorro en el agua. Este método sirve para que en caso de producir alimentos en casa, estos sean más sanos y permite contribuir con el medio ambiente.
Que sí y que no a la hora de compostar ¿Qué materiales se deben mezclar?
A la hora de seleccionar las materias para el compost es necesario saber cuáles son los materiales que se pueden utilizar y cuales no se deben colocar. Además de saber que la proporción es dos partes de materiales húmedos por una de materiales secos para mantener la humedad en el compostador.
Materiales húmedos: son ricos en agua y tienen sustancias nutritivas como el nitrógeno, en ellas entran: los restos de frutas y verduras, restos de podas del patio, restos de pasto, cáscaras de huevo, restos de plantas, pieles y cáscaras, café o infusiones.
Materiales secos: están compuestos por carbono, son las ramas, las hojas secas, la paja y el pasto seco.
En pequeñas cantidades: cenizas, cartones de huevos, servilletas, bolsas y envases de papel.
Lo que NO: deposiciones de perros y gatos, filtros de cigarrillos, pañales, revistas ilustradas, tejidos sintéticos, materiales no orgánicos (plásticos, vidrios, metales, gomas).
Un proceso que lleva tiempo y conciencia
El compostaje tarda aproximadamente entre dos a tres meses para que todo lo del tacho se degrade, interfieren varias cuestiones para que este fenómeno se produzca. Es muy importante mantener la humedad y la proporción de materiales secos y húmedos para que funcione a la perfección.
Una vez que se prepara el tacho con la tierra y las materias orgánicas, el primer proceso que aparece es el de “descomposición y degradación”. Esto permite que las bacterias y los hongos inicien con su actividad y generen calor. La temperatura promedio puede llegar a unos 70°, varía dependiendo de qué materiales se depositen.
Esta fase dura entre 6 a 8 meses, depende de la época del año, de la materia orgánica, del lugar y de las condiciones climáticas donde esté ubicado y de su mantenimiento.
Por otra parte, la segunda etapa del compost es la de la “maduración”. En esta, las bacterias actúan a una temperatura de 20 a 30°C, se multiplican diversos insectos y lombrices y nutren con microorganismos, restos vegetales para la formación de un compost orgánico.
Un medioambiente más sano y limpio para todes
Los residuos orgánicos constituyen entre un 40 o 50% de materia en el tacho de basura. La implementación de recoger y comenzar a utilizar este método sirve para evitar que se generen más emisiones de dióxido de metano que influyen en el efecto invernadero –causante de los cambios climáticos-, compostando se reduce la cantidad de residuos orgánicos.
Es un proceso que no requiere costos ni inversión, sino que con elementos que se tienen en casa se puede armar. Las ventajas más significativas es que se evita aglomerar materia en vertederos o basurales y brinda nutrientes para las plantas.