A 40 años de la democracia y en un contexto en el que los discursos negacionistas volvieron a salir a flote, llega a Buenos Aires de la mano de la incipiente editorial rosarina Capitana, el libro ‘Impresas Políticas’, que recopila piezas literarias y gráficas de nueve mujeres expuestas a contexto de encierro durante la última dictadura cívico militar. Las autoras y editoras del libro- publicado en el 2022- estarán visitando CABA y La Plata en una gira que busca compartir cuál fue el proceso de creación de la pieza y los testimonios vividos en carne propia.
Capitana es una imprenta artesanal que nació en Rosario con el objetivo de recuperar algunas técnicas de impresión que fueron desfasadas o desechadas por el mercado para ponerlas a disposición de diseños y estéticas más contemporáneas. El primer libro publicado por la editorial fue Impresas Políticas, que busca plasmar las historias colectivas a partir de la recopilación de poemas, dibujos, cartas, testimonios, diarios, notas y archivos.
Según explicó Victoria Gómez, editora de Impresas Políticas, en conversación con Nota Al Pie, Impresas Políticas “es una recopilación de un montón de producciones o expresiones de estas mujeres que han sido presas políticas en la última dictadura y que tiene la particularidad que son todas mujeres de Rosario y de la región”.
Además, Nota Al Pie dialogó al respecto con Elida Deheza, presa política y autora del libro, que aseguró: “De nosotras se conoce el sufrimiento, los secuestros, la cárcel, pero muy pocas personas han podido poder contar cómo sorteamos todas esas dificultades, cómo sobrevivimos y qué hicimos para sobrevivir”.
¿Cuál es el objetivo del libro?
Impresas Políticas nos lleva a conocer cómo se vivía en aquellas cárceles, la lejanía de las familias, las compañeras que tenían hijes, las que habían perdido a sus compañeres, las que no sabía que habían pasado con sus compañeres. Según relató Elida, el objetivo principal del libro es mostrar “lo que hemos vivido internamente”.
A partir de la originalidad de la editorial, las autoras pudieron relatar “esa parte que hemos guardado para nosotras, las cosas que escribimos en los cuadernos carcelarios, los dibujos que nos hacíamos y esa es la expresión de cómo sorteamos esos años en las de la dictadura”. En este marco, remarcó que el libro tiene la “particularidad” y la “osadía” de poder mostrar lo que las compañeras no habían podido llegar a visibilizar.
Además, destacó que la Editorial Capitana tuvo el coraje de “poner en palabras historietas que fueron silenciadas”. En este marco, indicó: “Nuestra palabra fue vedada, silenciada, desaparecida, asesinada durante muchísimos años y las nuevas generaciones tienen el deber, como lo tuvimos nosotros y lo seguimos teniendo, de defender lo que hemos conquistado”.
Según relató Victoria, el objetivo final del libro fue cambiando a medida de que las autoras comenzaron a compartir el material que tenían en sus cuadernos de celdas. Un libro destinado a ser una recopilación de poesías, “terminó siendo Empresas Políticas, que es mucho más que poesía”.
El proceso de creación del libro
A partir de la intención primera de recoleccionar poesías de mujeres que habían sido detenidas en la dictadura, comenzó la búsqueda en el Museo de la Memoria de Rosario, donde las editoras pudieron encontrar algunos nombres y comenzaron a contactarse. Luego, fueron descubriendo que había una conexión entre ellas. “Se conocían, estaban organizadas y de a poco fuimos encontrando a las autoras del libro que a partir de elaborar un vínculo de confianza nos fueron mostrando el material que tenían”, relató Victoria.
A medida que las autoras compartieron su material, el libro que buscaba ser de poesía, fue convirtiéndose en una pieza literaria conformada por dibujos, cuentos, cartas, postales, y canciones. “Poco a poco fueron mostrando piezas gráficas y literarias que generaban cierta vitalidad en un contexto de mucho terror y violencia”, indicó la editora.
Por otra parte, las editoras buscaron recuperar aquellas narrativas que “trascienden lo escrito”, que tenían que ver con la materialidad de lo que encontraban en los cuadernos. En el producto final replicaron materiales, las texturas gráficas y la estética que, según expresó Victoria, también narran lo acontecido en un contexto donde los cuadernos estaban totalmente ocultos. En este marco, el libro tiene forma de cuaderno, no se respetan los renglones ni los márgenes, utiliza figuras, rayones, tachaduras de censura y sellos.
A 40 años de democracia
Este año electoral en la Argentina celebramos los 40 años de democracia, al respecto Victoria expresó: “Hay algunas personas que se atreven a cuestionar la democracia y este tipo de libros como otros dispositivos y actividades culturales abonan a incidir en la construcción de la memoria colectiva, la búsqueda de verdad y la justicia”.
Por su parte, para Elida, el libro viene a permitir discutir el presente. “No es lo mismo pensarse en un futuro con una democracia renga que nos adeuda muchas cosas pero podemos salir a la calle a reclamar”, mientras que otros proyectos en los que “pensar distinto es la pena de muerte, donde se habla de un Estado de Sitio para implementar un proyecto económico”. Además, agregó que hay un país que “nos propone la oscuridad que ya hemos vivido los argentinos y que probablemente las nuevas generaciones tengan que volver a revisar”.
Impresas Políticas llega a Buenos Aires
Las presentaciones se realizarán entre el 23 y 25 de noviembre en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y La Plata. El jueves 23 las editoras y autoras se presentarán en la librería Céspedes, ubicada en Álvarez Thomas 853, a las 18.30 horas. El viernes 24 se encontrarán a las 18 horas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA). Por último, el sábado 25 se realizará la presentación en el Centro de Arte de la Universidad Nacional de La Plata a las 17 horas.
Según describió Victoria, las presentaciones siempre son muy “encantadoras” ya que las autoras no sólo comparten sus escritos, sino también sus experiencias e historias que conmueven mucho.
Además, Elida aseguró que “cada vez que nos permiten hacer circular la palabra tiene el valor trascendental de poder interpretar la historia y ponerla en presente para que los que no la vivieron puedan aprender de la historia”. En ese marco, concluyó: “Creo es crucial en este tiempo que estamos viviendo los argentinos y las argentinas”.