A nivel global, el fútbol femenino creció a gran ritmo durante los últimos años, tal como se reflejó en el último informe anual de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA). En Argentina, la disciplina cuenta con 3 categorías: Primera División, Primera B y Primera C.
Incluso, en las últimas semanas se dio a conocer que el Consejo Federal de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) planea la creación de un Torneo Regional Federal Amateur, un hecho inédito para las futbolistas que habitan el suelo argentino.
Desde que se llevó a cabo la semiprofesionalización en 2019, el fútbol femenino creció a paso firme, incluida la pandemia entremedio. Sin embargo, en los últimos meses experimenta un estancamiento en dicho progreso, que se refleja en varios aspectos: inversión y gestión dirigencial, planificación de AFA, y descontento en las futbolistas.
Un estancamiento con claros responsables
Semanas atrás, en diálogo con Localía Femenina, fue Milagros Menéndez quien dejó en claro su postura. La delantera de Racing Club expresó: «Es muy difícil sostener un nivel con tantos parates. Cansa ir a entrenar y saber que jugamos dentro de un mes, mentalmente nos mata».
En este sentido, cabe destacar que la AFA planificó un calendario con muchísimos huecos y recesos entre las Fechas FIFA, la disputa del Mundial Femenino en Australia y Nueva Zelanda, los Juegos Panamericanos, la participación de Boca Juniors en la Copa Libertadores Femenina, y ahora también las elecciones nacionales.
Además, la disputa de partidos entre semana es compleja ya que pese a ser una disciplina que desde AFA llaman profesional, las protagonistas no pueden dedicarse 100% a esta actividad, sino que necesitan otro trabajo para sustentarse económicamente y cubrir todos sus gastos.
Por la misma vía, Menéndez agregó: «No esperamos ganar lo mismo que los futbolistas hombres, si estamos a años luz de Brasil en el fútbol femenino». Justamente, esta diferencia ante las brasileñas se refleja en la Copa Libertadores, donde Corinthians obtuvo su cuarto trofeo. Los clubes brasileños acumulan 12 títulos, mientras que los argentinos aún no lograron consagrarse.
En la reciente edición, el único representante de Argentina fue el Xeneize, que se marchó eliminado en fase de grupos tras caer 5-0 ante el Internacional de Brasil. Dicho encuentro marcó un claro dominio de las brasileñas en el campo de juego, que doblegaron a las Gladiadoras a través de un fuerte juego físico y técnico.
Fútbol femenino: una desidia evidente
Quien también tomó la palabra durante los últimos días fue Luciana Bacci, ex futbolista de Estudiantes de La Plata. En diálogo con Nota Al Pie, la rosarina aseguró: “Así como fue una decisión política la semiprofesionalización, también lo es la desidia que hay en muchos clubes. También la falta de compromiso de Agremiados y AFA en hacer que los clubes cumplan con las obligaciones que tienen”.
A su vez, vale la pena mencionar que en 2019 cuando se semiprofesionalizó la disciplina se establecieron 8 vínculos contractuales de forma obligatoria para cada institución participante en la máxima categoría. No obstante, Bacci recordó: “Vi clubes que dividían los 8 contratos entre todas las jugadoras. Se necesitan cambios estructurales”.
Por último, resonaron muy fuerte en el ambiente las declaraciones de Eliana Ceballos, ex futbolista de Lanús que expuso el destrato que sufrió en dicho equipo. “Si confrontás a una dirigencia y hablás públicamente sos carne de cañón porque no volvés a jugar. Te cortan las piernas o la carrera”, afirmó la santafesina.
Por lo pronto, los equipos se preparan para retomar la actividad, aunque luego se volverá a pausar por el balotaje presidencial. El calendario concluirá en febrero de 2024, con la disputa de la Copa Federal. A partir de allí, AFA deberá trazar una mejor planificación y tomar cartas en el asunto para revertir la situación.