Durante diciembre de cada año, vecines del Parque Nacional “El Impenetrable”, en Chaco, se reúnen para realizar la colecta de chauchas de algarroba (Prosopis alba), fruto con el que elaboran harina para su comercialización.
Se trata de un proyecto impulsado por el programa de Emprendedores por Naturaleza, de Rewilding Argentina y Molinos Cerrillos, el cual no sólo pone en valor la tradición y saberes locales, sino que también permite generar nuevos ingresos en las comunidades rurales.
Una práctica ancestral
El aprovechamiento de los distintos frutos que brinda el monte chaqueño es una costumbre ancestral. Desde la comunidad de productores afirman que la harina de algarroba es un producto arraigado a la cultura local y con un gran valor nutricional.
Esta práctica es realizada desde hace décadas y la colecta del fruto se realiza para producir distintos alimentos, incluyendo bebidas. Una de ellas es la aloja, cuyo trago refrescante era consumido en tiempos de abundancia y fertilidad, así como también un símbolo de unión.
En sus componentes, la algarroba posee un gran valor nutricional, brindando más hierro que la carne y más calcio que la leche. Si bien, con el paso del tiempo esta costumbre se ha ido perdiendo, algunas familias continúan recolectando chauchas para acopiar y darle de comer a los animales en épocas de sequía.
La recolección de chauchas de algarroba
Entre 2020 y 2021, veintitrés familias de la Asociación de vecinos de La Armonía realizaron dos pruebas de recolección en el área lindante al Parque Nacional “El Impenetrable”. En ese lapso de tiempo, lograron recoger 4.000 kilogramos que, tras ser secados, molidos y envasados, se comercializaron a turistas que se acercaron a la zona.
Desde entonces, el entusiasmo continuó creciendo y dos años más tarde se duplicaron las familias participantes, alcanzado un total de 40, al tiempo que se recolectaron 7.200 kilos. Además, la alianza con Molino Cerrillos, una empresa dedicada a la molienda, producción y comercialización de especias y aromáticas, permite dar escala a esta iniciativa de empleo local, exportando el producto hacia otras regiones de Argentina.
Tal es así que, a través del proyecto impulsado por el programa de Emprendedores por Naturaleza, de Rewilding Argentina y Molinos Cerrillos, esta cosecha encuentra un mercado, promoviendo el desarrollo de nuevas economías a partir de productos regionales que contribuyen a la conservación del monte en pie y al bienestar de las comunidades.
Sobre el Parque Nacional “El Impenetrable”
El Gran Chaco es una de las regiones boscosas más grandes y biodiversas de América del Sur, detrás de la Amazonía. Sin embargo, presenta grandes amenazas de deforestación. Fue en este contexto que en el año 2014 se creó el Parque Nacional “El Impenetrable”.
El mismo comprende 128 mil hectáreas que resguardan bosques de algarrobos, palo santos, quebrachos, pastizales, bañados, lagunas y también especies en peligro de extinción como el tatú carreta, el oso hormiguero gigante, el tapir, el aguará guazú y el yaguareté.