La Cámara de Diputades concluyó esta semana las reuniones informativas de Comisiones sobre el Proyecto de Ley de Promoción de la Alimentación Saludable, popularmente conocido como “de Etiquetado Frontal” o “Etiquetado Claro”.
El seudónimo de la norma, que en octubre de 2020 obtuvo la media sanción del Senado, se debe a que una de las medidas que propone es el uso de sellos octogonales negros con letras blancas que adviertan sobre el exceso de grasas saturadas, grasas totales, sodio, azúcares y calorías en los alimentos procesados y ultraprocesados.
En diálogo con Nota al Pie, la coordinadora del Equipo Etiquetado Frontal de la Federación Argentina de Graduados en Nutrición (FAGRAN), Mara Inés García (Matrícula Provincial N° 834), explicó que “es un proyecto de Ley integral, que contempla la promoción de la alimentación saludable” y que “es una política pública que apunta directamente a un objetivo sanitario”.
En este aspecto, comentó que si bien el eje más conocido es el del etiquetado frontal de advertencias, hay dos más que hacen a la importancia de esta Ley, como son “la promoción de entornos escolares saludables”, que regularía lo que se ofrece y vende en comedores y kioscos, y por otro lado “la protección, regulación de promoción, propaganda y patrocinio de alimentos”.
La representante de FAGRAN explicó que la regulación es importante no sólo para les niñes, sino también para adolescentes y adultes, ya que al ser quienes más padecen enfermedades crónicas no transmisibles, “no deberían quedar por fuera de nuestra población objetivo de un consumo consciente y responsable”. En este marco, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en Argentina 4 de cada 10 niñes y adolescentes y 7 de cada 10 adultes padecen sobrepeso u obesidad.
Además, esta última junto a la hipertensión y la hiperglucemia en ayunas elevada, son los tres factores de riesgo más asociados a la mortalidad, ya que generan 140 mil decesos al año.
En este sentido, la profesional manifestó que “desde hace un tiempo, los alimentos y las bebidas azucaradas se han convertido en los principales responsables de nuestras enfermedades y nuestras muertes a nivel poblacional”, y afirmó que los únicos alimentos que realmente son lo que muestran son los naturales, más allá de que muchas veces también estén influenciados por la industria.
La presión de los gigantes de la alimentación
Si bien la Ley que se busca aprobar apunta a mejorar la calidad nutricional de les consumidores, hay quienes se oponen a la regulación tal como se plantea en el Proyecto. García afirmó que “hay un lobby muy fuerte por parte de la industria”, sobre todo la relacionada con las bebidas azucaradas.
El argumento que se suele utilizar en contra del Proyecto de Ley de Promoción de la Alimentación Saludable es el temor a la pérdida de puestos de trabajo o de “posibilidades de comercialización a nivel internacional”. Sin embargo, la integrante de FAGRAN afirmó que esas “son situaciones completamente falsas”, y para fortalecer su punto mencionó el caso de Chile, que desde 2016 cuenta con un mecanismo de rotulado similar al que se quiere implementar en Argentina.
La entrevistada explicó que, al contrario de lo que plantean las industrias que se oponen al proyecto, “los resultados han sido beneficiosos porque ha habido importantes cambios en la selección de alimentos que hace la población, en el nivel de conciencia al momento de la compra”, lo que evita el consumo de un alimento que parece saludable pero que “enmascara la presencia de algún nutriente crítico que es potencialmente perjudicial para la salud”.
En este sentido, remarcó que “una cosa es que después el adulto o el adolescente, a conciencia, termine eligiendo un alimento con sello de advertencia. Lo que no va a hacer es un consumo no identificado o un consumo no consciente. A lo sumo, lo comprará y sabrá lo que está comprando”.
En relación al lobby que realizan las industrias, la coordinadora sostuvo que “vienen a generar como una situación de confusión, y la verdad es que no ayuda para nada”. En contraposición, explicó que “desde el punto de vista profesional trabajamos con evidencia científica, con OPS, todo material irrefutable”.
El próximo paso
La reunión informativa contó con la presencia de las comisiones de Legislación General; Industria; Acción Social y Salud Pública; y Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia, así como de varies expositores provenientes de la medicina, la industria y de organizaciones de la sociedad civil. El próximo paso es la votación en comisiones y, si obtiene dictamen favorable, se realizará la votación general en el recinto de la Cámara de Diputades.
Dado que la votación en comisiones aún no tiene fecha definida, el objetivo de las organizaciones que luchan por esta Ley es que no se siga posponiendo su tratamiento. “Estamos haciendo todo tipo de incidencia política para que esto quede como en primera plana”, expresó Mara Inés García y agregó que entre representantes de distintas provincias realizaron “un pronunciamiento que se va a presentar en Cámara de Diputados y en Ejecutivo”.
La profesional expresó que desde FAGRAN sostienen que la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable “debería garantizar los tres derechos: el derecho a estar informado, que es básico para no estar en un fraude alimentario o en una competencia engañosa de alimentos; el derecho a la alimentación saludable, que forma parte de nuestra constitución, y por encima de todo eso el derecho a la salud”.
Además, García reiteró que, según la experiencia de otros países, “una política alimentaria que sea realmente efectiva, tiene que contar con los tres ejes que tiene nuestra Ley”. Asimismo, explicó que en el caso de México también se incorporó una medida tributaria impositiva, y que aunque en Argentina no se está debatiendo eso “sería el broche de oro para una política que contempla todas las posibilidades de abordaje de la industria sobre lo que comemos”.