Como todos los años, la comunidad LGBTQIA+ global se une para celebrar el Mes del Orgullo. Se trata de un período festivo que conmemora los disturbios de Stonewall ocurridos el 28 de junio de 1969. Estos hechos marcaron un momento crucial en la historia de la liberación queer.
El Mes del Orgullo es un momento propicio para honrar, entre otros logros, los avances significativos que tuvo el cine para promover los derechos de la comunidad y visibilizarla. Uno de los más icónicos tuvo lugar en 2018 durante la 90º edición de los Premios de la Academia, donde se dio el triunfo histórico de la película chilena Una Mujer Fantástica.
El film, dirigido por Sebastián Lelio, es protagonizado por la cantante y actriz Daniela Vega. La misma interpreta a Marina Vidal, una mujer transgénero que atraviesa la repentina muerte de su pareja en la Santiago actual. De esta manera, la película retrata de una forma poderosa el trato social y legal marginado de las identidades trans en Chile, al mismo tiempo que captura el espíritu de lucha y perseverancia de su protagonista.
Retrato de la marginación de las identidades trans en Chile
Vega brilla en el papel de Marina, una aspirante a cantante que acaba de mudarse con su amante, Onetto (Eugenio Francisco Reyes). Después de una noche de celebraciones, éste sufre una emergencia médica y es llevado de urgencia al hospital, donde muere poco después de su llegada debido a un aneurisma.
A raíz de su inesperado fallecimiento, Marina queda en un estado de duelo conmocionado. A su vez, debe enfrentar preguntas de la policía y de la familia de Onetto, quienes no aceptan la naturaleza de la relación entre elles.
Una Mujer Fantástica se desarrolla a la manera de una odisea casi operística. Marina enfrenta su dolor sola e intenta rehacer su vida sin su difunto amante, todo mientras presiona para asistir a la ceremonia fúnebre de Onetto, a la que se le prohibió ir.
Inicialmente, Lelio contrató a Vega como consultora, pero mientras trabajaban juntes se dio cuenta de que era la estrella que buscaba y le ofreció el papel. Cabe destacar que Vega ya contaba con experiencia en actuación teatral y había participado en otro largometraje, lo que hace su papel protagónico aún más impresionante.
Vega aparece como Marina en casi todos los fotogramas de la película, la cual mantiene un hiper enfoque en los obstáculos cotidianos de su vida, complicados por su experiencia como mujer trans en una sociedad que devalúa su identidad. A medida que avanza, cambia de tono; del romance a la tragedia y al drama realista social con toques de surrealismo. Por esta razón, la actuación de Vega también requiere muchas metamorfosis, algo que logra a través de la expresión, ya que el guion contiene poco diálogo.
El recorrido de Una Mujer Fantástica en los circuitos de premiación
La película tuvo su estreno mundial en los primeros meses de 2017 en el Festival de Cine de Berlín, donde ganó el premio al Mejor Guión y se llevó a casa el Premio Teddy, el reconocimiento del festival para películas centradas en temas y perspectivas LGBTQIA+.
Días después del estreno, que recibió reseñas entusiastas tanto de la crítica como del público, Sony Pictures Classics adquirió los derechos de distribución.
Así, Una mujer fantástica volvió a aparecer en el circuito de festivales, incluyendo el Telluride, el TIFF y el BFI London, donde continuó generando comentarios positivos de boca en boca. A principios de 2018, se estableció como una firme candidata en la categoría de Mejor Película Internacional en prácticamente todas las principales ceremonias de premios cinematográficos, llegando a ser la segunda nominada de Chile en dicha categoría en los Premios de la Academia.
En la noche de los Oscar, la EGOT –término por el cual se llama a quienes durante su carrera hayan obtenido un premio Emmy, un Tony, un Grammy y un Oscar–, Rita Moreno, entregó el premio a la Mejor Película Internacional, brindando una alegre ovación al anunciar la histórica victoria de Una Mujer Fantástica.
En su discurso de aceptación, Lelio agradeció a Vega por ser la principal fuente de inspiración para la película. Más tarde en la noche, la protagonista volvió al escenario para presentar la interpretación de Sufjan Stevens de su nominada a Mejor Canción “Mystery of Love”, marcando otro momento en la historia, ya que esta fue la primera vez que una persona transgénero ofició de host en los Premios de la Academia en sus 90 años de historia.
La visibilidad transgénero en la cultura pop
La película va mucho más allá de su logro como la primera ganadora chilena del Premio Oscar; captura la experiencia de una mujer trans y la comunica a las audiencias, dando una poderosa impresión de la vida de Marina como mujer transgénero y las barreras que enfrenta en la sociedad. Después de estrenarse en su país de origen, se inició un diálogo sobre la identidad de género y los derechos de la comunidad LGBTQIA+.
La Ley de Identidad de Género de Chile entró en vigencia el 10 de diciembre de 2018, y protege el derecho de las personas a identificarse legalmente con su nombre y género deseado. Antes de esta normativa, este derecho sólo se otorgaba a les ciudadanes que habían pasado por procedimientos y cirugías de reasignación de género.
Aunque puede parecer un avance menos trascendental, la victoria de la película en los Oscar mostró un crecimiento muy necesario dentro del cuerpo de votantes de la Academia. Esto se da dos años después de que Eddie Redmayne –un actor masculino cisgénero– recibiera una nominación a Mejor Actor por interpretar a Lili Elbe, una pionera de la historia transgénero, en La chica danesa (Tom Hooper, 2016).
Si bien la visibilidad trans en la cultura pop tiene un largo camino por recorrer antes de alcanzar la paridad, estos avances son significativos para encauzarse en la dirección correcta. Los destacados logros de Lelio se extienden mucho más allá de la dirección hábil y la escritura matizada para mostrar el poder y la perspectiva estelar de Vega como una mujer moderna y tenaz, creando una película que es tan conmovedora como esclarecedora.
Una Mujer Fantástica, una de sus obras más espléndidas, es un excelente punto de entrada a su prolífica filmografía, la cual a menudo explora mujeres tan fascinantes como Marina. De este modo, a solo seis años de su presentación al mundo, contribuyó enormemente a las perspectivas queer en la historia del cine.