La escalada de violencia en México no cesa, por lo que continúan creándose distintos grupos de autodefensa en el país. Ante esta situación, el presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), rechazó enérgicamente la creación de los mismos, justificando que de eso debe encargarse el Estado y que “no se debe tomar justicia por mano propia”.
La aparición de grupos de autodefensa
A través de un vídeo, el pasado fin de semana el grupo de autodefensa “El Machete” anunció su aparición en Chiapas. Su objetivo principal es “expulsar a sicarios, narcotraficantes y al crimen organizado” para frenar con las muertes de los campesinos indígenas.
En la década pasada, durante los primeros años de movilizaciones, los grupos de autodefensa nuclearon hasta 15.000 hombres armados que operaron en más de 30 municipios del estado de Michoacán. Esta experiencia desarticuló a los Templarios, que se encargaban del tráfico de cocaína en la ruta ubicada en el centro-oeste del país.
La Agence France-Presse (AFP) entrevistó a un grupo de defensa ubicado en una carretera de Michoacán. Resulta que muchos de ellos son cultivadores de aguacate levantados contra el asedio narcotraficante. Aparecen así encapuchados, con fusiles, rifles y se organizan en camionetas o caminando por la calle.
“Antes se robaban los carros de aguacate y ahora que se pusieron las barricadas no se nos pierde nada (…). Había extorsiones, secuestros”, comenta a AFP un integrante del grupo Pueblos Unidos que tiene 700 efectivos.
El lema de la organización habla por sí solo: “Pueblos Unidos, abajo la injusticia, no más muertos”. Además, señaló: “Necesitamos estar armados para defendernos (…). Antes, desarmados, venían a hacer lo que querían con nosotros y ya no pasa eso”.
La visión de Manuel López Obrador
Sin embargo, el primero en contradecir a estos grupos armados fue el presidente mexicano, López Obrador, quien durante este jueves aseguró en conferencia de prensa que en todo el territorio mexicano existe presencia de la Guardia Nacional.
En ese marco, desde el Palacio Nacional, el mandatario manifestó que el Estado tiene la obligación de garantizar la seguridad pública: “Nosotros no estamos de acuerdo con eso (las organizaciones de autodefensa), porque el Estado tiene la responsabilidad garantizar la paz y la seguridad, nadie puede hacer justicia por propia mano, eso es ilegal y eso no debe de aceptarse”.
A su vez, AMLO insistió en que habría que analizarlo pero que en ningún caso acepta que los grupos de autodefensa se armen. Además, declaró: “Es nuestra responsabilidad y lo estamos haciendo, y que no usen como excusa a la inseguridad”.
También enfatizó en la cuestión de la obtención de las armas: “Hay que ver de dónde obtienen las armas, de dónde sacaron esas armas… ‘nos autodeclaramos autodefensas y a cometer ilícitos, y luego invitamos a los medios y hacemos una presentación’”.
Si bien para AMLO no hay ninguna región donde impere y domine la delincuencia, lo cierto es que los números son alarmantes. En mayo se registraron 2.963 homicidios dolosos, y desde enero se ha registrado un total de 14.234, según el gobierno.
Pese a todos los números, el Presidente se niega a declararle la guerra a los carteles porque admitiría que la política adoptada fracasó. “No se puede enfrentar la violencia con violencia”, afirmó el viernes sobre la situación de Aguililla, otro municipio de Michoacán sitiado por la delincuencia.