Esta semana, la jueza Fabiana Palmaghini resolvió llevar a juicio oral y público la causa del incendio del depósito de Iron Mountain, ocurrido en 2014. El 5 de febrero de ese año, el fuego se propagó en las instalaciones de la empresa ubicadas en el barrio porteño de Barracas y desencadenó en el deceso de 10 personas. Entre elles había 8 bomberos y 2 integrantes de la Defensa Civil del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
El litigio tiene 18 imputades. Aunque no hay pruebas de por medio, se sospecha que tienen distintos grados de responsabilidades en el hecho.
¿Qué pasó con el depósito de Iron Mountain?
El 5 de febrero de 2014 por la mañana, el almacenamiento de Iron Mountain ubicado en Azara 1245, en Barracas, se consumió rápidamente por las llamas. El incendio fue voraz y produjo que las columnas y el techo se vinieran abajo rápidamente.
El suceso dejó un saldo de 10 víctimas, quienes habían expuesto su vida para calmar la propagación del fuego. Les fallecides fueron el comisario inspector Leonardo Day, la subinspectora Anahí Garnica, los cabos Carlos Veliz, Eduardo Adrián Conesa y Maximiliano Martínez, el agente Juan Matías Monticelli (del Cuartel I de Bomberos de la Policía Federal), los bomberos voluntarios Sebastián Ezequiel Campos y Facundo Ricardo Ambrosi (cuartel Vuelta de Rocha) y los rescatistas de Defensa Civil Pedro Esteban Barícola y José Méndez Araujo.
¿Por qué se lleva adelante la causa?
En una resolución que cuenta con 174 páginas, la jueza Fabiana Palmaghini resolvió que “la causa ha requerido la elevación a juicio de estas actuaciones, no existiendo fundamento alguno para precluir el proceso a instancias anteriores, debiendo continuarse hacia la siguiente instancia”.
Su argumento se basa en que la muerte de las 10 víctimas fue consecuencia directa del derrumbe de la infraestructura. “Los informes médicos del caso han permitido establecer que los decesos de las víctimas fatales fueron consecuencia de politraumatismos, hemorragias internas y externas ocasionadas por los golpes o choques recibidos con o contra superficies contundentes o por aplastamientos”, explicó la jueza.
Además, detalló que “el antecedente fáctico a las lesiones que sus cuerpos registraban tiene su génesis en el foco ígneo”.
Aunque no se confirmó si el incendio fue intencional o un accidente, les 18 imputades están acusades de incendio culposo seguido de muerte y lesiones culposas.
Entre les señalades se encuentra Oscar Godoy, el empleado de seguridad que estaba en turno cuando inició el siniestro, y los directivos de la empresa Iron Mountain, Guillermo Lockhart, Héctor Eduardo García y Alfredo Sueyras Parra.
También se encuentran procesades integrantes del departamento de la Dirección General de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, encargades de verificar las condiciones de funcionamiento, seguridad e higiene del depósito. Entre elles se encuentra Vanesa Ileana Berkowski, quien fue absuelta en un caso previo similar.
Según consignó la agencia de noticias Télam, el resto de les imputades son Christian Walter Castiñeiras, Feliz Raimundo Lugo, Jorge Néstor Papanicolau, Ricardo Edmundo Grunfeld, Alberto Daniel Graziani, Luis Alberto Cogo, Roberto José Chiesa, Silvia Míriam Hers, Gastón Luis Laugle, Patricia Esther Moroni, Rafael Mario Roldan, Pierre Chapar, y Norberto Ventura Sosa.
El proceso de la justicia ha sido lento, ya que 9 años y dos meses después, les familiares de las víctimas deben revivir el dolor de las personas ausentes. Queda la esperanza de que la causa obtenga respuestas y defina quiénes fueron les responsables por la pérdida de sus seres querides.