Cada 24 de marzo, en el aniversario del golpe de Estado que dio inicio al gobierno de la Junta Militar, se conmemora y se sigue exigiendo justicia por las más de 30.000 víctimas del genocidio ejecutado por la última dictadura cívico-militar de la Argentina.
Sin embargo, la dictadura no se limitó a ejercer un violento disciplinamiento social, sino que también logró introducir profundos cambios en la estructura económica. A partir de las políticas del ministro de Economía, José Alfredo Martínez de Hoz, se sentaron las bases para un modelo de apertura financiera y comercial irrestricta, desmantelamiento del aparato estatal y desincentivo de la industria nacional.
En una primera etapa, desde 1976 hasta 1978, los militares ejecutaron un plan de ajuste ortodoxo que se basó principalmente en devaluación, liberación de precios y congelamiento de salarios. En 1977 se reformó el sistema financiero y se consolidó hasta la actualidad el dominio de las finanzas especulativas por sobre la producción.
La segunda etapa, a partir de diciembre de 1978, consistió principalmente en la implementación de la tablita cambiaria, que implicaba una devaluación programada y gradual. Como consecuencia de la política del gobierno ilegítimo, comenzaron a cerrarse industrias nacionales. Para resolver la salida de divisas, se contrajo una enorme deuda externa.
A través de estas medidas, los militares consolidaron la hegemonía de los grandes grupos empresarios y las élites agropecuarias, mientras las mayorías populares eran excluidas y sometidas al ajuste.
Nota al Pie entrevistó al economista y docente Fabián Medina, quien explicó las medidas económicas llevadas a cabo por la Junta Militar, sus consecuencias y la vigencia del modelo liberal hasta la actualidad.
¿En qué se basó la política económica de la dictadura?
La política económica de la dictadura se basó en un endeudamiento a nivel externo en dólares. Había un nivel de 6 mil millones de deuda cuando asumieron el 24 de marzo de 1976. Era muy bajo, según ellos, y endeudaron pasando a 56 mil millones en octubre de 1983.
Se desindustrializaron y cerraron todas las fábricas para pasar todo al sistema financiero con tablas de plazo fijo y tipo de cambio. Al revés de lo que hizo Brasil, que usó la deuda para favorecer la instalación de industrias.
¿A qué sectores de la economía favorecieron estas medidas?
Favoreció sobre todo al sector terciario: comercio y finanzas. Únicamente quedó fuerte el sector del campo, porque la mayoría de ellos (les funcionaries) tenían campos y utilizaban los medios del gobierno para para auto favorecerse. La Junta Nacional de Carne y la Junta Nacional de Granos las utilizaron en favor propio.
¿De qué forma los gobiernos luego de la recuperación democrática cambiaron o mantuvieron el esquema económico?
Hubo distintos tipos de gobierno. La etapa inicial de Alfonsín trató de generar una estabilidad a nivel económico que pudo mantener por cuatro años y medio. Luego, llegó la hecatombe final de la altísima inflación en 1988, y la hiperinflación en el ‘89.
En el periodo menemista-delarruísta se mantuvo el esquema con el sistema ultra capitalista o de capitalismo salvaje, que mantenía todas las finanzas y no le importaba el sector productivo. Por eso se perdieron casi 16.000 kilómetros de vías férreas, las industrias dejaron de estar para pasar a los bancos, llegaron muchos supermercados y se privatizó el esquema de empresas nacionales a favor de un tercero exterior.
Entre 2002 y 2015, ya con Duhalde, con el gobierno de Néstor Kirchner y los dos gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner se trató primero de mantener la estabilidad y luego volver a tratar de industrializar y generar trabajo genuino. Siempre se mantuvo el esquema del campo fuerte y el sector terciario de las finanzas y comercio.
Entre 2016 y 2019 otra vez hubo un debacle con un esquema económico neoliberal, el cual favorecía que se cierren las empresas para pasar a otorgar ya no servicios, finanzas, comercios, sino inclusive asistencialismo por parte del Estado.
En la última etapa de 2019 a la fecha, de aquellos 15.000 kilómetros menos de vía se recuperaron casi tres mil kilómetros y se restablecieron trenes tanto de carga como de pasajeros. Ahora hay un modelo en el cual la actividad económica está activa, pero seguimos con la altísima inflación como en aquel 1988.
¿Puede afirmarse que la estructura económica establecida durante la dictadura se mantiene hasta la actualidad?
La estructura económica establecida por la dictadura en su período todavía está vigente hoy. Cuesta muchísimo darla vuelta, porque hay muchos que creen que un esquema de gobierno neoliberal es necesario. Sin embargo, eso sirve únicamente para países desarrollados. Nosotros no somos siquiera subdesarrollados, estamos en un mercado de frontera, entonces nosotros tenemos que regular pero con mucha inteligencia.