Desde este pasado lunes 13 de marzo ya se pueden ver algunos episodios de la serie “El quinto día” (“Der Schwarm” o “The Swarm”). Creada y producida por Frank Doelger de (‘”Juego de tronos”), y basada en la exitosa novela homónima del escritor alemán Frank Schätzing. La primera temporada cuenta con ocho capítulos en exclusivo por Movistar Plus+. La producción es una cooperativa de siete países tanto de Europa como Japón. Intriga y suspenso, con algunas pinceladas de drama, donde toda persona en el mundo corre peligro de muerte. Más encierra un fuerte intento de concientizar al televidente sobre la explotación marina y las consecuencias sobre los ecosistemas marinos.
Un thriller ecológico, donde en su inicio los espectadores son sorprendidos por diferentes episodios extraños en el mar. Un pescador sale con su pequeño bote a navegar y desaparece al tratar de rescatar su red que se le había atorado en la profundidad del mar, rodeado por un banco de peces.
Desde esta premisa, la trama prometía mostrar algunas de las peores pesadillas para los humanos, y una soñadora venganza para más de un ecologista militante. La historia en sí, se centra en un conjunto de personajes principales, la mayoría de ellos científicos marinos de diversos campos, y todos ellos son llamados a la acción cuando empiezan a ocurrir cosas extrañas en los océanos del mundo.
En Canadá una ballena orca aparece muerta en la playa, luego de atacar en un ataque de ira a una evacuación pesquera. Algo que comienza a estudiar un investigador oceánico Leon Anawak (Joshua Odjick), quien tratará de dar una razón al cambio de humor de las ballenas que vuelven a atacar en grupo a un barco de turistas. Además que los cangrejos de aguas profundas atacan playas de la zona.
También esta Cécile Roche (Cécile de France), una bióloga molecular que se enfrenta a la contaminación del agua potable por parte de unas bacterias tan toxicas como mortales. Y un profesor de biología marina, Sigur Johanson (Alexander Karim), que detecta que un gusano en los hielos puede embravecer a los mares a tal altura, que se comienzan a producir tsunamis. Llevando consigo las plataformas continentales y la mayor parte de las líneas costeras del mundo. Pero eso es solo el principio, y cuando las sondas submarinas empiezan a desaparecer, resulta obvio que algo está pasando y que la humanidad tiene un nuevo enemigo.
La rebelión de los mares
La historia presenta a un grupo de científicos que frente a sucesos misteriosos, unen sus teorías para encontrarle un origen. Donde todo apunta que una nueva fuerza de vida, que vive en lo profundo de océano tiene el poder de dominar a todo ser marino. Y esta inteligencia enjambré tiene como finalidad destruir a todo ser humano. Algo que se da a entender desde el primer capítulo, el cual arranca lleno de misterio, poca dinámica, pero con un final que pones los pelos de punta. Y brinda en cada episodio, cierto espacio para la reflexión sobre el impacto de lo que hace el humano al mundo que lo rodea.
El principal problema de la serie es que se toma mucho tiempo para que ocurra algo. Se queda corta en acción y al igual que la novela que le da origen. Presenta demasiados tiempos muertos donde se marea al espectador con explicaciones científicas de lo que pasa. Y también los efectos especiales son bastantes básicos para una producción tan grande.
Una gran producción
Un clan total de siete productoras: ZDF (Alemania), France Télévisions (Francia), Rai Fiction (Italia), Viaplay Group (Suecia), Hulu Japan (Japón), ORF (Austria), y SRF (Suiza). Bajo una producción general de Schwarm TV Production, que la plataforma de streaming la vende como: “La producción televisiva alemana más cara de todos los tiempos”.
Siete países distintos, para crear una serie que parte de una premisa interesante, un atrapante thriller ecológico y apocalíptico, pero que se va desinflando en su desarrollo.
El libro en que está basado el guion es entretenido, y hasta supera a muchas películas de catástrofes de Hollywood en ciertos partes. Así que se esperaba con ansias su adaptación en serie. Sobre todo para esos lectores que desean a veces que la naturaleza cobre venganza.