Becaries del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) reclaman por los derechos laborales que la actual gestión había prometido y que se mantienen aún como “promesas de campaña”.
A través de un comunicado, ATE Conicet le reclama a Ana Franchi, presidenta del organismo, cumplir con el compromiso que tomó al asumir en diciembre de 2019. El mismo consiste en reconocer a les becaries como trabajadores y avanzar hacia un Convenio Colectivo de Trabajo.
En el CONICET hay cerca de 30 mil trabajadores de los cuales el 40% son beneficiades. Pese a trabajar junto a investigadores de carrera y cumplir con una jornada laboral de 40 horas semanales, no perciben un recibo de sueldo, aportes previsionales ni aguinaldo.
Es por ello que en este marco de reclamos, Nota al Pie dialogó con Mariano Del Pópolo, becario doctoral del CONICET y Secretario de Organización y Prensa de ATE CONICET Capital Federal.
“Hoy no tenemos derechos laborales fundamentales, no tenemos aguinaldos ni aportes jubilatorios”, indicó. Y señaló la gravedad de ello: “Una persona puede estar entre 5 y 10 años siendo becaria”. Por lo tanto, durante ese período de tiempo no gozarían de aportes ni antigüedad.
Sobre esto, Del Pópolo explicó que una persona puede tener una beca doctoral primero y otra posdoctoral después, para finalmente ingresar sin esos años de aportes a la Carrera de Investigación Científica.
Cambió de gestión, misma realidad
Con el cambio de gobierno en 2019, les becades del CONICET esperaban mejoras respecto a su situación laboral. Sin embargo, en la actualidad esto no se pudo lograr.
En este sentido, el delegado de ATE Conicet señaló que si bien la situación de les trabajadores es “mejor que en la etapa de Mauricio Macri”, están lejos de lo anhelado.
“Hubo una recuperación salarial notable, aunque nuestros salarios siguen siendo bajos y sigue siendo difícil llegar a fin de mes”, apuntó.
Respecto a la actitud de la actual gestión, destacó: “El Ministerio de Ciencia y Tecnología y las autoridades del Conicet fueron parte de la lucha contra el macrismo que quería desarticular el sistema científico argentino”. Pese a ello, sostuvo que “durante el 2020 hubo un compromiso de mejorar las condiciones”, pero esto “no sucedió”.
En referencia a los motivos del incumplimiento, el entrevistado señaló: “No sabemos porqué las autoridades del Conicet y el Ministerio no han avanzado con el Convenio Colectivo de Trabajo”. Y agregó que en reiteradas oportunidades “Hemos pedido varias reuniones que nos han negado”.
La propuesta ante el CONICET
Les trabajadores beneficiades del CONICET buscan mejorar su condición laboral. Y ante ello, Mariano del Pópolo planteó su propuesta desde su lugar en ATE CONICET.
“Primero se debe avanzar en el Convenio Colectivo de Trabajo, al cual lo entendemos como un proceso de discusión profundo sobre la organización del sector y que lleva tiempo”, señaló. Pero aclaró que “los derechos laborales que no tienen los becarios es algo a resolver urgente”.
En este sentido, ofrecen una propuesta “de resolución inmediata”: “Hay un claro ejemplo: el de los residentes de medicina. Ellos tienen una forma de contratación exactamente igual a la de los becarios del CONICET”, comentó el delegado.
Y detalló: “En 2015, a nivel nacional, se reconoció que los residentes de medicina tengan aportes previsionales y aguinaldo a través de una resolución del Ministerio de Salud de la Nación”.
Como conclusión, sugirió que se actúe de igual modo con les becaries: “Es cuestión de voluntad política, que se firme una resolución y se firme una partida presupuestaria correspondiente para que los becarios tengamos aportes previsionales y aguinaldo a la par que se va discutiendo un CCT”.
Respecto a la propuesta, buscan visibilizarla y llevarla ante las autoridades, aunque todavía no les concedieron una reunión. Para cerrar, del Pópolo expresó: “Hoy el gobierno está haciendo una gran inversión en infraestructura en materia de ciencia y tecnología”.
Pero consideró que solo con eso “no se desarrolla Ciencia y Tecnología”. Y que, en definitiva, “si no se cuida a los trabajadores, no hay soberanía científica ni tecnológica”.