Las escuelas de todo el país analizan los pasos a seguir respecto al calor que azota al país. A la espera de una lluvia aliviadora, que tarda en llegar, algunos colegios debieron suspender las clases por no contar con los recursos para enfrentar las altas temperaturas.
Desde la semana pasada, los sindicatos docentes y los centros de estudiantes presionan al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para suspenda las clases o al menos contemple una reducción de la jornada. Ante esta situación, el gremio porteño de docentes Ademys, lanzó un paro que se mantiene hasta hoy.
La medida de fuerza será acompañada por una asamblea de trabajadores y trabajadoras en la escuela Julio Cortázar, situada en la calle Bogotá 2759, desde las 17.30, según informaron desde el sindicato.
A través de un comunicado, aseguraron: “Las condiciones de las escuelas de CABA, ante la falta de presupuesto educativo, son deplorables y no permiten garantizar el aprendizaje”. En esta línea, sostuvieron que en los establecimientos hay “falta de luz, de agua, ventiladores sin funcionar o insuficientes en aulas de más de 30 estudiantes. La semana pasada tuvimos que asistir a decenas de estudiantes y trabajadores. ¡El Estado es responsable!”.
Por otra parte, en referencia a la medida tomada, explicaron que el paro se da “ante la ola de calor, el recorte de infraestructura y la pérdida de salario”.
Los gremios y alumnes versus la ministra de Educación
Jorge Adaro, secretario de Ademys, dialogó con Radio Buenos Aires esta mañana y apuntó contra la Ministra de Educación de la ciudad, Soledad Acuña. «Ojalá (Acuña) nos dijera un planteo de manera directa, porque eso sería tener diálogo, hoy no hay ningún tipo de diálogo. Todo es a través de las redes sociales”, afirmó.
«Habrá que pensar que así serán los veranos. Hoy hay un sindicato llamando a una medida de fuerza para no estar en las aulas por las temperaturas, estudiantes y familias que están de acuerdo. Y la respuesta del gobierno es enviar botellitas de agua” explicó.
Quienes también apuntaron al gobierno fueron les alumnes de los distintos Centros de Estudiantes. Federico Lavagnino, estudiante de 5to año y presidente del Centro del colegio Juan Pedro Esnaola, expresó: “No nos vamos a quedar de brazos cruzados, vamos a retomar la lucha de años anteriores por mejorar la infraestructura, la alimentación y las condiciones de trabajo y estudio de estudiantes y docentes”.” Es una vergüenza el desinterés del gobierno, cualquiera que habita las escuelas lo sabe, en estas condiciones no se puede cursar”, señaló.
“Es necesario y urgente un cambio en la política educativa de CABA y lo primero es aumentar el presupuesto educativo, que viene disminuyendo desde hace 15 años. El problema no es el calor, el problema es que las escuelas no están equipadas mínimamente para afrontarlo”, agregó.
Por su parte, Soledad Acuña, a través de su cuenta de Twitter, comparó la situación de les estudiantes que pasan largas horas en edificios en estado deplorables, con otras actividades que no suspendieron tareas.
“La ola de calor que atravesamos en gran parte del país es totalmente extraordinaria y atípica. Aun así, ningún ámbito laboral ni sector suspendió sus actividades en este contexto. El Estado debe garantizar la educación de los chicos todos los días”, escribió.
Santa Fe, Mar del Plata y Rosario
El calor no solo “atiende” a Buenos Aires, sino que en distintos puntos del país la ola de fuertes temperaturas es igual o peor. El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, planteó que cada escuela tenga autonomía y decida si da clases o no.
“Lo que cada escuela tiene es la capacidad de saber evaluar cómo va a ser el desempeño en las condiciones en la que está. Tenemos directores con la capacidad de decidir si se puede dar clases o no”, señaló.
Por su parte, Osvaldo Biaggiotti, delegado regional del Ministerio de Educación de Santa Fe, apoyó los dichos del gobernador y aseguró: “voy a ratificar lo que dijo el gobernador: cada escuela tiene un margen de autonomía para decidir. Tiene que ver con el calor, la infraestructura”.
En tanto, en Mar del Plata varias escuelas dejaron de dictar clases a partir de la decisión tomada por sus propios directivos. Por ejemplo, la Escuela Primaria “31” anunció en sus redes sociales la suspensión debido a la ola de calor.
El director de la escuela, Antonio Nicolau, dijo: “Suspendimos todo el día. Habíamos transitado 10 días con descomposturas, mareos, desmayos, vómitos y falta de apetito decidimos suspender las actividades por este lunes».
Más de 35 escuelas primarias y secundarias de toda Mar del Plata suspendieron las clases en ambos turnos, según informó 0223, dado que no están dadas las condiciones y hay riesgos para les alumnes y docentes.