Gian Franco Fleitas Cardozo era un joven de 25 años y padre de un nene de ocho. La madrugada del sábado 29 de mayo, efectives de la Policía Municipal de Tigre y de la Policía Bonaerense, lo detuvieron a media cuadra de la casa de su novia, en Don Torcuato. Horas después, entregaron su cuerpo sin vida.
Este viernes, el Colectivo contra el Gatillo Fácil expresó a través de un comunicado que el pedido de justicia continúa. “Un video que se viralizó en las redes muestra como fue brutalmente golpeado por más de 10 efectivos policiales mientras yacía esposado en el piso”, recordaron sus integrantes. En él, Franco grita: “¿por qué me pegan, porque no tengo barbijo?”.
La policía llegó al lugar tras una denuncia de su pareja por motivos de violencia de género. La versión oficial es que el joven falleció por un consumo excesivo de estupefacientes. Sin embargo, desde la agrupación mencionada anteriormente, hicieron hincapié en que luego de la golpiza, “lo subieron a un patrullero. Minutos después de la detención de Cardozo, llegó una ambulancia a la Comisaría Nº 3 de Don Torcuato que trasladó el cuerpo sin vida del joven”.
El Centro de Operaciones Tigre (COT), del cual forma parte la policía municipal, se plantea como el eje del “Sistema de Protección Ciudadana”. En contraposición, desde la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI), remarcan que “es la presencia policial en las calles y barrios la que nos pone en peligro”.
La causa y una represión que se repite
En la misma línea que CORREPI, desde el Colectivo contra el Gatillo Fácil mencionaron que “a Franco, como a tantos, se lo llevaron vivo y horas más tarde lo entregaron sin vida”. Además, denunciaron que, aunque el asesinato del joven fue realizado en manada, la causa tiene un único detenido.
“Se trata de un agente del COT de apellido Cevasco quien no se encontraba en el momento de la detención sino dentro de la dependencia policial”, relataron. En este sentido, remarcaron que la detención desmiente la versión de la policía, según la cual el joven nunca estuvo en la comisaría de Don Torcuato.
En la causa interviene la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) de Don Torcuato, a cargo de la fiscal Virginia Toso. La mujer “realizó la imputación por vejaciones, severidades o apremios ilegales, con penas privativas de la libertad por reclusión o prisión de dos (2) a seis (6) años y la consecuente posibilidad de una pronta excarcelación para los culpables”, informaron desde el Colectivo.
Por este motivo, la familia exige que se cambie la carátula a “tortura seguida de muerte”, con la pena de prisión perpetua. Además del ya mencionado detenido, en la causa hay 10 imputades. El Colectivo comentó que se trata de les policías bonaerenses Joana Anabela López; Judith Arevalo; María Laura Lugo; Pedro David Liporace; Ailén Karen Olveira Colque; Jonatan Nicolás Lencina; y Pamela Soledad Ruiz. También están involucrades les inspectores municipales Guillermo Roberto Otero; Daniel Alberto Vallejos; y José Nicolás Armoa.
El mismo sábado en el que la policía detuvo y golpeó a Franco Cardozo, sus familiares y amigues movilizaron a la fiscalía en pedido de justicia. La respuesta que recibieron fue la represión por parte del personal policial. Además, detuvieron a siete de elles, que fueron liberades dos días después.
En el proceso de pedido de justicia, les allegades al joven no sólo se movilizan, sino que también lo recuerdan a través del arte. En este sentido, han pintado un mural en la esquina de Camacua y Obarrio, en Don Torcuato.