La Comisión Europea (CE), órgano ejecutivo de la Unión Europea (UE), presentó el pasado 1 de febrero los esbozos del Plan Industrial Green Deal. Mediante el mismo, Europa pretende desarrollar su Industria Verde no solo por la Transición Energética sino también para no perder competitividad frente a China y Estados Unidos. La Presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, adelantó al presentar la nueva estrategia industrial que “Europa está decidida a liderar la revolución de las tecnologías limpias”.
El Plan representa, según la UE, una hoja de ruta para poder “cumplir los ambiciosos objetivos climáticos de Europa”. El Pacto Verde Europeo, presentado en el 2019, estableció la meta de que el continente sea el primero climáticamente neutro para el año 2050. Para ello, los países de la UE se han comprometido jurídicamente a reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero de la región en al menos un 55% para el año 2030.
En ese marco, desde la UE sostuvieron que el desarrollo de la Industria Net Zero, que busca reducir lo más cercanas a cero las emisiones, representa no sólo una condición necesaria para tales objetivos sino también una importante oportunidad. El debate, sin embargo, también involucra los costos sociales de una Transición Energética diseñada desde Bruselas y los peligros para la golpeada periferia europea.
Los pilares del plan industrial verde europeo
El punto de partida, señaló la UE, es la necesidad de aumentar masivamente el desarrollo de la Industria Net Zero y, a su vez, garantizar el suministro de energía para la próxima década. Según el diagnóstico europeo, ambas cosas van de la mano. Potenciar este sector, según el organismo, resulta clave para el reemplazo de los combustibles fósiles, genera competitividad y permite reducir la dependencia estratégica que tiene Europa con la energía. En base a esto, el Plan Industrial Green Deal consta de cuatro pilares.
En primer lugar, la UE propone un “entorno normativo previsible y simplificado”. Por un lado, la presentación de una Ley de Industria Net Zero que genere el marco regulatorio para promover la fabricación industrial de productos fundamentales para alcanzar la neutralidad climática. Por otro lado, una Ley de Materia Primas Críticas para garantizar el acceso a las materias primas relevantes, diversificando el abastecimiento y su reciclaje. En tanto que, en marzo, el organismo presentará una reforma del diseño mercado eléctrico para potenciar el uso de energías renovables.
El segundo pilar pretende acelerar la inversión y la financiación para la producción de tecnologías limpias en Europa. “La financiación pública, junto con un mayor progreso en la UE de los Mercados de Capitales, puede desbloquear las enormes cantidades de financiación privada necesarias para la transición verde”, sostuvo el organismo en el documento.
En tanto que, a su vez, el Plan se centra en desarrollar las habilidades necesarias para los trabajos en este sector y recomienda la creación de Academias de Industria Net Zero. Según la UE, “entre el 35% y el 40% de todos los puestos de trabajo podrían verse afectados por la transición verde”.
Finalmente, el cuarto pilar se relaciona con promover la cooperación global y poner al comercio en pos de la Transición Energética pero respetando la competencia leal, el comercio abierto, los compromisos de la UE y los principios de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La carrera por la Industria Net Zero
En su último informe, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) destacó que, si se cumplen los acuerdos mundiales en torno al cambio climático, el mercado mundial de la Industria Net Zero tendrá un valor de 600 mil millones de euros para el 2030. La organización, asimismo, calculó que en los próximos siete años se crearán 8 millones de nuevos puestos laborales relacionados a las energías renovables.
En este sentido, el Plan de Industrializacion Green Deal de la UE apuntó que “aquellos que inviertan primero y más rápido aseguraran su lugar en esta nueva economía”. Del mismo modo, los europeos explicaron que “la UE también puede ser un líder en la Industria Net Zero del futuro” y que también tiene la capacidad para “crear nuevas formas de cooperación en tecnología limpia con nuestros socios en el extranjero”.
En la actualidad, China domina la fabricación y la inversión en tecnologías limpias. Establecida como una prioridad de su Plan Quinquenal, el gigante asiatico ha invertido aproximadamente un total de 260 mil millones de euros en la Industria Net Zero. La administración de Joe Biden, en respuesta estratégica a la inversión china, aprobó por su parte la Ley de Reducción de la Inflación de los EEUU, que prevé la inversión de 330 mil millones de euros en el sector para el 2032.
Bajo este panorama y con críticas a los subsidios estatales anunciados por sus competidores, Europa busca abrirse paso en el desarrollo de una industria estratégica clave para el futuro. “La CE pide a los líderes, gobiernos, legisladores e interlocutores sociales que apoyen la implementación de este plan para traducirlo en propuestas concretas”, apuntó el organismo en el final del borrador.