
Lionel Messi habló de todo y no se guardó nada en un mano a mano con el programa Simplemente Fútbol, ahora transmitido por Youtube y conducido por el histórico Quique Wolff, junto a su hijo Pedro.
Desde Miami, el «10» argentino habló de su presente en Estados Unidos, sus ganas de estar en el Mundial del año próximo en Norteamérica y de sus hijos, entre otros temas. Además, aclaró sus diferencias con México.
El Mundial 2026, un objetivo más que posible
Dentro de la gran variedad de tópicos que se abordaron en la entrevista entre Lionel Messi y los Wolff, el Mundial del año próximo a jugarse en Estados Unidos, México y Canadá era algo sobre lo cual iba a charlarse.
“Está lejos, pero pasa rapidísimo. Este año va a ser importante. Poder jugar con continuidad, sentirme bien. El año pasado arranqué la pretemporada y tuve algunas lesiones”, empezó diciendo Messi. Por ende, remarcó que tener buen ritmo este año será clave para ver cómo se siente de cara a la cita mundialista.
“Este año hice una buena pretemporada, arranqué bien y me siento bien. Pero es una temporada larga porque no termina hasta diciembre y está el Mundial de Clubes. Pienso y veo, pero no me quiero poner metas. Voy día a día y veo cómo me siento físicamente y ser sincero conmigo mismo”, agregó el rosarino.
Vale recordar que el capitán de la Selección Argentina ya tiene 37 años, llegará a la próxima Copa del Mundo con 38 y cumplirá 39 mientras transcurra el campeonato mundial. Sería su sexto Mundial, record histórico de la competencia, en la cual es el futbolista con más partidos disputados desde su inauguración en 1930.
¿Hay rivalidad con México? Messi responde
Otro punto que llamó la atención de más de uno durante la entrevista fue cuando habló sobre distintos puntos específicos del Mundial de Qatar 2022 y la charla derivó en la pica que hay en el último tiempo entre la Selección campeona del mundo y su par mexicano.
Messi fue consultado por el gol clave que le hizo a México y que terminó desbloqueando a la Selección, quienes llegaban a ese partido sabiendo que de perder quedarían eliminados en fase de grupos, algo que no ocurría desde 2002.
A partir de ese partido, la Scaloneta no frenó su marcha ganadora, sacando en el camino a Polonia, Australia, Países Bajos y Croacia, y la cual terminaría con la coronación el 18 de diciembre de aquel año en el Lusail Stadium ante Francia por penales.
“No sé qué pasó con los mexicanos, de cuando arrancó esa bronca porque yo siempre me sentí muy querido por la gente de México, nunca les falté el respeto, pero ellos se pusieron en una posición de entender una rivalidad con nosotros que no existe. No existe una comparación entre Argentina y México”, dijo contundente el capitán argentino.
“Ese partido fue jodido, sobre todo de la cabeza. Perdiendo ya estábamos afuera. La previa fue terrible. Era pasar rápido el momento. Que fue una desgracia nada más y que no había que cambiar nada. No podíamos volvernos loco por un partido. Había mucha tensión y nerviosismo contra México”, amplió el capitán.
Sin embargo, terminó reconociendo la importancia que tenía dicho encuentro para todo el grupo y para todo el país, que los miraba expectantes y no podían creer la situación que estaban viviendo. Argentina perdió en su debut mundialista frente a Arabia Saudita y de obtener un mal resultado contra México, quedarían afuera de Qatar 2022.
Un costado más sentimental: Messi habló sobre sus hijos
Luego, ya más distendido, la charla derivó para otros temas como, por ejemplo, cómo son sus hijos Thiago, Mateo y Ciro respecto al fútbol, un deporte que practican y que consumen con cotidianeidad.
“Están todo el día con la pelota. Es un lugar donde puedo disfrutarlos yo también, vienen todos los días a entrenar, compiten, tienen partidos. Tener la posibilidad de acompañarlos en eso es espectacular. Son muy diferentes los tres”, relató Lionel Messi hablando sobre la experiencia de poder ir a ver entrenar a sus hijos en el predio del Inter Miami.
“Thiago es más pensante, organizador, mediocampista. Mateo es delantero, le gusta hacer los goles, estar cerca del arco, es inteligente para jugar. Y Ciro es más explosivo, encarador, tiene uno contra uno, es más de hacer sus jugadas”, detalló ya yendo caso por caso.
Consultado sobre cuál es el mejor, fue sincero diciendo: “La verdad que les encanta a los tres, pero pasa que ven todo ahora y si llego a nombrar a uno después me van a decir ‘eh, por qué dijiste el nombre de él’. Prefiero guardarmelo, no decir nada”.
Por otro lado, aseguró que ninguno de los tres siente el peso de “ser hijo de Messi”, al menos por ahora, en parte debido a que lo viven como algo normal dentro de su inocencia infantil.
Ante la pregunta de si tienen a otro referente además de él, dijo que no, pero que conocen a cada jugador estrella de los que brilla hoy en Europa: “Miran todo, conocen a todos y siguen a todos porque te hablan de los que están hoy: Mbappé, Vinicius, Haaland, Lewandowski, Lamine (Yamal)”, concluyó Messi.