El 2 de abril de 2013 la ciudad de La Plata sufrió una gran inundación que dejó decenas de personas muertas y marcó su historia para siempre. A 12 años de aquel evento, el Planetario de la Universidad Nacional de La Plata(UNLP), brindó un conversatorio para ahondar en el hecho.
Bajo el título “A 12 años de la inundación: Entendiendo el pasado para proteger el futuro”, investigadores del grupo de Pronóstico de la UNLP exploraron la inundación que cambió la vida de la localidad. Indagaron en los factores meteorológicos que la desencadenaron, el rol de la meteorología en estas situaciones y qué herramientas preventivas se incorporaron desde ese entonces.
La cita tuvo lugar este 4 de abril, en el marco del ciclo “Charlas de los viernes” que ofrece el Planetario platense, gratuitas y abiertas al público. Les especialistas que compartieron sus conocimientos fueron Lisandro Pinto y Serena Indira Sanchez, estudiante y licenciada respectivamente de la carrera de Meteorología en la UNLP.
Número récord: 392 milímetros en un día
Lisandro Pinto, estudiante de la UNLP a punto de ser Técnico en Meteorología, describió a la inundación del 2 de abril de 2013 como “un evento extremo y extraordinario”.
Según explicó el especialista, lo causó un sistema de baja presión que se desplazaba de forma lenta, con un movimiento de ascenso onda frontal e ingreso de aire húmedo. “Cuando tenemos estas condiciones se dan grandes acumulados de agua”, aclaró.
A su vez, agregó que el mes de abril es el que tiene mayor cantidad de sistemas de bajas segregadas, como el que originó la inundación en La Plata. “Tienen un núcleo frío que pueden generar muchas lluvias, granizo o nieve según la zona”, aclaró. Y así lo hizo aquel sistema de 2013, que en su paso desde la Cordillera de los Andes había dejado nieve en Mendoza y granizo en otras provincias del centro del país.
Imágenes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), mostraron que el 1 de abril de 2013 se generaron acumulados para La Plata de entre 50 y 100 milímetros. De hecho no fue la zona con la cantidad de lluvia más alta. Pero si lo fue el 2 de abril, cuando la Estación La Pata Aero registró casi 200 mm.
Lisandro Pinto compartió que a partir de datos de esa estación, los valores climatológicos medios desde 19991 a 2020 demuestran que en abril la precipitación media mensual en La Plata es de 98 mm.
Y si bien La Plata Aero registró 200 mm, hubo otras estaciones que anotaron mucho más. De hecho, la estación del Observatorio de la UNLP contabilizó para el 2 de abril de 2013, 392 mm. Se trata del récord histórico de la serie que observó ese lugar, con datos de 1909 a 2024.
Pinto manifestó que la diferencia entre las estaciones de observación puede deberse a la distancia con el centro de la tormenta. “Cuánto más cerca se esté puede medir más, mientras que no tan lejos en otro punto de la ciudad la precipitación puede ser menor”.
Herramientas meteorológicas: antes y después
“En el 2013 no existía lo que se llama Goes 16, un satélite que mejoró la calidad de las imágenes y el tiempo”, mencionó Lisandro Pinto en su intervención. En la misma línea se refirió Serena Indira Sanchez, Licenciada en Meteorología, futura Doctora por el CONICET y docente en la UNLP.
“El SMN es el organismo oficial con el poder de emitir avisos y recomendar a las autoridades de cada lugar qué medidas tomar ante los fenómenos meteorológicos que se pronostican”, anticipó.
En abril de 2013, el Servicio Meteorológico Nacional usaba los informes especiales como herramienta para comunicar a la población lo que sucedía en meteorología. Eran textos que describían la situación y comentaban qué zonas iban a afectarse. “Pero era una forma ambigua porque, por ejemplo, se podía referir a varias regiones geográficas”, agregó Sanchez.
Esa fue una de las pautas que fomentó el desarrollo del Sistema de Alerta Temprana del SMN, que se implementa desde el 2020. “Una de sus ventajas más grandes es la visibilidad, consta de un mapa georeferenciado con la situación que el Servicio Meteorológico tiene que informar”, explicó la licenciada.
Las alertas sirven para prevención, se comparten unos días antes. Se refieren a lluvia, tormenta, vientos, zonda, nevadas y temperaturas extremas. Se dividen en colores según la intensidad del evento: verde, amarillo y rojo.
También existen advertencias para niebla, ceniza volcánica y humo. Y por último los avisos a corto plazo, que dan datos sobre lluvia, tormenta o viento en una región más pequeña, y en un reducido período de tiempo.
El grupo de Pronóstico de la UNLP
En diálogo con Nota al Pie, Lisandro Pinto y Serena Sanchez se explayaron en las funciones de este conjunto de investigadores. “Lo conformamos estudiantes avanzados, técnicos y licenciados en meteorología”, explicaron. Los especialistas a cargo son los meteorólogos Alejandro Godoy y Horacio Sarochar.
Su tarea más importante es hacer pronósticos para La Plata y alrededores, que luego suben de lunes a viernes en sus redes sociales. “Allí sumamos mucha interacción y tratamos de hacer contenido de divulgación”, especificaron.
“En meteorología hay mucha desinformación”, advirtieron. “Los medios suelen usar a veces noticias amarillistas para llamar la atención. Nuestra tarea es llevar los datos a la gente para que no entre en pánico, entienda las cosas y sepa cuando es una situación peligrosa y cuando no”.
Así, difunden lo que dice el SMN, que es el ente oficial para emitir las alertas. En la actualidad también realizan pronósticos para Mar del Plata, y tienen la intención de sumar otras localidades bonaerenses.