
En el Día Internacional de la Poesía se vuelve interesante detenerse en la obra de una autora que exploró los cruces entre la poesía, la memoria y el género: Tamara Kamenszain. Cada 21 de marzo se celebra este arte, fecha que fue instaurada por la UNESCO en 1999 para reconocer la fuerza de la palabra poética como herramienta de socialización y reflexión.
“Poetisa es una palabra dulce que dejamos de lado porque nos avergonzaba”, así comienza Chicas en tiempos suspendidos (Eterna Cadencia, 2021), el último libro publicado por la escritora argentina antes de su fallecimiento. En este ensayo poético, Kamenszain recorre la historia de las mujeres poetas y, al mismo tiempo, entrelaza sus vivencias con reflexiones sobre la literatura.
“La palabra femicidio
No la teníamos
La palabra muso
No la teníamos
La palabra veta
No la queremos”
Poetas y poetisas, chicas y abuelas se reencuentran en esta reconstrucción de la historia: Alfonsina Storni, Delmira Agustini, Cecilia Pavón y Juana Bignozzi son algunas de las icónicas que aparecen en sus páginas. Todo el tiempo la autora propone a la poesía como un refugio y una trinchera, también como espacio de memoria e imaginación.
¿Poetisas o poetas?
A través de una voz femenina y plural, de un “nosotras”, la autora construye un panorama de los espacios de disputa dentro del terreno poético. Su escritura transita entre el pasado y el presente, entre diferentes generaciones, y entre la memoria personal y la colectiva. Con un pie suspendido en el ensayo y otro en la poesía, Tamara Kamenszain nunca pierde el equilibrio: explora ambos géneros tomando de cada uno aquello que más la interpela.
El libro se estructura en cinco partes: “Poetisas”, “Abuelas”, “Chicas”, “Antivates” y “Fin de la historia”. En todos los capítulos, la autora indaga desde la poesía en una mirada de género; habla de cosas como femicidio, divorcio, aborto y derechos conquistados.
En el primero, Kamenszain resignifica el término poetisas, habla del debate entre poetisas y poetas masculinos, y reivindicar el linaje de escritoras que abrieron caminos. En “Abuelas” la autora hace referencia a la lucha de Abuelas de Plaza de Mayo y da cuenta de cómo la memoria se vuelve política y testimonial.
Del mismo modo, el apartado Chicas explora las nuevas generaciones de escritoras y los cambios en los modos de lectura y circulación de los textos. El diálogo entre generaciones se enriquece con la perspectiva de Kamenszain, quien examina continuidades y rupturas desde una escritura que oscila entre la evocación personal y la crítica cultural a la vieja escuela.
Sobre Kamenszain
Tamara nació en Buenos Aires en 1947 y fue una de las voces destacadas dentro de la generación poética de los 70. Se exilió en México durante la dictadura y regresó al país en 1984. La escritora participó en la fundación de la Licenciatura en Artes de la Escritura de la Universidad Nacional de las Artes, de la cual fue docente.
Dio a conocer su poesía en De este lado del Mediterráneo (l973), Los No (l977), La casa grande (l986), Vida de living (1991), Solos y solas (2005), y El eco de mi madre (2010).
Por otra parte, entre sus ensayos se destacan: El texto silencioso (1983), La edad de la poesía (1996) e Historias de amor y otros ensayos sobre poesía (2000). Además, publicó toda su poesía reunida en 2012 en La novela de la poesía.