En una entrevista radial con Radio Con Vos, el abogado Francisco Oneto sugirió que el gobierno de Javier Milei podría avanzar con la suspensión de garantías constitucionales para controlar las protestas. Sin embargo, la Constitución establece límites claros a esta medida. Mientras crece la tensión política, el Ministerio de Seguridad refuerza su operativo de cara a la marcha del 19 de marzo.
Palabras de ruido tiradas al aire
Oneto, representante legal de Milei en el caso $Libra y ex candidato a vicegobernador bonaerense por La Libertad Avanza, advirtió que el gobierno podría declarar el estado de sitio. Lo afirmó el 17 de marzo durante la entrevista, en la que argumentó que esta medida permitiría al Ejecutivo «tomar control absoluto de las calles» ante lo que calificó como un «estado de conmoción interna».
La advertencia llega en un contexto de creciente malestar social. La última marcha de jubilados generó preocupación en el Ministerio de Seguridad, que prepara un nuevo despliegue policial para la movilización del 19 de marzo. Desde el oficialismo, sin embargo, las acusaciones apuntan a hinchas de fútbol y sectores opositores a los que responsabilizan por una presunta intención de desestabilización, sin aportar pruebas que sustenten esta afirmación. No olvidemos que estamos a unos días del 24 de marzo, día de la memoria verdad y justicia.
Hasta el momento, el presidente Milei no se ha pronunciado sobre la posibilidad de decretar el estado de sitio. Su única referencia a la situación fue un respaldo público a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en el que afirmó que «los buenos son los de azul». Además, citó una frase de Cristina Fernández de Kirchner durante el juicio de Vialidad: «No vienen por mí, vienen por ustedes».
¿Puede Milei decretar el estado de sitio?
La Constitución Nacional establece en su artículo 23 que el estado de sitio solo puede ser decretado por el presidente en caso de conmoción interna o ataque exterior. Sin embargo, esta decisión debe contar con la aprobación del Congreso. Las facultades delegadas que el Legislativo otorgó a Milei en la Ley Bases de 2024 no incluyen la posibilidad de declarar el estado de sitio sin intervención parlamentaria.
Desde el regreso de la democracia, Argentina sólo vivió un estado de sitio en diciembre de 2001, durante el gobierno de Fernando de la Rúa, en medio de la crisis económica y social que precipitó su renuncia.
Estados de sitio después del golpe de 1976
Dictadura militar (1976-1983): La Junta Militar mantuvo el estado de sitio de manera permanente, suspendiendo derechos constitucionales y aplicando el terrorismo de Estado con secuestros, torturas y desapariciones.
Gobierno de Raúl Alfonsín (1983-1989): Se levantó el estado de sitio en 1985, aunque se aplicó temporalmente en provincias con conflictos. En 1989, Alfonsín lo decretó durante la crisis económica, antes de adelantar la entrega del poder a Carlos Menem.
Gobierno de Fernando de la Rúa (1999-2001): El 19 de diciembre de 2001, en plena crisis, decretó estado de sitio. La represión resultante dejó decenas de muertos y precipitó su renuncia al día siguiente. Desde entonces, ningún gobierno ha vuelto a recurrir a esta medida.