
Aún sin definición establecida, se encuentra desarrollándose en la Ciudad de Buenos Aires el 32° Congreso de la Federación Universitaria Argentina (FUA), con el objetivo de votar a las nuevas autoridades quienes serán las que representen a los estudiantes de las universidades públicas de todo el país.
Esta renovación de nombres se da en un contexto de crisis a partir de las políticas de ajuste que implementa el gobierno de Javier Milei contra la comunidad universitaria. El epicentro de las actividades tiene lugar en las facultades de Ciencias Económicas, Odontología y Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), con un cronograma de actividades acorde a lo que demanda la situación actual.
En primera instancia, se desarrollaron desde las 12 hasta las 16 comisiones de debate en la Facultad de Odontología, donde representantes de cada sector pusieron en común distintas problemáticas por las que atraviesa la comunidad universitaria.
A partir de allí y desde las 18, se encuentran desarrollando en la Facultad de Medicina las votaciones para elegir a los nuevos representantes. La actual presidenta, que culminará su período tras estas elecciones, Piera Fernández De Piccoli, fue quién abrió el Congreso y será quién traspase el mando a la nueva conducción.
Uno de los espacios que se disputarán la presidencia será el Frente por la Universidad Pública, encabezada por Joaquín Carvalho de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) junto a Alexia Robledo de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, como continuidad de De Piccoli.
Por otro lado, está la Juventud Universitaria Peronista (JUP), la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA), La Mella y el Movimiento Universitario del Conurbano. De este modo, la FUA aguarda desde hace unas horas por las nuevas autoridades que serán designadas por los próximos dos años.
Una Universidad lista “para enfrentar a Milei”
No es un año más. La comunidad universitaria se encuentra bajo la presión asfixiante del ajuste impuesto por el gobierno libertario y así lo interpreta la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA).
“Por una FUA unida y de lucha para seguir enfrentando a Milei”, expresó el movimiento, quién agregó, “el gobierno quiere destruir la universidad pública y la ciencia argentina”.
A partir del ajuste presupuestario que impide un óptimo funcionamiento de las facultades como también con un impacto en el salario tanto de docentes como nodocentes, el espacio CEPA se expresó: “Cuesta mucho llegar a fin de mes, muchos compañeros eligen uno o dos días a la semana para cursar para ahorrar pasajes”.
Asimismo, remarcaron en un comunicado: “Se evidencia que faltan becas, comedores, bandas horarias, boleto universitario en muchas provincias”, al tiempo que alertaron sobre la profundización del ataque a la Universidad.
Es preciso remarcar, que las universidades tienen el mismo presupuesto que en 2023, sin actualización por inflación, por lo que muchas carreras y cursos corren riesgo en su funcionamiento. A causa de eso, las tomas en las facultades fueron cotidianas durante gran parte del año pasado, como medida de protesta ante el desfinanciamiento.
Por estos ataques que sufren las universidades públicas desde el gobierno nacional, desde CEPA consideran necesario “fortalecer nuestra herramienta gremial nacional, necesitamos una FUA unida y de lucha”. Además, pretenden un reagrupamiento que busque “la más amplia unidad y la voluntad de enfrentar los ataques del gobierno de Milei».
Las comisiones de debates dominaron el Congreso de la FUA
Antes de la votación con lugar en la Facultad de Medicina, en Odontología se desarrollaron paneles de debate sobre distintos ejes que asoman de indispensable tratamiento ante los desafíos venideros. Se implementaron seis comisiones, siendo las primeras tres desarrolladas entre las 12 y las 14.
En la primera, se debatió sobre el Presupuesto Universitario y el impacto sufrido a partir del desfinanciamiento sobre la educación superior, como así las perspectivas hacia este 2025.
La segunda comisión abarcó la Educación Superior Universitaria, donde se abordó “el rol de la educación superior latinoamericana frente a los discursos hegemónicos de la época”, su coyuntura nacional y los discursos de odio.
Esta primera etapa finalizó con el debate sobre “la universidad pública en la reconstrucción del tejido social: Rol social de las UUNN. Estudiantes y extensión universitaria”.
La segunda etapa de debates se desarrolló hasta las 16, completándose las últimas tres comisiones preestablecidas. La cuarta comisión discutió sobre la Universidad Pública, sus políticas de acceso, permanencia y egreso.
La quinta abordó todo lo relacionado a la “Soberanía, ciencia y desarrollo”, con foco en la innovación, ciencia y la tecnología y la crisis del sistema científico y tecnológico nacional.
Po último, el sexto espacio estuvo catalogado como “Movimiento universitario en unidad”, en donde trataron la articulación gremial con gremios docentes y no docentes para la construcción colectiva de la Universidad Pública.