En medio de la definición de la Liga Profesional, el fútbol argentino alcanzó otro importante reconocimiento a nivel continental gracias a una de sus grandes instituciones. Racing se proclamó campeón de la Copa Sudamericana el pasado sábado ante Cruzeiro en el estadio La Nueva Olla de Asunción, en Paraguay, y retornó al éxito internacional luego de 36 años. Asimismo, el equipo mostró un enorme entereza y compromiso inculcados por un hijo de la casa.
En ese sentido, el entrenador Gustavo Costas impregnó a su plantel con el amor que siente por la camiseta de toda la vida. Como cabeza de grupo, fue el gran responsable del buen desempeño copero y un presente deportivo que ilusiona en el ámbito local. El DT de 61 años es el máximo baluarte del equipo al momento de competir gracias a su fuerte vínculo con la institución. Su historia inició como un amuleto de la fortuna e incluso supo coronarse como jugador.
Una espera que valió la pena
A lo largo de la copa solo hubo un competidor que demostró supremacía en el juego como en el marcador, el Racing de Costas. En la zona de grupos fue el mejor con 15 unidades; mientras que, en la etapa eliminatoria acumuló 19 goles a favor y 7 en contra, con dos goleadas de por medio en Avellaneda. A su vez, solo sufrió 2 caídas en total, con la última en cuartos como visitante de Athletico Paranaense por 1-0 pero se recuperó 4-1 en casa.
El enorme triunfo en la final contra el cuadro brasileño significó retornar a la cima del fútbol continental tras la Supercopa Sudamericana de 1988. De este modo, uno de los clubes más importantes del país resurge para recobrar la memoria ganadora como en los viejos tiempos. Además, esta nueva vuelta olímpica le permite a Racing alcanzar su 40° título, el 7° internacional junto con la Copa Libertadores y la Intercontinental, actual Mundial de Clubes, de 1967.
En tanto, el primer equipo campeón del mundo en Argentina, también es acreedor de 2 Copas Aldao en 1917 y 1918, y de la Copa Honor Cousenier de 1913. En el ámbito local se mantiene en el 4° lugar de los más ganadores con 33 campeonatos, cuya última consagración fue en enero de 2023 con la inauguración de una nueva copa nacional. En aquella ocasión se alzó con la primera edición de la Supercopa Internacional 2022 al derrotar a Boca Juniors.
Por otro lado, lo obtenido en suelo paraguayo no solo impactará en el futuro cercano del club con el prestigio internacional, sino que también le permitió clasificarse a otras competiciones. En primer lugar, la Academia logró su primer título en el certamen, podrá disputar la Libertadores de 2025 y será parte de la Recopa Sudamericana 2024. Esta última tendrá como rival al ganador de la actual edición de Libertadores que saldrá entre Atlético Mineiro y Botafogo.
Además, jugará el Desafío Conmebol-UEFA contra el ganador de la Europa League de este año, una competición que no posee carácter oficial. Cabe mencionar que desde 2019 se descontinuó la tradicional Copa Suruga Bank que enfrentaba al vencedor contra el campeón de la Copa J-League de Japón desde 2008. La edición 2020 se vio imposibilita de realizarse por la pandemia del Covid-19 y desde entonces no se volvió a organizar.
A puro sentimiento
En el fútbol se arraigan vínculos con los clubes que simbolizan el inicio de un jugador o el sentimiento que viene de familia, y con Costas pasó ambas situaciones. Su amor por Racing viene desde siempre e incluso, en 1967 fue la mascota de la suerte del equipo dirigido por Juan José Pizzuti cuando solo tenía 3 años. En aquella época vivió las consagraciones de la institución a nivel local con el torneo de 1966 e internacional con los títulos de 1967.
Costas comenzó su carrera en Racing, donde realizó las divisiones inferiores y pudo debutar en Primer División en 1981 con 18 años. Pese a ganarse el puesto en la defensa, en 1983 sufrió el descenso y 1985 logró devolver al equipo a la elite. Asimismo, 3 años más tarde sería parte del plantel comandado por Alfio Basile que se consagraría en el último antecedente internacional del club.
Lo peculiar de aquel título de 1988 es que fue ante Cruzeiro, mismo rival que enfrentó como DT en Asunción. El extinto torneo reunía a todos los campeones de Libertadores y Racing eliminó primero a Santos y luego a River Plate en semifinales. Una victoria 2-1 en casa y un 1-1 en Brasil permitieron que la institución sea la primera de Argentina en consagrarse en el país vecino. Incluso, esa fue la primera edición del certamen y se quedó en Avellaneda.
Incluso, en 1992, tras regresar para su segundo ciclo, jugó otra final de ese torneo contra La Bestia Negra pero la historia fue otra. En octavos superó a su clásico rival Independiente, luego a Nacional en cuartos y Flamengo en semis. La definición tuvo un 4-0 de los brasileños como local y un 1-0 de Racing en su estadio. Dentro de su trayectoria como futbolista disputó 337 cotejos con la Academia, convirtió 9 goles y solo pudo alzarse con el título internacional.
Todo por los colores
La permanencia de Costas en el campo no fue tan extensa con un ciclo inicial en Avellaneda entre 1982 y 1989, para luego irse 3 temporadas al Locarno de Suiza. Entre 1992 y 1996 cumplió su última estadía en Racing y colgó los botines en 1997 tras un año en Gimnasia de Jujuy. De todos modos, no tardó mucho en reaparecer en su casa deportiva ya que en 1999 asumió con Humberto Maschio como una dupla técnica de la institución.
En aquel tiempo el club atravesaba su peor momento en la historia al comunicarse la quiebra por parte de su presidente Daniel Lalín. Pese a la inhabilitación para jugar y sin partido programado, 3 días después del anuncio se autoconvocaron cerca de 30.000 hinchas en el Cilindro, inclusive el DT Costas. Asimismo, fue fundamental en la edificación del Predio Tita Mattiussi, donde en la actualidad surgen las joyas del club como Lautaro Martínez o Rodrigo De Paul.
Su iniciativa comenzó con el presidente nacional Carlos Menem para solicitarle el espacio, junto a uno en Ezeiza que fue denegado. Con grandes aportes económicos de los aficionados que apostaban su amor en Costas como intermediario, Racing salió de las deudas gracias a su gente. En cuanto a lo deportivo, el técnico estuvo al frente de 50 partidos con 14 triunfos, 18 empates y otras 18 caídas, repartidos en los torneos de 1999 y el primer semestre de 2000.
Al igual que en su etapa en el verde césped, tuvo un segundo ciclo como entrenador en 2007 cuando el club vivía otro mal momento institucional. Solo duró 24 cotejos al mando con 9 victorias, 5 paridades y 10 derrotas, tiempo que fue consecuencia del mal andar general. La empresa Blanquiceleste, que gerenció al club tras la quiebra, mostró dificultades financieras y mantuvo una deuda con el DT que después rechazó al ver que la demanda pasó contra el club.
La trayectoria como técnico lo colocó a Costas en Paraguay y Perú tras el 2000 y esos dos países junto a Arabia Saudita, Ecuador, Colombia, México, Chile y Bolivia luego de 2007. En ese tiempo acumuló 9 títulos en suelo sudamericano, antes de su tercera vuelta a Racing. El llamado llegó tras el la salida de Fernando Gago y un interinato de Sebastián Grazzini. Desde el primer instante mostró su intención de lograr cosas importantes y el resto es historia.
No deja nada de lado
Si bien se podría decir que la temporada de Racing se cerró con broche de oro, lo cierto es que el equipo de Avellaneda no pretende sacar el pie del acelerador. De cara al cierre de año todavía existe la posibilidad de sumar otro título y Costas sabe que tiene un plantel capacitado para ello. La cuestión apunta a la liga argentina al ubicarse 3° a 5 unidades del líder Vélez Sarsfield. Al cuadro de Liniers le restan 3 duelos; mientras que, a Racing le quedan 4.
La final en Asunción postergó la fecha 24 de la Academia hasta la próxima semana, cuando recibirá a Estudiantes de La Plata. En caso de obtener un triunfo, el conjunto albiceleste recibiría un fuerte envión para pelear el torneo hasta el final. Con 9 puntos en juego, el Fortín, quién también está clasificado a la siguiente Libertadores junto con el Pincha, deberá medirse ante Sarmiento, Unión y Huracán.
Lo destacado del fixture velezano es que cierra todo contra el Globo, 2° en la tabla a 2 unidades de la cima. Ambos podrían llegar a la última jornada en un mano a mano o pendientes de un tercer resultado. Asimismo, el líder arrastra una negativa racha en la que empató 6 de los últimos 7 partidos. Por su parte, Racing tendrá por delante a Rosario Central antes del duelo pendiente y luego, visitará a Central Córdoba y cerrará todo en su casa contra River.
Los aficionados académicos mantiene intacta la ilusión con el buen andar del equipo, donde el manejo de Costas es sublime y abunda la calidad en sus jugadores. Juan Fernando Quintero, Adrián Martínez, quien fuera el goleador de la Sudamericana con 10 tantos, y Gabriel Arias son las grandes figuras del plantel. En caso de completarse la doble coronación, cortaríauna racha que no se da desde 2008 con Boca de Carlos Ischia al ganar en dos ámbitos diferentes.
En aquel año, el Xeneize se impuso en la Recopa Sudamericana frente a Arsenal y después, se quedó con el Apertura en el recordado triangular con San Lorenzo y Tigre. Sin duda que este conjunto de Costas es cosa seria que puede aspirar a más alegrías en el futuro de la mano de alguien que conoce al club. Será cuestión de esperar para presenciar si este formidable grupo tiene cuerda para llegar con aire al cierre del campeonato doméstico.