El Día Mundial contra la Neumonía busca concientizar sobre su gravedad y subrayar la importancia de la prevención y el tratamiento adecuado para evitar hospitalizaciones y salvar vidas.
En 2019, está infección causó la muerte de 740.180 niños menores de cinco años, lo que representa el 14% de todas las defunciones en este grupo y un 22% de las muertes entre niños de uno a cinco años. Argentina no escapa de esta realidad: entre las primeras 31 semanas de 2024, el país notificó 98.654 casos, con una incidencia acumulada de 209,6 casos por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con el Boletín Epidemiológico Nacional. Desde la pandemia, 2022 ha sido el año con mayor número de casos registrados.
Causas y diagnóstico de la neumonía: la importancia de un tratamiento temprano
La infección puede ser causada por diversos agentes infecciosos, desde bacterias hasta virus y hongos. Entre los más comunes se encuentran el streptococcus pneumoniae, responsable de la mayoría de los casos de neumonía bacteriana, y el Virus Sincicial Respiratorio (VSR), frecuente en casos virales. La neumonía suele manifestarse con tos, fiebre y dificultad respiratoria, aunque los síntomas varían según la edad y pueden incluir rechazo a la alimentación y alteraciones en el estado de conciencia en los más pequeños.
Para la Dra. Virginia Verdaguer, directora médica de MSD Argentina, el diagnóstico temprano y la prevención juegan un papel esencial. “La neumonía es una infección aguda que compromete los pulmones. Hoy contamos con herramientas efectivas para prevenir algunos tipos de neumonía. El tratamiento oportuno y adecuado también puede evitar hospitalizaciones y salvar vidas”, afirma.
Prevención: vacunas, nutrición y ambiente saludable
En Argentina, el Ministerio de Salud tiene incluido en el Calendario Nacional de Vacunación 2024 estrategias de vacunación contra el neumococo, una de las principales causas de neumonía bacteriana. A los niños se les administran tres dosis a los 2, 4 y 12 meses de vida, y se contempla también la vacunación para personas con inmunocompromiso o enfermedades crónicas y para mayores de 65 años.
La prevención de la neumonía va más allá de las vacunas; una buena nutrición y la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida contribuyen al fortalecimiento del sistema inmunológico infantil. Asimismo, mejorar los factores ambientales, como evitar la exposición al humo y mantener una buena higiene, son medidas preventivas clave.
En un contexto en el que la neumonía sigue siendo una amenaza para la salud pública, el Día Mundial contra la Neumonía es una oportunidad para recordar que muchas de estas muertes son prevenibles. La sensibilización y la implementación de políticas de salud son esenciales para combatir una enfermedad que aún cobra la vida de cientos de miles de niños cada año.